El testimonio por el que la Procuraduría pide salvar al embajador Armando Benedetti de la 'muerte política'

El 27 de septiembre del año 2021 el entonces senador Armando Benedetti y la entonces ministra de las Tecnologías de Información, Karen Abudinen, sostuvieron una discusión en la red social Twitter -hoy X- en la que el congresista le reclamó a la funcionaria por su "negligencia o posible participación en el robo" del contrato de la Unión Temporal Centros Poblados, adjudicado por 1,07 billones de pesos.

"Karen Abudinen trata de justificar su negligencia o posible participación en el robo, la forma como amañaron la licitación y cómo se 'abudinearon' la plata, con una supuesta llamada posterior a la adjudicación. ¡Hágame el favor!", expresó Benedetti. 

Ese mismo día la ministra le respondió "Senador: Le refresco la memoria. Usted sí me llamó, como hicieron otras personas. Su propósito fue el de sugerirme la cesión del contrato a una firma norteamericana. Mi respuesta fue tajante: Caducar el contrato. YO NO NEGOCIO, NI CEDO ANTE CORRUPTOS".

Este episodio sobre la supuesta petición para ceder el contrato por el que se perdió un anticipo de 70 mil millones de pesos provocó que el abogado Saúl Villar presentara una demanda de pérdida de investidura, o de 'muerte política', en contra del senador Benedetti, actual embajador del gobierno de Colombia en la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

La demanda fue itida en octubre de 2021 y se acerca a su recta final. El magistrado Hernándo Sánchez Sánchez realizó una audiencia el pasado 23 de agosto en la que escuchó a Benedetti, a su abogado y al delegado de la Procuraduría, pues el demandante Saúl Villar no se presentó. 

La acción judicial alega que Benedetti incurrió en "tráfico de influencias y conflicto de intereses" por presuntamente haberle pedido a la entonces ministra Abudinen que no liquidara el billonario contrato adjudicado a la Unión Temporal Centros Poblados, sino que se lo cediera a una empresa norteamericana.

El pasado 22 de julio el Consejo de Estado practicó una diligencia para recoger el testimonio de la exministra Karen Abudinen. En la diligencia, la exfuncionaria del gobierno de Iván Duque advirtió que nunca se sintió presionada por el senador y que la conversación que tuvieron no tuvo ningún carácter irregular.

"El senador me hizo una llamada, me preguntaba cuál era la situación jurídica que se estaba presentando en ese momento con respecto al proyecto Centros Poblados. Él me hacía la pregunta en el marco del relacionamiento que hay entre el Congreso y los ministros. Él me dice que si una alternativa no puede ser la cesión del contrato, que habían muchas empresas interesadas ahí. Yo le expliqué que es imposible por las garantías falsas. E inmediatamente el senador Benedetti me dijo que hay que hacer lo que jurídicamente corresponda. No me sentí presionada, ni coartada, ni me sentí que debía seguirle de alguna manera esa sugerencia", expresó Abudinen.

Abudinen agregó que la sugerencia del senador Benedetti  nunca se materializó, pues el contrato para la conectividad de las escuelas rurales fue caducado y posteriormente adjudicado a la empresa ETB. 

"Efectivamente el demandado, senador en ese momento, viendo la importancia de conectar a 7 mil escuelas rurales hizo una sugerencia sin presión alguna, simplemente en el marco de sus funciones como senador, de revisar la posibilidad de ceder el contrato y no caducarlo", agregó Abudinen, de acuerdo a lo informado en la audiencia de pérdida de investidura contra el embajador Benedetti.

El procurador delegado ante el Consejo de Estado Jaime Alejandro Díaz Vargas expresó que la llamada entre el senador y la ministra "se trató de una consulta o pregunta libre de presión, sustentada en la importancia estratégica que tenía el contrato y la conectividad de las zonas rurales del país que finalmente no se llevó a cabo".

En ese sentido pidió desestimar la demanda que presentó el abogado Villar. "Las pruebas aportadas no dan cuenta de los elementos para que se configuren las causales de pérdida de investidura alegadas en la demanda (...) no se acreditó que Armando Benedetti Villaneda hubiese invocado su condición ante servidor público ejerciendo algún influjo psíquico dado que no prometió dinero o dádiva, ni pretendió un beneficio en un asunto que el servidor se encontraba conociendo", agregó Díaz.

El embajador Benedetti intervino en la audiencia para excusarse por un asunto sobre la notificación y su correo electrónico y para darle paso a su abogado Pedro Felipe Gutiérrez. 

"La señora testigo manifestó que nunca sufrió o sintió presión por parte de él y mucho menos nunca el senador Benedetti invocó su condición para lograr algún beneficio o alguna conducta de la ministra. Toda la conversación que se tuvo fue dentro de un contexto informativo y que de esa conversación se derivaron propuestas para la solución de un problema que iba a poner en riesgo 7.000 escuelas. Hay que tener en cuenta que el senador también es elegido para representar a la comunidad", advirtió el abogado Gutiérrez.

ANA MARÍA CUESTA

Editora de Justicia - [email protected]