Lo primero que hizo Mariana Pajón tras su eliminación en los Juegos Olímpicos de París la semana pasada fue abrazar a su mamá. Se fundieron en un abrazo largo y apretado en medio de las lágrimas de la atleta. Porque así es, no hay nada como el apoyo de una madre en los momentos difíciles. Unas horas después, ya más tranquila, Mariana reflexionó sobre su carrera ante los medios, incluyendo este mismo diario, y lanzó esta frase contundente: “Quiero decirles a los jóvenes que sueñen, que no esperen a que las oportunidades lleguen, vayan por ellas”. Su mensaje encierra una sabia lección de vida: no basta con soñar, hay que actuar.
Colombia está llena de ejemplos de personas que con disciplina y dedicación han superado retos y alcanzado sus metas. Es cierto que las condiciones no siempre son las óptimas. A veces los sueños parecen lejanos y las adversidades pueden llegar a nublar la esperanza. Sin embargo, miles de colombianos han logrado trascender sus entornos gracias a una actitud resiliente. Aunque las circunstancias externas sin duda impactan en el desarrollo personal, es la capacidad de ver más allá de los obstáculos lo que marca la diferencia.
Aunque las circunstancias externas sin duda impactan en el desarrollo personal, es la capacidad de ver más allá de los obstáculos lo que marca la diferencia
Esperar pasivamente nunca nos llevará a donde queremos llegar. No podemos depender de la suerte o del destino para alcanzar nuestros objetivos. La frase de Mariana es una invitación a que seamos protagonistas de nuestra historia, creando nosotros mismos las condiciones para desarrollar todo nuestro potencial. La vida está llena de posibilidades, y quienes están dispuestos a salir a buscarlas y aprovecharlas son los que prosperan. En cada desafío hay una oportunidad esperando a ser descubierta, y en cada oportunidad, la opción de un futuro mejor.
Mariana Pajón es una inspiración para los colombianos. Aunque esta vez no logró el triunfo en París, su pasión y entrega continúan siendo un faro de motivación y esperanza. Si bien ha ganado tres medallas olímpicas en competencias anteriores, las verdaderas victorias no se miden solo en trofeos, sino en la capacidad de levantarse, aprender y seguir adelante con más determinación. Su fortaleza con seguridad la hará brillar en nuevos escenarios.
Los invito a seguir esta conversación en redes sociales con la etiqueta #Nobastaconsoñar, para reflexionar sobre las historias de vida de colombianos que, como Mariana, se negaron a esperar.
DIANA PARDO
En X: @Diana_Pardo