Estados Unidos es el país que tiene la mayor incidencia sobre Colombia. Es el Estado con mayor población colombiana fuera del país (2’600.000 de personas), a donde se realiza el mayor número de exportaciones (26,8 por ciento), de donde se recibe un mayor número de importaciones (26,6 por ciento) y el que tiene una mayor incidencia en la política y la seguridad nacional, a través de cooperación internacional, por lo cual la elección del próximo presidente de Estados Unidos es esencial para nuestro país.
La campaña es una de las más reñidas de la historia, con dos candidatos con posiciones diametralmente opuestas, lo que tendría profundas implicaciones para Colombia:
El tema más importante en el debate electoral ha sido la inmigración. Trump ha prometido no solo continuar la construcción del muro en la frontera con México, sino también endurecer las medidas contra la inmigración ilegal como la deportación inmediata. Kamala Harris ha criticado estas propuestas y prefiere opciones como fortalecer la patrulla fronteriza.
Si bien tradicionalmente para los Estados Unidos la posición de Colombia ha sido secundaria, en los últimos años se ha vuelto fundamental. Según el Gobierno panameño, 520.085 personas cruzaron el Darién en 2023, lo cual para la OIM representa el 25 por ciento de los inmigrantes que intentan anualmente cruzar la frontera desde México.
Asimismo, según cifras de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, existen más de 237.000 colombianos indocumentados en los Estados Unidos, siendo uno de los 10 países con mayor número de inmigrantes ilegales en ese país. En los próximos cuatro años Colombia también entrará en la agenda de la inmigración de los Estados Unidos, bien sea a través de deportaciones masivas, si llega Trump, o de políticas de cooperación como las aplicadas en Guatemala, si llega Kamala Harris. Igualmente, la terminación del muro podría hacer que los migrantes queden estancados en corredores en Centroamérica y el Darién, generando miseria y hambre.
Según cifras de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, existen más de 237.000 colombianos indocumentados en los Estados Unidos, siendo uno de los 10 países con mayor número de inmigrantes ilegales en ese país
El segundo debate son las relaciones internacionales. Mientras Donald Trump ha señalado no tener interés en intervenir en la guerra de Ucrania y en Venezuela, Kamala Harris ha manifestado querer apoyar a Ucrania y tomar medidas contra el régimen de Nicolás Maduro. Si bien Trump tiene malas relaciones con Maduro, no ha manifestado tener mayor interés en realizar acciones frente a Venezuela, más allá de impedir la inmigración de venezolanos indocumentados.
Para las dos campañas, Colombia es un país bisagra frente a Venezuela, bien sea como mediador de una eventual solución negociada o como parte de un bloque que puede ser castigado por apoyar al régimen de Maduro. Si Estados Unidos decide aplicar medidas económicas o internacionales contra Venezuela, tendrá que tener en cuenta a Colombia para que sean efectivas, pero seguramente la situación será más relevante si gana Kamala Harris, que ha demostrado tener un mayor interés en solucionar la crisis.
El tercer tema de debate es la seguridad, que es directamente influenciado por el tráfico de drogas y la operación de la delincuencia organizada. Durante su gobierno, Trump redujo el apoyo en la lucha contra el narcotráfico por el aumento de cultivos ilícitos, mientras que Biden lo mantuvo, tendencia que podría continuar de ser elegida Kamala Harris.
Una reducción de la cooperación afectaría directamente el funcionamiento de las fuerzas armadas, pero además podría tener una incidencia en la ‘paz total’, que requiere también el apoyo de la comunidad internacional. Una posición férrea de Estados Unidos frente a la extradición haría muy complicada una negociación con los grupos armados, pues todos están involucrados en el narcotráfico, por lo cual la elección de Donald Trump puede generar dificultades en el proceso.
La decisión que tomen los estadounidenses en unos meses tendrá profundos efectos en materia de seguridad, economía y social y podría marcar también una tendencia política en muchos países de América Latina. Donald Trump ha mostrado querer centrar sus acciones en los asuntos internos, lo cual podría disminuir la cooperación internacional en seguridad, medioambiente y desarrollo, mientras que Kamala Harris ha manifestado querer tener un papel más activo en Venezuela y en general en América Latina.
Asimismo, el triunfo de Trump podría fortalecer gobiernos como los de Milei y Bukele, en los que se centraría la cooperación de los Estados Unidos para fortalecer un bloque de derecha.
LUIS FELIPE HENAO