Siguen los colados

Para nosotros los bogotanos, la situación del transporte público es muy preocupante. Por ejemplo, en TransMilenio, según estudios, pasa sin pagar el 30 % de los s. Si uno mira, no hay una sola de las 138 estaciones donde no se cuelen, en las que siempre hay por lo menos dos policías, más las personas de chaleco verde que terminan guiando al colado.

El grueso de los colados es gente muy joven, en su triste mayoría estudiantes, que salen de sus instituciones en uniforme a colarse en bloque en el sistema. Esto nos hace pensar que el futuro no es halagador, ya que estas personas nunca van a pagar, pues su formación es la cultura del no pago, sin importar los riesgos que se corren, siempre bajo la atenta mirada de los dirigentes a través de sofisticadas cámaras de TV.

En este orden de ideas, nos preguntamos: ¿cuál será el futuro del metro que se está construyendo, sin mucho horizonte? Para ese entonces la ciudadanía ya tendrá claro que no pagar es lo correcto. Y ahora, ¿quién podrá defendernos?

Sobre la emblemática Nariz de Diablo, ubicada sobre la carretera Bogotá- Girardot, continuamente se ve bloqueada la vía por el hundimiento de la bancada, lo que ocasiona trancones y accidentes. Esto es debido a los reductores de velocidad por donde circulan frecuentemente tractomulas y camiones de 50 toneladas o más, los cuales al pasar golpean la calzada y aflojan la tierra, lo que produce el desprendimiento de la bancada.

Los ingenieros viales deberían quitar estos reductores, que, además, son bastante altos y al pasar los carros, en especial las tractomulas, es como si fuera un gran martillo percutor que golpea el pavimento.

Es urgente que cuanto antes se tome una acción correctiva para evitar una tragedia y los consecuentes gastos e inconvenientes que su arreglo ocasiona cada vez que ocurren los derrumbes.

EL TIEMPO, en su editorial (22/5/2023), considera audaz la decisión de emprender una gira a África, un continente que ha cambiado significativamente en el panorama universal. La vicepresidenta Francia Márquez culminó su gira por Sudáfrica, Kenia y Etiopía, donde suscribió acuerdos de cooperación económicos, comerciales, políticos, turísticos, de género, educación y paz. Según David Castrillón, profesor de Finanzas y Relaciones Internacionales del Externado, “estos acuerdos dejan ver que hay bastante en qué cooperar”...

Con la Constitución de 1991, nuestro país se reconoce como pluriétnico y pluricultural, y con la Ley 70/72 se establece dotación de tierras para estas comunidades. Pero han sido recortadas por los apetitos de los terratenientes.

Este mismo diario (22/5/2023) nos recuerda que el último fusilado en pena de muerte fue Manuel Saturio Valencia, en 1907, acusado de ser socialista y anarquista, cuando esto “era ir en contra de todo orden establecido por el Gobierno”, según el historiador Francisco Flórez Bolívar. Claro, más grave si lo hacía un negro...