En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información aquí

CLUB VIVAMOS
Suscríbete
Disfruta de los beneficios de El Tiempo
SUSCRÍBETE CLUB VIVAMOS

¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo [email protected] no ha sido verificado. Verificar Correo

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión

Hola, bienvenido

¿Cual es la ciudad colombiana clasificada como la más peligrosa del mundo?
¿Cómo va el juicio al expresidente Álvaro Uribe?
¿Accidente de bus en Calarcá?
Frío inusual en Bogotá explicado por el Ideam

Detox digital: ¿por qué es tan urgente la desconexión?

Crece la tendencia de quienes deciden autolimitar el uso del teléfono móvil.

Las fundas del celular no bloquean la señal, por lo que no es necesaria quitarla.

Las fundas del celular no bloquean la señal, por lo que no es necesaria quitarla. Foto: iStock

Alt thumbnail

PERIODISTA DE SALUDActualizado:

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon
A quién no le sucedió más de una vez demorarse en una tarea, trabajo, reunión o cita por chatear o mirar las nuevas publicaciones de Instagram, Twitter o Facebook. El celular tomó en los últimos años un lugar predominante en la rutina diaria de las personas, ya sea por cuestiones laborales, de interacción y comunicación con otras personas y también como fuente de información y esparcimiento.
Si bien parece que, por una u otra razón, cada vez le dedicamos más tiempo, hay una tendencia creciente a tomar conciencia del tiempo y la forma de uso. No se trata de deshacerse del celular sino de ser capaces de llevar un control. Este movimiento resulta de la reflexión acerca de para qué y por qué usamos las nuevas tecnologías.
Judith Nahmias, de 51 años, quien vive en el barrio Belgrano, eligió hacer un uso consciente del celular. “Me di cuenta de que perdía un tiempo muy valioso deteniéndome en temas que realmente no aportaban a mi vida, viendo información y contenido de personas conocidas e incluso extrañas a mí en las redes sociales”.
Ella decidió implementar una serie de hábitos: por ejemplo, reconoce que desde hace seis meses no lleva el celular consigo cuando realiza actividad física, ya sea una clase de gimnasia o una caminata. “Delimité el horario para revisar aplicaciones, que actualmente es de una hora y media aproximadamente por día. También eliminé os de mis aplicaciones cuyos contenidos no eran relevantes para mí. Ya no uso el celular antes de irme a dormir y retomé el hábito de la lectura”, explica.
¿Los resultados? Para Judith no hay duda de los beneficios que obtuvo tras tomar esta decisión. “Les dedico más tiempo a actividades que resultan mucho más placenteras para el cuerpo y espíritu, como mejores encuentros personales, más lectura, más actividad física. Puse más el foco en los temas que me interesan para una vida mejor. Uno no toma dimensión del tiempo que pasa en las pantallas hasta que hace el cambio”, advierte.

Decisiones

¿Si me llega la notificación de un nuevo mensaje en WhatsApp lo abro inmediatamente? ¿Me siento ansioso? ¿Tengo la capacidad de istrar el tiempo en que estoy conectado? María Roca, coordinadora científica de la Fundación Ineco (que apoya programas de investigación sobre el funcionamiento cerebral), lejos de tener una mirada demonizadora de las nuevas tecnologías, considera que en muchos casos funcionan como una prótesis y logran que hagamos cosas que con el cerebro solo no podríamos hacer.
Perdía un tiempo muy valioso deteniéndome en temas que realmente no aportaban a mi vida, viendo información y contenido de personas conocidas e incluso extrañas a mí en las redes sociales
“El problema es que se han vuelto tan necesarias en la vida cotidiana que se convirtieron en un dador constante de información que sobrecarga la capacidad limitada de nuestro cerebro de procesarla”, señala la especialista en neurociencias.
Silvana Neme, de 51 años, de Villa Urquiza, sostiene: “Personalmente, decidí usar menos el celular los fines de semana. Lo apago cuando hago deportes y solo leo los mensajes de familiares, pero no los laborales. Durante la semana, de 8 p. m. a 6 a. m. lo mantengo apagado porque hay gente que tiene horarios distintos a los míos y manda mensajes a cualquier hora. En cuanto a las redes sociales, las uso poco y solamente las veo en la mañana temprano. Creo que el gran beneficio es no estar tan pendiente del teléfono. Si bien es difícil despegarse, es posible”.
Alejandro Melamed, consultor y especialista en recursos humanos, analiza que estos cambios mínimos resultan aceleradores de otros más grandes. “Por un lado, hay una especie de infoxicación o exceso de información y, por otro, hemos generado nuevos mecanismos de dependencia que antes no se nos hubieran ocurrido. En tercer lugar, hay una tendencia a desconectarse de la tecnología para conectarse con otras cosas. No es algo fácil ni simple, por algo los teléfonos celulares están implementando el aviso del tiempo en pantalla”, dice.
Justamente este tipo de información es la que usan Adriana Alicia Martino, de 46 años, también del barrio porteño de Villa Urquiza, y su familia para tener un mayor control del uso del celular a partir de recuento del tiempo en pantalla. “En la pandemia noté que usé mucho el teléfono al tener que estar encerrados en casa y empecé a sentirme cansada de la vista y con los ojos nublados. Ahora estoy intentando usarlo menos, limitarlo, más que nada por una cuestión de salud. Pero también, a nivel familiar, estamos tratando de poner límites, sobre todo por la noche para descansar mejor”, cuenta.
Para Roca, la necesidad de discutir sobre bienestar digital surge a partir de la pandemia, cuando nos dimos cuenta de la importancia de invertir en estar bien, cuidar la mente, las emociones y la salud, y cuando se intensificó notoriamente el uso de las nuevas tecnologías. “Si estas sobrecargan la capacidad que tiene el cerebro para procesar la información, se vuelven un enemigo del bienestar y surgen entonces todos estos movimientos que buscan limitar su uso”, explica.
Hay una tendencia a desconectarse de la tecnología para conectarse con otras cosas. No es algo fácil ni simple, por algo los teléfonos celulares están implementando el aviso del tiempo en pantalla
Y agrega: “una de las cosas que más se sabe que genera bienestar emocional y mental es lo que en inglés se denomina engagement y que significa estar comprometido con aquello que estás haciendo en un momento determinado. Por ejemplo, tener una conversación por teléfono y no estar mirando al mismo tiempo los mails o revisando las redes, porque eso aumenta el nivel de estrés y a la vez no te permite vivir plenamente el aquí y el ahora”.
Entonces, ¿reaccionamos a lo que la tecnología nos propone o usamos a nuestro favor lo que tiene para darnos? Para la directora científica de la Fundación Ineco, se trata de reconocer en su utilización un aspecto muy valioso para nuestro bienestar: “Que no sea la tecnología la que me dice cuándo, que no sea yo el que responde a las tecnologías, sino que sean ellas las que respondan a lo que yo necesito”, enfatiza.
El ámbito laboral no escapa a esta reflexión, y en principio hay que considerar que se vio alterado durante la pandemia cuando descubrimos que, en muchísimos casos, el trabajo a distancia era posible y exitoso. Fue entonces cuando el límite entre las horas laborables y de descanso se volvió borroso. ¿Contestamos un WhatsApp laboral que llega a las nueve de la noche?

Derecho a la desconexión 

“Aquí surge un desafío que no tiene que ver con los hábitos o las decisiones personales sino sobre cómo las instituciones, las organizaciones y las empresas empiezan a tomar en cuenta el derecho a la desconexión. En 2020 y 2021 se probó que podía haber otras formas de trabajo como el home office, pero es verdad que estas modalidades implican una sobreconexión, ese ‘te llamo a cualquier hora o te mando un mail o un WhatsApp en cualquier momento’.
Sería bueno pensar cómo hacemos para que eso tenga un límite, que no resulte invasivo y que no lleve a la gente a estar pendiente todo el tiempo de la tecnología”, asegura Valeria Odetti, especialista en educación y tecnología, coordinadora de Educación a Distancia de la Universidad Nacional de General Sarmiento.
Para Odetti, más allá de los límites que pueda poner una persona al uso de la tecnología, el derecho a la desconexión debería ser parte de una discusión que tiene que ver con las nuevas formas de trabajo. “Si vamos a cambiar las formas de trabajo y vamos a aprovechar todo lo que aprendimos con la pandemia, también tenemos que aprender a poner los límites que sean necesarios y eso tiene que ser parte de una discusión colectiva, que resulte en acuerdos contractuales”, sostiene.
Y asegura que la tendencia a poner límites de manera personal tiene que ver principalmente con la búsqueda de las personas de conectar con otras cosas, de manejar sus tiempos.
SILVINA VITALE
LA NACIÓN (ARGENTINA) - GDA

Más noticias de Salud

Sigue toda la información de Salud en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon

Conforme a los criterios de

Logo Trust Project
Saber más
Sugerencias
Alt thumbnail

BOLETINES EL TIEMPO

Regístrate en nuestros boletines y recibe noticias en tu correo según tus intereses. Mantente informado con lo que realmente te importa.

Alt thumbnail

EL TIEMPO GOOGLE NEWS

Síguenos en GOOGLE NEWS. Mantente siempre actualizado con las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en Google News.

Alt thumbnail

EL TIEMPO WHATSAPP

Únete al canal de El Tiempo en WhatsApp para estar al día con las noticias más relevantes al momento.

Alt thumbnail

EL TIEMPO APP

Mantente informado con la app de EL TIEMPO. Recibe las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en tu dispositivo.

Alt thumbnail

SUSCRÍBETE AL DIGITAL

Información confiable para ti. Suscríbete a EL TIEMPO y consulta de forma ilimitada nuestros contenidos periodísticos.

Mis portales