En días pasados varios importantes medios del país publicaron el caso de la doctora Bonnie Prado, destacada mujer del Chocó que obtuvo su Ph. D. en Astronáutica en la prestigiosa Purdue University, de EE. UU., alma mater del astronauta Neil Armstrong, el primer hombre en poner un pie sobre la Luna. La doctora Prado trabaja hoy en día en una compañía norteamericana que rastrea objetos en órbita de la Tierra para evitar colisiones con naves y satélites en misiones espaciales.
En esas publicaciones se cuestionó la forma como la fundación Colfuturo manejó el caso de la doctora Prado. Por ello considero pertinente dar contexto que permita entender mejor la labor de la fundación.
Desde 2012, Colfuturo gestiona para Minciencias los proyectos de formación doctoral de miles de profesionales destacados. Bajo esta cooperación, el Ministerio aprovecha el conocimiento, la experiencia, la tecnología y la excelencia en la gestión que Colfuturo ha acumulado en treinta años de existencia. Estos candidatos a doctorado se suman a los miles de profesionales que la fundación selecciona cada año en su propio programa, que también desarrolla en cooperación con Minciencias. En otras palabras, Colfuturo tiene sus propios beneficiarios y maneja también los becarios de Minciencias. La Dra. Bonnie pertenece al segundo grupo.
Minciencias apoya con dinero a estos estudiantes en sus investigaciones que les darán el título de doctores. El respaldo monetario que reciben se convierte en beca total cuando cumplen sus obligaciones, terminan su proyecto y regresan a devolver en impacto y conocimiento el generoso respaldo que recibieron.
Este es un proyecto de País, con mayúscula, que busca con formación e investigación especializada al mas alto nivel de unos pocos individuos, con alto costo por persona, impactar positivamente el desarrollo de Colombia. El mayor interés de Minciencias y de Colfuturo es que todas estas personas terminen con éxito sus proyectos y se destaquen profesionalmente.
El mayor interés de Minciencias y de Colfuturo es que todas estas personas terminen con éxito sus proyectos y se destaquen profesionalmente
Minciencias selecciona los becarios y establece reglamentos para cada promoción, que son conocidos y aceptados libremente por los estudiantes que deciden recibir el apoyo del Ministerio. Esos reglamentos equilibran la flexibilidad que requieren estos proyectos de investigación, con la clara definición de requisitos y compromisos que los estudiantes deben cumplir si quieren convertir el préstamo inicial en una beca total. Entre las exigencias hay dos fundamentales para que un programa de tan amplio calado funcione bien y dé los resultados que el país espera: claridad y comunicación frecuente por parte del becario sobre los avances en la investigación que está realizando y retorno al país al terminar.
Desde 2012, Colfuturo ha gestionado 5.863 estudiantes e investigadores en 107 programas de formación de alto nivel, para 49 entidades diferentes; la principal de ellas, Minciencias. En su propio programa, la fundación ha tenido desde 1991 hasta la fecha 12.869 beneficiarios con los que ha comprometido US$ 441 millones. El objetivo que hemos tenido ha sido siempre el de ofrecer a todas y cada una de estas personas el mejor servicio y atención, buscando que sean exitosas en sus proyectos.
En el caso del programa de becas con el Minciencias, Colfuturo está gestionando recursos públicos y no tiene margen de maniobra para renunciar a exigir el cumplimiento de todos los compromisos que los candidatos a doctor han adquirido. Esa exigencia la ha hecho siempre con amabilidad, deseo genuino de que los estudiantes tengan éxito y profunda comprensión por los problemas y dificultades normales que un proyecto de esta naturaleza conlleva.
Esta filosofía en la istración del programa ha sido un factor clave en lograr que la mayoría de los miles de estudiantes apoyados por Minciencias y gestionados por Colfuturo concluyan con éxito sus proyectos de investigación, regresen a Colombia y conviertan el apoyo que recibieron en una beca total. Ese es el estándar con el que la fundación gestionó el proyecto de la doctora Prado.
JERÓNIMO CASTRO JARAMILLO
Director ejecutivo de Colfuturo