Educarán a vecinos para que reaccionen cuando escuchen gritar a una mujer y eviten feminicidios en Bogotá

El asesinato de Jessica Vanessa Guancha Salinas dentro de un conjunto residencial en la localidad de Bosa, evidenció una vez más cómo los feminicidios pueden ocurrir sin que nadie intervenga. Ante estos hechos como estos, el Distrito lanza una estrategia que busca transformar los conjuntos residenciales en lugares de prevención. Se llama Redes Seguras en Propiedad Horizontal y busca capacitar a residentes, vigilantes y es para que sepan qué hacer si escuchan gritar a una mujer.

La madrugada del 22 de mayo de 2025 un escalofriante hecho se registró a media noche en el conjunto residencial Okapi 2. La central de radios de la Policía Metropolitana de Bogotá había sido alertada sobre una persona lesionada. Cuando arribaron los uniformados se entrevistaron con el guarda de seguridad en turno, quien los condujo a uno de los pasillos del conjunto, donde hallaron a una mujer tendida boca arriba.

Era Jessica y tenía solo  35 años. Presentaba una herida en la zona precordial izquierda, aparentemente producida por un arma corto punzante. Profesionales de salud confirmaron su fallecimiento en el lugar.

A su lado se encontraba un hombre que vestía chaqueta negra, jean azul y zapatos negros. Se identificó como Sergio Andrés Castro Reyna, de 22 años. Manifestó ser la pareja sentimental de la víctima y declaró que unos delincuentes los habían atacado cuando intentaban robarles los celulares en las inmediaciones del caño, junto al conjunto.

Pero solo fue necesario verificar las cámaras de seguridad del lugar para que los uniformados constataran que el agresor habría sido el mismo Castro Reyna. Las imágenes lo muestran en el momento del ataque. De inmediato se le informaron sus derechos como persona capturada por el delito de homicidio. También pidió a los policías que no informaran a nadie sobre su detención.

El crimen fue registrado como un homicidio por arma blanca, todo indicaba que había sido un feminicidio. No hubo testigos presenciales. La judicialización del capturado se realizó con el acompañamiento del CAI Metrovivienda.

Lo ocurrido en Okapi 2 es un reflejo brutal de una realidad extendida: las mujeres pueden ser asesinadas incluso en lugares rodeados de personas sin que nadie actúe. No hubo alertas, gritos escuchados o llamadas previas al 123. La comunidad no reaccionó a tiempo. Y ese silencio es también parte del problema.

Por casos como este, el Distrito está implementando una nueva estrategia interinstitucional. Redes Seguras en Propiedad Horizontal, liderada por la Secretaría Distrital de la Mujer (SDM) y el IDPAC (Instituto Distrital de la Participación y Acción Comunal), busca transformar los conjuntos residenciales en espacios donde sí se actúe, donde sí se escuche, donde sí se reaccione.

“El objetivo es que cada conjunto residencial se convierta en un entorno donde las mujeres se sientan protegidas, respaldadas y donde la comunidad tenga a la mano las líneas de atención para prevenir y actuar frente a las violencias”, afirmó Laura Tami Leal, secretaria distrital de la Mujer.

La estrategia ya inició su implementación. El 3 de mayo de 2025, se realizó la primera jornada de formación en el Conjunto Residencial Reserva Fontanar, y el 14 de mayo, equipos de la SDM, la Alcaldía Local de Suba y el IDPAC recorrieron varios conjuntos de la Unidad de Planeación Local (UPL) Tibabuyes para socializar la estrategia y entregar información clave.

El proyecto incluye capacitaciones dirigidas a es(as), comités de convivencia, personal de vigilancia, copropietarios y residentes. Se les enseña a identificar señales de violencia, activar rutas de atención y actuar con responsabilidad comunitaria. Además, se está distribuyendo material visible en zonas comunes con datos de o de líneas como el 123 o la Línea Púrpura Distrital (01 8000 112137).

La localidad de Suba, y especialmente la UPL Tibabuyes, fue priorizada para el inicio de esta estrategia debido a su alto número de casos. En 2024, esta zona reportó 93 valoraciones por riesgo de feminicidio, según la Unidad de Planeación Local.

El asesinato de Jessica Vanessa Guancha no es un caso aislado. Según cifras oficiales, entre enero y marzo de 2025, la Fiscalía General de la Nación tipificó 6 feminicidios en Bogotá. Ocurrieron en Suba (1), Ciudad Bolívar (1), Kennedy (2), Usaquén (1) y Bosa (1). A estos se suman tres casos adicionales que, aunque aún no han sido tipificados como feminicidios, presentan características propias del delito: uno en San Cristóbal, uno en Suba y uno más en Ciudad Bolívar.

En lo corrido del mes de abril, ya se registran  tres nuevos feminicidios, todos en Ciudad Bolívar, según los equipos de atención a violencias contra las mujeres. Estas localidades son también las que más concentran valoraciones por riesgo extremo.

De hecho, Medicina Legal reportó que las valoraciones por violencia contra la mujer con riesgo extremo aumentaron en un 57 por cient entre enero-marzo de 2024 y el mismo periodo de 2025. 3 de cada 10 valoraciones se concentran en Ciudad Bolívar, Kennedy y Bosa. En total, en los primeros tres meses de 2025 se registraron 46 asesinatos de mujeres, incluidos los feminicidios ya mencionados.

La SDM ha anunciado que la estrategia Redes Seguras en Propiedad Horizontal se ampliará mediante una alianza con la constructora Amarilo, que permitirá llevar la información y capacitación a otros sectores de la ciudad.

El enfoque está claro: la prevención no puede depender exclusivamente de la víctima, ni de las autoridades, ni de una sola institución. Es la comunidad entera la que debe activar las alertas, escuchar los gritos, golpear puertas, marcar una línea, impedir que otra mujer muera sin auxilio.

CAROL MALAVER

SUBEDITORA BOGOTÁ

Escríbanos a [email protected]