Con un homenaje a Providencia, comienza el sexto y último desconectado de la serie Somos Música, que la Orquesta Filarmónica de Bogotá y EL TIEMPO regalan a sus seguidores. El tributo a la isla que sigue sufriendo tras los destrozos que causó el huracán Iota corre a cargo del grupo Creole, que con sus instrumentos y letras tradicionales del archipiélago pone fin a esta serie.
Esta vez las historias que se muestran tienen que ver con el atractivo turístico de las islas: algo que conoce de memoria Maritza García, quien vive hace 40 años en San Andrés. Desde que era pequeña, su madre la trajo desde el Chocó y ahora se dedica a actividades turísticas junto a su esposo bogotano.
Como no nacieron en San Andrés, pero son residentes, son conocidos como pañas. De hecho, aunque sus hijos nacieron en la isla, también son pañas.
Su labor fue registrada por las cámaras de Sebastián Mendoza y Joaquín Delgadillo, junto a las tomas aéreas de César Melgarejo, todo ellos realizadores visuales de EL TIEMPO.
Otra historia que protagoniza esta entrega de Somos Música es la de Gustavo Roots, guardián de la única laguna de agua dulce en San Andrés. Este accidente artificial llamado Big Pond alberga diferentes especies de animales y se constituye en medio de la vegetación isleña.
El arte y la gastronomía también forman parte de este desconectado. Sus imágenes evocadoras acompañan los arreglos musicales, que esta vez estuvieron a cargo de Juan Miguel Celis, Luis Pulido, Fabio Londoño y Ricardo Hernández Mayorga.
Con esta sexta entrega se cierra un recorrido musical de seis escalas, que empezaron en Boyacá, de la mano de los Rolling Ruanas. Siguió en los Llanos Orientales, con Raúl Numerao como invitado. El tercer episodio viajó a Santa Marta y el Caribe, con Alejandro Palacio como anfitrión.
En La Guajira el protagonismo fue del profesor Joaquín Prince y sus instrumentos autóctonos. Y en la pasada entrega, la Pacifican Power entregó la potencia de su sonido desde Cali, Buenaventura y todo el Pacífico.
Somos Música es una iniciativa de la Orquesta Filarmónica de Bogotá, en cabeza de su director general David García y su director sinfónico, Antonio Suárez. Por parte de EL TIEMPO, contó con la producción de Juan Carlos Gómez, las animaciones de Iván Camero y la dirección de Julio César Guzmán.
Los seis desconectados, con más de dos horas de música colombiana, las historias de sus gentes, sus costumbres y tradiciones, estarán compiladas en un especial que ELTIEMPO.COM anunciará en próximos días: el mejor aguinaldo acústico para quienes sienten latir en su pecho el corazón de Colombia.