¿Quién se encarga de las reparaciones en viviendas arrendadas? : así es como se puede beneficiar

En Colombia, las leyes que regulan los contratos de arrendamiento son la norma 2029 del Código Civil y la Ley 820 de 2003. En estas se establece que el arrendador tiene la obligación de mantener el inmueble en condiciones óptimas y realizar las reparaciones necesarias para asegurar su habitabilidad. 

Así mismo, el arrendatario debe mantener el inmueble en buen estado, lo que implica asumir las reparaciones locativas, que son aquellas necesarias para mantener el inmueble en el estado en que se recibió. Incluyen tareas como pintar paredes o reparar elementos de uso diario. Son responsabilidad del arrendatario debido al desgaste natural. 

Sin embargo, en situaciones donde el deterioro se debe a fuerza mayor, eventos imprevisibles e inevitables, o mala calidad de los materiales, el arrendador debe hacerse cargo de los costos de reparación. 

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Son las reparaciones esenciales, de carácter imprescindible para que el inmueble sea habitable y se mantenga en buenas condiciones. Ejemplos incluyen el cambio de tuberías en mal estado o la reparación de sistemas eléctricos obsoletos.

De acuerdo al Ministerio de Justicia para trámites legales, estas reparaciones generalmente son responsabilidad del arrendador, ya que es su deber mantener la vivienda en condiciones adecuadas.

En consecuencia, si el arrendador no actúa con prontitud, el arrendatario puede realizar las reparaciones y solicitar el reembolso, siempre que notifique previamente al arrendador, demuestre que no es responsable del daño y que el arrendador no actuó a tiempo.

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Se trata de las que son necesarias para mantener el inmueble en el estado en que se recibió. Esto incluye tareas como pintar paredes sucias o reparar elementos de la cocina dañados por el uso diario. 

Normalmente, estas reparaciones son responsabilidad del arrendatario, dado que son el resultado del desgaste por el uso normal. Sin embargo, si el daño es causado por eventos imprevisibles e inevitables, o por mala calidad de los materiales, el arrendador debe asumir los costos de reparación.

Estas son con intenciones de mejora e incrementan el valor del inmueble. En estos casos, el arrendador no está obligado a reembolsar los costos a menos que haya dado su autorización previa. No obstante, el arrendatario puede retirar los materiales utilizados siempre que no cause daños al inmueble. 

Por consiguiente, es fundamental revisar el contrato de arrendamiento, ya que puede especificar de mutuo acuerdo quién debe pagar cada tipo de reparación, independientemente de su categoría. El contrato actúa como ley entre las partes y puede modificar las responsabilidades asignadas por defecto.

REDACCIÓN ÚLTIMAS NOTICIAS
​IVY LARRARTE ALARCÓN