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Explicativo
Las cinco localidades de Bogotá con más casos de desaparición de niños: ¿cuántos de ellos han sido encontrados?
En los últimos tres años se han reportado 1.813 menores; en lo que va de 2025 van 258 casos de este tipo.
A las 7 de la mañana del lunes 26 de mayo de este año, Laura Sofía Ríos, una adolescente de 16 años, salió de su casa en la localidad de Kennedy para dirigirse a su colegio. Sin embargo, no llegó a la institución educativa y tampoco regresó a su hogar. Según informaron la Veeduría Nacional para el Control Social de la Gestión Pública y familiares, la menor aún no ha sido localizada.
“En este momento, rogándole a Dios para que mi hija aparezca, ya hay una supuesta casa donde la tienen. En este momento está haciendo presencia el Bienestar Familiar y la Policía de Infancia y Adolescencia”, aseguró la madre de la menor, Isabel Quintero, a este diario.
De acuerdo con el relato de la madre de Laura Sofía, desde el colegio al que asiste la joven llamaron a su casa para informarle a la familia que la adolescente no había llegado a clases. Le sugirieron entonces ar con las autoridades y alertar sobre la situación. Isabel Quintero, madre de la menor, reportó ese mismo día la desaparición ante el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y la Policía Metropolitana de Bogotá.
De acuerdo con Isabel Quintero, su hija tenía una relación con un hombre mayor de 18 años que tenía un consumo problemático de drogas y la impulsaba a consumir. En varias ocasiones, Laura Sofía era llevada a una casa de la que salía, según su madre, “golpeada, mareada y fuera de sí”. Por eso, Isabel informó a las autoridades que ese podría ser el lugar donde se encontraba su hija.
Hasta el momento, la madre no ha tenido comunicación con la adolescente, pero ha estado en o con la Policía. El viernes 30 de mayo, cuatro días después de la denuncia, el Cuerpo de Bomberos de Bogotá abriría las puertas de la vivienda ubicada en la localidad de Kennedy, donde presuntamente se encontraba la menor. Por el momento la madre no sabe si su hija fue encontrada.
Cantidad de desapariciones en Bogotá entre 2023 y el 27 de mayo de 2025. Foto:Archivo particular
Casos como el de Laura Sofía no son aislados. En Bogotá, muchos niños, niñas y adolescentes han desaparecido en los últimos años. Entre 2023 y el 27 de mayo de 2025, según datos del Instituto Nacional de Medicina Legal, se han registrado 1.813 casos de desaparición de personas entre los 0 y los 17 años de edad en la ciudad.
Aunque los datos muestran una disminución progresiva, las cifras siguen siendo alarmantes. En 2023 se reportaron 807 desapariciones; en 2024, la cifra descendió a 768, y en lo que va del 2025, hasta el 27 de mayo, se han reportado 238 casos.
Las localidades donde más desapariciones de menores se han registrado en los últimos tres años son Ciudad Bolívar, Kennedy, Bosa, Suba y Usme. No obstante, todas las zonas de la ciudad presentan reportes de desapariciones.
Ciudad Bolívar encabeza la lista con 251 casos; seguida por Kennedy, con 221; Bosa, con 186; Suba, con 175, y Usme, con 155. Luego aparecen San Cristóbal, con 145 casos; Engativá, con 128; Rafael Uribe Uribe, con 118, y Santa Fe, con 78. Más abajo se encuentran Usaquén (49), Tunjuelito (46), Fontibón (44), Puente Aranda (39) y Los Mártires (35).
Las localidades con las cifras más bajas de desapariciones de menores entre 2023 y mayo de 2025 son Chapinero (18), Antonio Nariño (17), Barrios Unidos (13) y Teusaquillo (11).
Adicionalmente, en 71 casos registrados por el Instituto de Medicina Legal no se ha podido establecer en qué lugar de la ciudad ocurrió la desaparición.
Del total de menores desaparecidos, el 60,18 % han sido encontrados, cinco de ellos sin vida. Foto:iStock
¿Por qué desaparecen?
Aunque estos no son casos de desaparición forzada –actualmente, en Bogotá no hay investigaciones activas por desaparición forzada de menores de edad según la Fiscalía General de la Nación, por lo que estos casos tendrían otras causas.
Entre los motivos, según explicó el teniente coronel Norberto Caro, jefe de la Seccional de Protección y Servicios Especiales de la Policía Metropolitana de Bogotá, se encuentran situaciones como la violencia intrafamiliar, casos de rebeldía –en los que, en su mayoría, los adolescentes deciden no acatar las normas de sus hogares– o, como en el caso de Laura Sofía Ríos, relaciones sentimentales conflictivas. De acuerdo con el coronel, en estos casos los jóvenes tienden a salir de sus casas sin intención de regresar o sin dar aviso previo a sus familiares.
“Ella conoció a un chico al cual nosotros acogimos en la casa, pero no sabíamos que él tenía problemas de droga y resulta que es expendedor. Aparte de eso, le estaba dando sustancias a mi hija. Ellos comenzaron una relación con la que nunca estuvimos de acuerdo”, explicó su madre, Isabel Quintero.
Los problemas de salud mental también pueden influir en este tipo de casos. Así lo indica Paula Andrea Amaya, psicóloga de la Universidad El Bosque que desempeñó el rol de investigación criminal de la Universidad Manuela Beltrán, quien además advirtió que este factor puede estar presente en muchas de las desapariciones, como parece reflejar el caso de Laura Sofía.
El coronel Norberto Caro agregó que la comunicación entre los niños, niñas y adolescentes con sus familias es otro factor determinante. Cuando estas relaciones son frágiles o conflictivas, se incrementa el riesgo de que los menores se alejen de sus hogares sin previo aviso.
“Si la familia no le establece unos canales de comunicación en los que se pueda generar esa confianza que permita evidenciar problemas, es probable que el menor salga y se refugie en otras personas”, aseveró Caro.
La mayoría de casos están relacionados con violencia intrafamiliar o problemas de salud mental. Foto:iStock
La atención de los casos
“Colombia, como otros países de la región, presenta en la rutina diaria un número importante de menores de edad y mujeres desaparecidas, situación que ha llamado la atención, en los últimos años, de legisladores de diferentes líneas políticas, quienes llevaron la discusión al desarrollo mecanismos que buscan la atención oportuna de los casos y evitar, de esta forma, que menores de edad y mujeres desaparecidas puedan convertirse en víctimas de delitos como trata de personas, desaparición forzada, entre otros”, explicó Medicina Legal.
Por este motivo surgió la Ley 2326 de 2023, más conocida como la Alerta Rosa. Se trata de un sistema de emergencia diseñado para atender los casos de desaparición de niñas, niños, adolescentes, jóvenes y mujeres. Su objetivo es activar un mecanismo ágil que facilite la localización de las personas desaparecidas.
Este sistema contempla una alerta multicanal que se difunde inicialmente a entidades públicas relacionadas con la seguridad, la defensa de los derechos humanos, el Ministerio Público y también a medios de comunicación, con el fin de amplificar la búsqueda lo más rápido posible.
Sin embargo, si bien está aprobada, la ley no se había implementado hasta abril de 2025 –casi tres años después de su entrada en vigor– y su reglamentación tardó ocho meses, según denunció la concejal María Clara Name. “El año pasado radicamos con el concejal Rolando García el Proyecto de Acuerdo n.º 498, que busca la creación del registro distrital de personas reportadas como extraviadas y desaparecidas en Bogotá, para así poder contrarrestar este fenómeno que hoy perturba la vida de los niños, niñas y adolescentes de la ciudad”, afirmó la cabildante. Por ello, hizo un llamado al Gobierno Nacional y al Distrito para que se implemente de forma efectiva este mecanismo.
No obstante, el teniente coronel Norberto Caro le aseguró a este diario que la Alerta Rosa sí está siendo aplicada. “Todas las entidades del Estado participan en la búsqueda inmediata de niños, niñas y adolescentes, y se coordina con instituciones del orden nacional y territorial para su ubicación”, explicó el uniformado.
Las localidades con más casos son Ciudad Bolívar, Kennedy, Bosa, Suba y Usme. Foto:iStock
Ahora bien, ¿qué tan viable es que los menores sean encontrados? Según datos de Medicina Legal, en los últimos tres años (2023 hasta el 27 de mayo de 2025), de los 1.813 menores de 18 años reportados como desaparecidos en Bogotá, 1.086 fueron hallados con vida. Sin embargo, cinco fueron encontrados sin vida, y aún hay 722 casos en los que no se conoce el paradero de los menores.
Si se analiza solo el año 2025, de los 238 casos registrados hasta el 27 de mayo, 105 menores han sido encontrados con vida. Aunque no se ha reportado ninguno sin vida, todavía hay 133 niños, niñas y adolescentes cuyo paradero es desconocido.