El drama de los pacientes en el nuevo sistema de salud de los maestros: hablan los afectados

Como ella, cientos de afiliados al Fondo de Prestaciones del Magisterio (Fomag) dicen estar sufriendo las consecuencias de lo que califican un “improvisado” cambio de modelo en la prestación de salud de los más de 800.000 s, entre maestros y sus beneficiarios, que a solo una semana de operación ha recibido todo tipo de quejas.

Así lo evidencian no solo las publicaciones en redes sociales, sino las interminables filas en las instalaciones de la Fiduprevisora, la fiduciaria con participación estatal encargada de manejar los recursos y, ahora, contratar directamente con las IPS la salud de los maestros.

Los casos son muchos y variados, como el de Leonardo Piedrahíta, un paciente diabético de la ciudad de Bucaramanga, donde se presenta una de las mayores crisis y ya completa toda una semana entera de personas acudiendo a las instalaciones de la Fiduprevisora con la esperanza de hallar una solución.

“Esto es un enredo. Soy paciente diabético insulinodependiente. El 29 de abril me emitieron la autorización para reclamar mi insulina de este mes. No pude reclamarla el 30, y llevaba desde el 2 de mayo tratando de saber cómo me van a dispensar. Apenas esta mañana me renovaron la autorización con otro sitio de dispensación. Ocho días duré sin aplicarme la insulina que necesito todos los días”, comenta Piedrahíta.

Y hay casos más graves, en los que literalmente la vida de las personas podría estar en riesgo. Este es el caso de Yamileth Varela, maestra y paciente con cáncer de seno en el Valle del Cauca. Su siguiente paso en el tratamiento es una mastectomía, que estaba autorizada para hacerse antes del 15 de mayo, pero esta fue cancelada por un cambio de operador. No ha recibido respuesta, e incluso ha tenido que recurrir a tutelas.

La docente Andrea Comas, por su parte, tiene un hijo de cuatro años con leucemia linfoblástica que requiere trasplante de médula. Hoy, dice no saber cómo ni dónde atenderán a su hijo.

Casos similares se repiten en todo el país, y principalmente se identifican en las instalaciones de la Fiduprevisora de Bogotá y Bucaramanga, donde más maestros han llegado para hacer sus reclamos.

La situación es tal que los mismos líderes sindicales del magisterio han salido a reclamarle al gobierno por lo sucedido. Una de ellas es Victoria Avendaño, ejecutiva de Fecode, quien señaló: “La improvisación en la aplicación del modelo de salud del magisterio es evidente, se continúan exigiendo citas especializadas, procedimientos pendientes, controles, terapias, medicamentos y demás servicios que garanticen la salud y la vida”.

Opinión similar es la de la sindicalista María Antonieta Cano, líder sindical y exdirectiva de la Asociación Distrital de Educadores (ADE): “La improvisación del Gobierno y la Fiduprevisora con la Salud del Magisterio no tiene límites. Hoy ni siquiera hay una red de atención del Fomag. Más de 800.000 personas a la deriva y cada testimonio de cada paciente sin atención es más desgarrador”.

Fecode, por su parte, ha convocado a los directivos de los diferentes sindicatos regionales de maestros a tomar medidas urgentes que permitan dar solución a los requerimientos de los docentes.

Pero al haber sido quien representó a los maestros en la estructuración del nuevo modelo, insiste en apoyar su implementación y en que, poco a poco, el servicio viene mejorando. Sin embargo, la convocatoria urgente da muestra de que incluso en el sindicato ya se hace imposible negar falencias en el sistema.

EL TIEMPO buscó hablar con la Fiduprevisora con el fin de dar claridad a lo sucedido. Sin embargo, la entidad se negó a dar declaraciones, ya que, además, se encuentra vinculada al reciente escándalo en la Unidad Nacional de Gestión de Riesgos y Desastres (UNGRD).

Pero esta era una situación que se venía advirtiendo hace mucho tiempo. Desde semanas antes de dar inicio el nuevo modelo, anunciado recién el mes de abril y puesto en marcha el 1 de mayo, ya se advertía sobre algunos problemas que podrían afectar la prestación del servicio de salud a los más de 800.000 afiliados al Fomag.

​Uno de ellos es respecto a la capacidad de la Fiduprevisora de contratar de manera directa con IPS de todo el país para garantizar la prestación de todos los servicios en salud.

​Y es que en el nuevo modelo se elimina la intermediación de operadores regionales, diez en total, que anteriormente eran contratados por la Fiduprevisora para cumplir con estas funciones. Ahora es la misma entidad la que, de manera directa, debe encargarse de la contratación y vigilancia de cada una de las IPS, y por lo tanto, de contratar directamente todo el sistema de salud de los maestros.

​Pero este nuevo modelo, que en principio pretendía eliminar los riesgos de corrupción que durante años rodearon al Fomag y la Fiduprevisora, ha tenido una primera semana plagada de denuncias de tratamientos interrumpidos y grandes filas de maestros buscando ser atendidos.

Mientras tanto, la Fiduprevisora continúa sin pronunciarse al respecto, pese a los intentos de este medio de obtener declaraciones respecto a las quejas reportadas.

La transición al nuevo modelo ya está siendo investigada por la Procuraduría general de la Nación y ahora está bajo la mira de algunos congresistas, uno de ellos el representante a la Cámara Andrés Forero, del Centro Democrático, quien esta mañana en la Comisión Séptima de Cámara radicó una proposición para citar a debate de control político al Presidente de la Fiduprevisora, Jhon Mauricio Marín.
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Esto con el fin de que que exponga, informe y de respuesta sobre el nuevo modelo de salud para docentes, proposición que fue aprobada, por lo que se espera en los próximos días que se dé el respectivo debate.

De acuerdo con Forero, este nuevo modelo de salud “ha sido un desastre. Esto consideramos que es un piloto de lo que eran las pretensiones del Gobierno con la reforma a la salud”.

Mientras tanto, el Fomag ha venido respondiendo a casos puntuales de los maestros afectados, pero no a anunciado algún plan de contingencia para solucionar la situación.
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​MATEO CHACÓN ORDUZ | Redacción Educación​