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‘Perdí 63 kilos al dejar de consumir este producto por las noches’

Cuando se dio cuenta que había ganado muchos kilos, decidió recuperar su figura.

Esta mujer se decidió a bajar de peso y para hacerlo cambió por completo sus hábitos alimenticios. Foto: Especial

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Estefani Salazar

09.04.2024 12:39 Actualizado: 09.04.2024 14:47

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Una mujer británica llamada Jo Hurley tuvo un incidente médico en 2018 que la llevó a casi perder la vida. En vez de cuidar su alimentación, decidió sucumbir ante los placeres de la comida y la bebida. Eso ocasionó que subiera mucho de peso y enseguida decidió que quería hacer algo para recuperar su figura, suprimiendo un producto de su dieta que era uno de los causantes de su aumento de peso.

Fue así que, luego de negarse a que los doctores le colocaran una banda gástrica, Jo decidió cambiar sus hábitos alimenticios para así poder volver al peso que tenía en 2018, año en el que casi pierde la vida debido a un shock séptico.

Este es el producto que la hizo subir tanto de peso

Según la información difundida por el New York Post, todo se debió a que la mujer acudió a un examen de útero en el que su médico perforó accidentalmente el revestimiento, haciendo que comenzara a presentar grandes hemorragias que la llevarían a estar hospitalizada y casi perder la vida.

Así, tras soportar tres cirugías para tratar la infección, finalmente pudo regresar a casa tras 12 meses internada, algo que la motivó a probar las delicias que no le daban en el hospital, entre ellos dos productos que la hicieron aumentar su peso a 136 kilogramos. ¿Los causantes? El queso y el vino blanco.

Esta fue la dieta que le ayudó a bajar más de 63 kilos

Siguiendo con el relato retomado por el medio citado, la mujer no se había dado cuenta del peso que había ganado hasta que en 2021 fue a una fiesta de Año Nuevo con viejos conocidos. Allí fue atormentada por las figuras esbeltas de las asistentes, mismas que la hicieron saber que tenía que hacer algo para estar feliz consigo misma y, lo más importante, no volver a caer en un hospital.

Durante Semana Santa aumenta el consumo de pescado. — El pescado se convirtió en uno de los pilares de su alimentación. Foto:iStock

Fue así que Hurley optó por dejar de atiborrarse con las galletas, queso y papas fritas, que solía acompañar con vino, para decirle hola a un estilo de vida más pleno y saludable, con lo cual logró bajar más de 63 kilos, recuperando así la figura que solía tener en 2018.

Pero ¿cuál fue la dieta que siguió? Según la información difundida por el New York Post, Hurley pasó de desayunar tres rebanadas de pan tostado y cereal a ingerir frutas o yogurt en las mañanas. Mientras que en las tardes dejó de comer emparedados, papas fritas y chocolate para ingerir solo una taza de sopa.

En cuanto a la cena, esta mujer de 50 años de edad solía comer pasta, boloñesa, la cual sustituyó por pescado, verduras y pollo, despidiéndose para siempre del vino blanco, ingiriendo en su lugar mucha agua y té negro.

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