SEÑOR DIRECTOR:
Esta semana ocurrió en Colombia uno de los episodios más crueles de su historia. Una mujer transexual fue insultada y linchada por una turba enceguecida de odio. Le fueron fracturadas todas las extremidades y, finalmente, en presencia de su impotente madre, la arrojaron a un río, sabedores de que debido a sus múltiples lesiones no podría salvar su vida.
Hace 21 siglos, en una situación similar y con el mismo nivel de barbarie, una turba cobarde y presa del odio se disponía a apedrear a una mujer adúltera. Pero un hombre israelita logró disolver la enfurecida muchedumbre invitando a los acusadores a arrojarle la primera piedra solo aquel que estuviese libre de pecado. Todos los cobardes fueron soltando sus piedras y abandonando uno a uno el lugar, pues tenían pecados mucho mayores.
En esta nueva versión de la apología de la barbarie, el Nazareno habría detenido la turba diciendo: “Quien esté libre de pecado, que le rompa el primer hueso”. El papa Francisco, siglos después y en el mismo sentido, sentenciaría la doble moral contra los homosexuales diciendo, con sabiduría, a los inquisidores: “¿Quién soy yo para juzgar?”.
Eduardo Escobar Borrero
'Respeto institucional'
SEÑOR DIRECTOR:
Sobre el editorial 'Respeto institucional', no es la primera vez que este diario hace una crítica ponderada y respetuosa de las actuaciones del Presidente, solicitándole respeto también para las Instituciones del Estado. Esta vez, el mandatario se fue contra el Banco de la República porque no "acató" su pedido de bajar las tasas de interés. Y lo más lamentable fue su agresión a dos de las integrantes de la junta, descalificándolas con la politización y demeritándolas agresivamente. "En vez de dar los debates técnicos, opta por atacar, de forma personal, a dos codirectoras y a su exministro de Hacienda", afirma el editorial.
Esto sintetiza el respeto tan ausente frecuentemente en sus intervenciones públicas.
Y concluye: "Se puede disentir (...) pero con argumentos técnicos y sin ofensas personales". Es lo razonable, para no convertir a quien sencillamente le disiente en enemigo no solo ideológico-político, sino personal.
Ante todos estos episodios, pienso en el término "pataletas". ¿Por qué será?
Ilse Bartels L.
Revisar los urapanes
SEÑOR DIRECTOR:
Con frecuencia hemos visto en los periódicos y noticieros el caso de árboles que han caído en la ciudad con motivo de aguaceros y borrascas, y que han causado graves daños en automotores y personas.
En la avenida Park Way y la avenida 28 del barrio La Soledad -localidad de Teusaquillo- existen unos urapanes corpulentos de más de setenta años que representan un permanente peligro por su gran altura y por el volumen de su ramaje. Pregunto si la encargada de controlar esta situación podría adelantar un programa de descopar y reducir su tamaño, y así reducir este latente peligro para los vecinos.
También podría pensarse en remplazarlos por árboles nativos.
Campo Elías Lizarazo Sánchez