Los anhelos de paz

El presidente Petro, en su discurso de posesión, que fue aterrizado, trazó el plan de gobierno y seguramente sorprendió a muchos. Desde luego, el tema de paz es fundamental en este gobierno y es un anhelo y una necesidad de Colombia, pero tiene que ser pensando en la víctimas y en que haya justicia. No es un asunto fácil, claro está. Porque está de por medio el narcotráfico que alimenta la guerra. Y porque hay varios grupos sin Dios ni ley que no obedecen jerarquías. El Eln es un ejemplo de ello. Pero buscar los caminos de la reconciliación siempre será bienvenido, pues este país en paz, caminable todo, turístico, productor de comida en lugar de cultivos ilícitos, sería un paraíso.

Se necesita comenzar por hacen presencia del Estado en grandes zonas donde los grupos violentos dominan. No se les pude ceder territorio, ni dominio sobre la población.

Un impuesto a las pensiones, independiente de su monto, viola el artículo 1.º del acto legislativo 1 de 2005, que se adiciona al artículo 48 de la Constitución Política. Además, contradice las sentencia C-304 de 2019 y C-177 de 1998 (las pensiones no pueden ser catalogadas como ingreso laboral y gravarse). El nuevo gobierno debe dar ejemplo y respetar la Constitución.

“Lloran, lloran los guadales” viendo nuestra indiferencia. Somos testigo de las inundaciones en el país, en especial en la región de la Costa. Se ven las casas inundadas y todos los desastres de las lluvias, pero lo más triste es ver la capa color verdoso, que indica que hace días se está en esta situación y ni una mano amiga ha socorrido estos lugares.

¿Por qué los municipios o departamentos vecinos no han colaborado? Recordemos que hoy por mí, mañana por ti. Qué indolencia, en especial de nuestros gobernantes. Ojalá las cosas cambien y que las ayudas no sean de momento y para la foto, sino que se traduzcan en hechos reales.

Además de la expectativa por el mandato presidencial de Gustavo Petro, expuesta en el comentario editorial de este diario el domingo pasado, ahora se percibe un ambiente de esperanza por sus futuras realizaciones.

En su discurso de posesión, el nuevo mandatario confirmó la presentación al Congreso de un proyecto de Reforma Tributaria. De otro lado, reclamó por el descuido de la región amazónica y la indiferencia de los organismos internacionales. Gustó el llamado a la unión y cooperación entre todos los países latinoamericanos y también el rechazo a las políticas de invasión. También la invitación del presidente para que no haya ni un asomo de corrupción.

Definitivamente, si al actual Gobierno le va bien, igual será para la ciudadanía en general, los empresarios, y demás estamentos de la sociedad. El anhelo es que las reformas se hagan con el debido y pormenorizado estudio y mediante acuerdos entre todas las partes...