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Las nuevas estrategias de Bogotá para atacar los regueros de basura y puntos críticos de arrojo de escombros

La Uaesp anunció que los operadores de aseo, a través de una flota de carros pequeños, estarán recorriendo las zonas más afectadas por los regueros. En simultánea, hay una brigada de emergencia y puntos móviles para escombros de construcción y muebles.

En la ciudad los operadores de aseo tiene rutas y horarios de recolección de la basura. Foto: Archivo EL TIEMPO - ABEL CÁRDENAS

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Guillermo Reinoso

EDITOR DE BOGOTÁ09.10.2024 15:08 Actualizado: 10.10.2024 00:00

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Tres nuevas estrategias en la lucha contra los regueros de basura y los arrojos de escombros en Bogotá puso en marcha la Unidad istrativa Especial de Servicios Públicos (Uaesp).

Se trata de los cazarregueros y las brigadas de emergencia y los ecopuntos para la recolección de escombros y que buscan atacar dos fenómenos que vienen aquejando desde años atrás a muchas zonas de la capital colombiana y que generan contaminación y vectores e inseguridad.

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Cabe recordar que los regueros y el arrojo de escombros no son nuevos en la ciudad y pareciera que contra esas conductas no funcionan ni las campañas ni las sanciones.

La primera estrategia y que hace unos días empezó a verse en las localidades es una flota de pequeños vehículos de carga que están recorriendo los barrios y recogiendo las bolsas con residuos que durante el día se van acumulando en diversos sectores, principalmente, de comercio.

Estos pequeños coches, que disponen los operadores del aseo, cumplirán un servicio adicional al de la recolección que habitualmente realizan los camiones compactadores en las rutas establecidas.

De acuerdo con Consuelo Ordóñez, directora de la Uaesp, los cazarregueros son operados y financiados por los mismos operadores en sus áreas de servicio exclusivo.

Los vehículos estarán recorriendo los sectores donde regularmente se ven regueros de residuos sólidos, ya sea porque algún habitante de calle o reciclador abre las bolsas y dejan en el piso residuos o porque animales callejeros las rompen.

Las áreas más afectadas por los regueros son el María Paz, en Kennedy; Tibabuyes, en Suba; Guayamayas, en San Cristóbal; Puerta al llano, en Usme; Illimani, en Ciudad Bolívar, y las zonas G y T, en Chapinero.

En ellas "hay muchísimos materiales dispersos", dijo la directora. Estas son zonas de actividad comercial y calificadas como muy complejas por la frecuencia con la que se presenta ese fenómeno.

“Los cazarregueros van a ir recogiendo, embolsando y llevándose esos residuos en busca del vehículo recolector que está en la zona”, explicó Ordóñez en entrevista con EL TIEMPO.

Los operadores de aseo en Bogotá empezarán a disponer de pequeños vehículos para recoger los regueros de basura que se forman en algunos sectores de la ciudad. Foto:Uaesp

Adicionalmente, según la funcionaria, los ciudadanos pueden reportar a la línea de WhatsApp número 323 4676284 para que el cazarregueros que esté más cerca pueda dirigirse al lugar y recoger esa basura y recuperar así el lugar.

Ese servicio, y para controlar que efectivamente se recojan esos regueros, los operadores del aseo tendrán además supervisores y una persona que cumplirá la función de gestor social.

Estos operarios podrán abordar a las personas y cumplir funciones orientación y concientización cuando encuentren a algún ciudadano botando residuos sólidos en el espacio público o rompiendo las bolsas negras y arrojando elementos al piso.

“Pero, por otra parte, si es del caso, también pueden llamar a la alcaldía local para hacer una acción policial contra estas personas”, señaló la directora de la Uaesp.

Según la Uaesp, la multa por botar basura en días y horarios diferentes a los establecidos por el operador de aseo o arrojar escombros en el espacio público puede ir desde los ocho salarios mínimos diarios (unos 346.000 pesos) hasta los 32 salarios mínimos diarios (alrededor de 1'386.000 pesos).

En muchas zonas de la ciudad es frecuente ver la acumulación de basura, una fenómeno que se presenta incluso después de que ha pasado el camión compactador. Foto:MAURICIO LEON. EL TIEMPO

“Más que pensar en solo imponer sanciones, queremos hacer un llamado a la cultura ciudadana, al interés de tener a Bogotá más limpia, a un compromiso general”, afirmó la directora de la Unidad istrativa.

Brigada de emergencia

Es una brigada de emergencia y de refuerzo al servicio que prestamos con los operadores.

La segunda estrategia desplegada por la Uaesp es la de las brigadas contra los arrojos de escombros. Es un servicio que será prestado por la empresa distrital Aguas de Bogotá, que, según Ordóñez, “llega a reforzar la tarea de recoger los escombros en la ciudad”.

"Es una brigada de emergencia y de refuerzo al servicio que prestamos con los operadores. Aguas de Bogotá entra a trabajar en ese mismo tema. Insisto, lo paga el Distrito", señaló la funcionaria.

Esta alternativa ya está funcionando desde el 30 de agosto y en el primer mes en que se puso en marcha, de acuerdo con la Uaesp, la empresa distrital recogió más de 4.599 toneladas de escombros. Por cada tonelada, pesada al ingreso del relleno Doña Juana, la Unidad istrativa le paga a Aguas de Bogotá 123.299 pesos.

´Brigadas de Aguas de Bogotá entraron a apoyar la lucha contra el arrojo de escombros en la ciudad. Foto:Archivo EL TIEMPO - LUIS LIZARAZO

Las cifras de la Unidad istrativa indican que en la ciudad hay alrededor de 666 puntos críticos de arrojo de escombros, en particular son zonas verdes, plazoletas, separadores viales, canales, lotes y a la orilla de las vías.

Las localidades más afectadas por esta situación son Engativá, con 153; Kennedy, con 71; Bosa, con 61; Barrios Unidos, con 56, y Suba, con 42 puntos críticos.

Cada mes se recogen alrededor de 22.000 toneladas de escombros de construcción, muebles, electrodomésticos (lavadoras y neveras, principalmente) y colchones en los llamados puntos críticos y por ese servicio la ciudad les paga aproximadamente 60.000 millones de pesos al año.

Ante estas cifras, la misma directora de la Uaesp, quien lleva cerca de 10 meses en el cargo, se declara sorprendida.

"La gente tiene toda la razón de quejarse, pero es de una dimensión absolutamente increíble la cantidad de esos materiales que la gente dispone de manera indiscriminada", aseguró la funcionaria.

Los ecopuntos móviles

La tarea de la brigada de emergencia será complementada con los llamados ecopuntos, la tercera estrategia para atacar el arrojo de residuos en la capital.

Por ese servicio la ciudad les paga a los operadores 60.000 millones de pesos al año.

Estos son unos contenedores grandes en los que los ciudadanos pueden depositar volúmenes de hasta un metro cúbico de diámetro de escombros, muebles o electrodomésticos.

Este servicio, que en principio será móvil y su ubicación se rota en diferentes sitios de las localidades, no tendrá costo alguno para los ciudadanos. En este caso el transporte y la disposición final de esos escombros los asume el Distrito, con recursos de los impuestos que pagan los contribuyentes.

Igualmente, en convenio con la Empresa de Renovación y Desarrollo Urbano (Renobo), la Uaesp proyecta para el 2025 tener ecopuntos fijos en zonas que serán adecuadas para tal fin.

Además, la entidad distrital recordó que los bogotanos, a través de los operadores de aseo, pueden entregar hasta un metro cúbico de escombros sin costo. Solo hay que llamar a la línea 110 y solicitar el servicio y programarlo.

En el caso de volúmenes adicionales, es el y el operador de la zona respectiva quienes deben acordar el valor de la recolección.

Es de recordar que cada día, cerca de 6.100 toneladas de residuos sólidos, incluidos los escombros, llegan al relleno sanitario Doña Juana, al sur de Bogotá.

GUILLERMO REINOSO RODRÍGUEZ

Editor de Bogotá

En X: @guirei24