Juan Fernando Cristo: 'En Cauca a veces se mezcla el conflicto armado con el social. Eso hace mucho daño'

El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, estuvo este fin de semana en el Cauca hablando con los diferentes sectores para buscar soluciones a las problemáticas del departamento. En diálogo con EL TIEMPO el jefe de la cartera política hizo un balance de lo que dejó la agenda.

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Es un punto de partida para abrir lo que sería un diálogo interétnico, intercultural, que pueda permitirnos buscar un acuerdo regional en el Cauca. El Cauca es un departamento de enormes potencialidades y riqueza, en el cual tenemos que ser capaces de convivir. En el Gobierno estamos empeñados en garantizar que puedan convivir todos los caucanos, los afros, los indígenas, los campesinos, los empresarios, los trabajadores, los mestizos. Que los únicos enemigos que reconozcamos en el Cauca sean los violentos que han querido durante décadas destruir ese bello territorio. De esta visita tuvimos un diálogo franco y abierto con todos: con alcaldes, con gobernadores, con los indígenas, con los campesinos. Nos falta avanzar con los afros tal vez, con gremios y empresarios. Revisamos el tema de seguridad, el tema de la conflictividad social. En Cauca a veces se mezcla el conflicto armado con el social. Eso hace mucho daño.

Le hemos pedido a Naciones Unidas, a la MAPP OEA, a la Defensoría del Pueblo y a la Iglesia Católica que contribuyan a facilitar ese espacio de diálogo. Todos los sectores han estado dispuestos a participar en él y tenemos que lograr un espacio suficientemente representativo con los liderazgos más importantes del departamento que garantice avanzar en unos mínimos acuerdos de convivencia para todos los sectores en el Cauca. Ese es el propósito fundamental. Más allá de la coyuntura, no es resolver un conflicto puntual, la discusión sobre un decreto, no es resolver los temas puntuales de cada sector, sino mirar en su conjunto al departamento.

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Tiene que ser lo que propongan los distintos sectores. El Gobierno quiere facilitar ese espacio, le ha pedido a estas instituciones que ayuden, pero eso no es posible sin la voluntad de todos los sectores. Si hay voluntad, si hay ánimo constructivo, yo creo que se abre un espacio de un diálogo permanente y no que cuando haya conflicto en el Cauca se bloquee, por ejemplo, la vía panamericana como el único medio de diálogo y el único espacio que se hable para la concertación, a todos los sectores de la población. Debe ser abierto, tenemos que empezar por unos mínimos básicos de convivencia: bajar el nivel de la confrontación social, evitar la estigmatización y la descalificación de cualquiera de los sectores, que se reconozcan unos a otros, hay sectores radicales en cada una de esas poblaciones que no se reconocen mutuamente, ese es un principio fundamental. Y otro principio fundamental es que toda la sociedad civil del Cauca se ponga de acuerdo en que el único enemigo que tenemos al frente son los violentos.

No, no, no, para nada. Eso es el principio fundamental. Tiene que ser una participación de la sociedad civil organizada, de los distintos voceros y sectores de esa sociedad, de las juntas de acción comunal, llevar eso hasta el territorio, los resguardos indígenas, los consejos comunitarios, con una representatividad de cada uno de esos sectores, porque lo que estamos viendo no solamente en Cauca, sino en todo el país, es la fragmentación de la representatividad. Nadie se siente representado, nadie, y eso dificulta mucho la búsqueda de acuerdos en Colombia y en el Cauca sí que se vive.

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Sí, avanzamos en acuerdos. Todos mostraron disposición a participar en este diálogo interétnico, intercultural.

JUAN SEBASTIÁN LOMBO DELGADO

Enviado especial de EL TIEMPO a Cauca