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Ucrania: ¿La guerra podría permitir el avance de derechos de personas LGBTIQ?
Desde Kiev, un activista 'queer' habla de las dificultades particulares que enfrenta esta población.
Edward Reese tiene 37 años y es una persona no binaria. Es decir, no se identifica dentro de las categorías tradicionales de ‘hombre’ o ‘mujer’. Vive en Kiev, la capital de Ucrania, desde donde atiende esta conversación con EL TIEMPO a un año de la invasión rusa a ese país, cuyo balance se contabiliza ya en decenas de miles de muertos, millones de refugiados y desplazados internos, ciudades bombardeadas y destruidas y una economía golpeada.
A finales de diciembre de 2020, Reese, periodista de formación, se vinculó a KyivPride, una de las organizaciones que, en plena guerra, sigue trabajando por los derechos de las personas LGBTIQ en Ucrania y que solía organizar los dos eventos más importantes para esa población: la marcha por la igualdad y el mes del orgullo LGBTIQ.
Ahora, desde la orilla del activismo, Reese, quien se nombra como una persona ‘queer’, usa su cuenta de TikTok para hablar de los derechos de las personas LGBTIQ en Ucrania y de cómo se sobrevive en un país en guerra.
¿Cuál era la situación de las personas LGBTIQ en Ucrania antes de la invasión rusa?
Antes de la invasión rusa, Ucrania llevaba 10 años celebrando el Orgullo LGBTIQ en Kiev, la capital. También teníamos actos conmemorativos en otras cinco ciudades y queríamos ampliar más el movimiento en 2022. Los activistas hemos estado trabajando en una ley contra los crímenes de odio y en otra de uniones civiles para parejas del mismo sexo. No cabe duda de que había homofobia y transfobia y presencia de algunos grupos radicales, como en cualquier otro país, pero estos no eran prominentes. Atacaban de vez en cuando, y siguen haciéndolo, pero no tienen ningún poder en el Parlamento ucraniano, por ejemplo. Así que Ucrania avanzaba muy rápido hacia los valores europeos de los derechos humanos. Pero ahora, por desgracia, no tenemos que luchar solo por nuestros derechos sino por nuestra supervivencia.
¿Por qué las personas LGBTIQ son un grupo específicamente afectado por la guerra, como lo identificó Naciones Unidas?
Porque no hay igualdad de derechos. En general, las personas gais, lesbianas, bisexuales y trans nos vemos más afectadas por cualquier crisis, como una guerra, porque somos un grupo marginado y tenemos problemas específicos que las personas heterosexuales y cisgénero no tienen. Las personas LGBTIQ de por sí no tenemos los mismos derechos que los demás, por eso necesitamos un tratamiento especial, y más en tiempos de guerra.
¿Hay registro de cuántas personas LGBTIQ se han visto afectadas por la guerra?
No hay manera de conocer cifras concretas sobre cuántas personas LGBTIQ han muerto o cuántas son refugiadas porque muchas siguen en los territorios ocupados y no tenemos cómo contarlas. No sabemos, por ejemplo, cuántas personas han muerto en Mariúpol, que está ocupada por los rusos y ha sido destruida, así que no tenemos cómo contar cuántas de las personas LGBTIQ que están allí siguen con vida.
Sabemos que hay alrededor de 200 soldados abiertamente LGBTIQ. Esa cifra la dio Victor Pylypenko, el líder de la organización de militares, veteranos y voluntarios LGBTIQ de Ucrania, que se creó en 2018. Él es un veterano abiertamente gay del Batallón de Voluntarios del Donbás, y en este momento es un soldado en servicio activo. Sin embargo, es muy probable que haya más personas LGBTIQ en el Ejército, pero muchas de ellas prefieren reservarse su orientación sexual o no quieren que su información personal sea pública.
Si bien no hay cifras, ¿han conocido casos puntuales de personas LGBTI que hayan perdido la vida?
Conocemos dos historias de activistas LGBTIQ que murieron en esta guerra. La primera es Elvira Schemur, una estudiante de derecho que no era soldado pero sí voluntaria en Járkov y murió en marzo en uno de los primeros bombardeos rusos. Y el otro caso es el de Roman Tkachenko, un soldado abiertamente gay de 21 años que murió en mayo en un bombardeo ruso también en Járkov.
Usted menciona problemas específicos de las personas LGBTIQ que deciden quedarse en Ucrania, ¿cuáles son sus necesidades en el contexto de esta guerra?
Ahora, por desgracia, no tenemos que luchar solo por nuestros derechos sino por nuestra supervivencia.
Como todas las personas que permanecen en Ucrania, las personas LGBTIQ necesitamos ayuda para ganar esta guerra en la que todos estamos luchando desde diferentes espacios y de muchas formas. Ahora, si hablamos de ayuda humanitaria, la población trans, por ejemplo, necesita suministros de hormonas porque ahora mismo es bastante difícil encontrarlas. Necesitamos también el apoyo de políticos internacionales que presionen a políticos ucranianos para que trabajen en la ley de uniones civiles lo más rápido posible porque los soldados LGBTIQ lo necesitan. Y también necesitamos apoyo para nuestras organizaciones, como KyivPride y tantas otras. Necesitamos donaciones porque estamos construyendo refugios y demás. Cualquier ayuda será aceptada y apreciada.
¿Por qué la unión civil es tan importante para los soldados LGBTIQ?
Actualmente en Ucrania solo los de la familia tienen derecho a ir al hospital para visitar a los soldados heridos o para recuperar sus cuerpos si mueren. La constitución define el matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer, así que las parejas LGBTIQ no tienen derechos legales si algo le sucede a uno de ellos en el campo de batalla.
¿Cuál es la situación de las personas trans con los tratamientos médicos?
Ucrania Foto:Archivo Particular
Los suministros de terapia de reemplazo hormonal para personas trans están definitivamente escasos en este momento porque todas las marcas que veníamos usando no se producen en Ucrania, por lo que es más difícil encontrar hormonas. El sistema médico no proporciona tratamientos de forma gratuita, así que tenemos que comprarlos y muchas personas han perdido su trabajo debido a la invasión rusa. Lo segundo es que, también por la guerra, gran parte del personal médico ha abandonado el país porque muchas de ellas son mujeres con niños pequeños, así que es mucho más difícil encontrar un profesional médico amable y que ayude con el proceso de transición y todas las necesidades especiales de las personas trans e intersexuales. Se puede proporcionar ayuda médica mientras Ucrania está en guerra, sí, pero no es suficiente. Necesitamos ayuda internacional.
¿Cree que las personas LGBTIQ que desean salir del país encuentran más dificultades para hacerlo?
Yo fui refugiado. Salí de Ucrania en marzo del año pasado y pasé siete meses en Dinamarca. Lo hice, en realidad, porque en ese momento no tenía a una cirugía relacionada con mi transición y tuve que ir a otro país para operarme. Puedo decir, por mi experiencia, que los problemas que enfrentamos las personas LGBTIQ refugiadas en el extranjero son también muy amplios porque hay transfobia y homofobia, por ejemplo, en los centros de refugio por parte de las personas que trabajan allí o de otros compatriotas ucranianos.
¿Qué pasa en esos refugios?
Puede ser duro especialmente para las personas trans. Conocí varias historias cuando viví en Dinamarca. A mí y a un amigo que es trans nos metieron a un refugio junto con testigos de Jehová. Y, como comprenderás, esas personas tan religiosas confundían nuestro género y no nos tomaban en serio. Puede ser bastante angustioso para las personas que de por sí ya están huyendo de la guerra, que es el mayor estrés de sus vidas. Y sobre todo para las personas trans. A veces es difícil encontrar un tratamiento médico adecuado en otros países porque el proceso de transición en Ucrania es mucho más fácil y rápido que en otros países de Europa. Por eso, muchas personas trans refugiadas no pueden continuar su transición o no pueden siquiera empezarla.
¿En los pasos fronterizos también hay discriminación?
Sí. A veces las personas en sus documentos de identidad tienen información diferente de su representación de género, y pueden tener problemas en las fronteras por eso. Pero debo decir que hay muchas organizaciones en Ucrania que ayudan a las personas a atravesar las fronteras si es lo que desean y muchas ayudan en cuestiones legales. En el caso de las personas trans, con el proceso de transición en la documentación. Si una persona quiere ayuda, la pide y los activistas LGBTIQ le tenderán una mano.
Precisamente, algunos activistas y grupos de derechos humanos consideran que la invasión rusa, de algún modo, ha generado un impulso de los derechos LGBTIQ en Ucrania, ¿es así?
Los ucranianos han empezado a ver que la homofobia, la transfobia, el sexismo y el racismo son narrativas rusas, y no quieren tener nada en común con Rusia.
Sí, la invasión rusa definitivamente cambió la situación en Ucrania con el tema de los derechos humanos porque, en primer lugar, la gente está empezando a entender que los ucranianos LGBTIQ somos iguales que todos los demás. Los ucranianos LGBTIQ también estamos luchando en el frente, trabajando como voluntarios, haciendo todo lo que podemos para ayudar a Ucrania a sobrevivir y a los ucranianos a sobrevivir como nación. Así que nos estamos haciendo más visibles en tiempos de guerra porque también estamos haciendo el trabajo que se necesita ahora mismo para derrotar a Rusia. Y segundo, los ucranianos han empezado a ver que la homofobia, la transfobia, el sexismo y el racismo son narrativas rusas, y no quieren tener nada en común con Rusia.
La gente cruza un puente destruido mientras evacuan la ciudad de Irpin, al noroeste de Kiev, durante fuertes bombardeos y bombardeos el 5 de marzo de 2022, 10 días después de que Rusia lanzara una invasión militar en Ucrania. Foto:ARIS MESSINIS / AFP
Buscan alejarse de esas ‘narrativas rusas’…
No quieren seguir ninguna narrativa rusa. Antes algunas personas eran neutrales o tal vez homofóbicas, pero ahora entienden que Putin está mostrando la transfobia y la homofobia como sus políticas de Estado. Los ucranianos no quieren estar junto a la persona y con la nación que destruyó a la suya. Es por eso que la actitud hacia las personas LGBTIQ en Ucrania ha cambiado muy rápido en este tiempo de guerra. Y también porque estamos en camino de entrar a la Unión Europea, así que tenemos que dar pruebas de que estamos preparados para ello. Una de las cosas más importantes para que Ucrania sea incluida es el tema de los derechos humanos, incluidos la unión de parejas del mismo sexo, la despatologización de la disforia de género, políticas contra los crímenes de odio, los derechos de las mujeres, etc. Creo que si no tuviéramos la invasión rusa a gran escala, y si Rusia no asustara a Europa, no tendríamos esta vía para entrar a la Unión Europea.
Sin embargo, otras voces afirman que el avance en derechos no está del todo garantizado, ya que el apoyo a las causas LGBTIQ sigue siendo 'políticamente arriesgado' para los legisladores ucranianos, ¿esto podría cambiar a largo plazo?
Sí, Ucrania sigue teniendo muchos políticos conservadores y mucha gente que no quiere aprender aún pero, como dije, la sociedad está cambiando. Los ucranianos siempre han sido muy política y socialmente activos. Tenemos un montón de mítines con alboroto político y humano cuando algo sucede, y tuvimos la ‘revolución de la dignidad’, el Euromaidán. Incluso ahora, cuando las reuniones públicas están prohibidas debido a la ley marcial, la gente encuentra la manera de protestar: peticiones en línea, Twitter, etc. Así que no creo que si un político se muestra abiertamente homofóbico, transfóbico o sexista la gente lo tome bien. Los ucranianos protestarán por ello. La nación lo detendrá porque la mayoría apoya la vía europea y defiende los derechos humanos. Hoy ya no está de moda ser homofóbico en Ucrania.