Migraña: ¿cómo prevenirla y cuándo consultar con un médico?

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, los trastornos por cefalea (caracterizada como dolor de cabeza recurrente) están entre los problemas de salud más frecuentes en el mundo. Sin embargo, la autoridad reconoce que dichos trastornos son de los menos diagnosticados y tratados oportunamente.

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En este sentido, existe más de una docena de tipos diferentes de trastornos por cefalea. El más discapacitante y frecuente es la migraña, que afecta a más de mil millones de personas en todo el mundo.

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La migraña es un trastorno primario por cefalea, lo cual significa que es producto de un funcionamiento anormal del cerebro. A diferencia de los trastornos secundarios por cefalea, la migraña puede no ser el síntoma de una enfermedad oculta, como una infección o un tumor.

Otros trastornos primarios por cefalea que ocurren con frecuencia son, entre otros, la cefalea en racimos, cuyos ataques duran de semanas a meses y que normalmente incluyen un dolor intenso en o alrededor del ojo por hasta tres horas, y la cefalea tensional, que suele presentarse con dolor leve a moderado y es crónica.

Algunos trastornos se relacionan con ciertas actividades, ejercicio, por la ingesta de alcohol, alimentos como carnes procesadas, trastornos de sueño, estrés, postura inadecuada, malos hábitos alimentarios como largos periodos de ayuno, entre otros.

Al respecto, la neuróloga Amaal Starling, experta en dolor de cabeza y migraña en Mayo Clinic de Phoenix (Estados Unidos), explica que “los desencadenantes de la migraña son muy personales. Aquello que desencadena una migraña en un paciente puede no hacerlo en otro”.

De hecho, según cifras de la entidad, la migraña es una de las enfermedades más discapacitantes de la humanidad en días de capacidad por años vividos. Se ha logrado establecer que las mujeres son las más afectadas por este malestar: una de cada cinco sufre de migraña, y a ello se suma que uno de cada once niños también la padece, seguido del género masculino, pues uno de cada dieciséis hombres experimenta esta dolencia.

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La doctora Starling afirma que “los ataques más tradicionales de la migraña se presentan durante toda la adultez y aunque el dolor relacionado con este dolor disminuye en los adultos mayores, las características propias de esta, como la sensibilidad a la luz y al sonido, la náusea, el vómito y el aura, son quizás más notorias”, sin dejar de lado que el pico de prevalencia de esta enfermedad se sitúa entre los 25 y los 55 años –la etapa más productiva de la vida–, por lo que la reducción de la productividad de las personas y los días de trabajo perdidos dejan huella no solo en la salud de los empleados, sino también en la economía de los países.

“En general, recomiendo seguir una alimentación antiinflamatoria, como la dieta mediterránea, que incluye frutas, verduras, frutos secos y legumbres, así como ingerir alimentos ricos en magnesio y productos integrales, además de evitar tanto la comida procesada como el ayuno. Recientemente salieron algunos datos que recomiendan consumir más ácidos grasos omega 3 a través de pescados grasos, como el salmón, las sardinas y la caballa”, afirma la médica.

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Abusar de los medicamentos para el dolor, incluido tomar analgésicos de venta libre o de venta bajo receta médica y algunos medicamentos para la migraña más de dos veces por semana puede desencadenar una cefalea por efecto rebote, conocida también como dolor de cabeza por abuso de medicamentos.

“Cuando alguien tiene ataques de migraña cuatro o más días al mes, es oportuno considerar un tratamiento preventivo; pero cuando alguien tiene ataques de migraña poco frecuentes, o sea que ocurren menos de cuatro veces al mes, recibir un tratamiento específico cuando sea necesario puede ser más eficaz que tomar analgésicos de venta libre, como ibuprofeno”, concluye la neuróloga Starling.

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