Ya se están viendo los resultados de no tener conciencia de la inseguridad digital que se está expandiendo por el mundo. Los ataques de los ciberdelincuentes están aumentando desproporcionadamente, convirtiéndose en el covid del mundo de los unos y ceros.
La información encriptada por los secuestradores digitales en tantas entidades conectadas con las redes IFX y almacenando en su nube muchos datos no se podrá usar hasta que se pague el rescate en forma digital, lo cual hace que sea casi imposible de rastrear. Lo peor es que, aunque se pague, es posible que no entreguen la llave requerida para desencriptar todos los datos. O sea, se pueden perder. Recuperarlos va a ser muy difícil.
¿Por qué las entidades no sacan copias de respaldo de todos sus datos en las horas muertas de sus aplicaciones? Es decir, en horas en que no se usan. Si esto se hubiera hecho, solo se perderían aquellos almacenados en las bases de datos desde su último respaldo. Si la entidad diariamente mueve muchos datos, se deberían sacar copias de respaldos con más frecuencia. Esta sería la vacuna contra este covid digital que está generando muchas entidades gravemente enfermas.
Valdría la pena saber cómo va a responder IFX, ya que fue ella la penetrada por los ciberdelincuentes para generar esta parálisis digital en las entidades gubernamentales de Colombia. Habría que leer detalladamente los contratos firmados para usar este servicio, pero se debe tener en conocimiento que alguna responsabilidad fue de esta compañía.
Otro factor importante es que el eslabón más débil de la cadena de seguridad es el ser humano. Por esto hay que establecer un proceso conferencias para que empleados y s del mundo digital de una compañía entiendan cuáles son las debilidades, qué no deben hacer para dejar puertas abiertas, que entiendan qué es ingeniería social y que se acomoden a la seguridad que impida que les penetren sus redes de datos.
Es importante que entiendan que navegar por sitios porno los puede afectar, oprimir en enlaces de correos que no se sabe de dónde vienen es muy riesgoso, cambiar frecuentemente su clave y muchas otras cosas más se les debe enseñar.
En fin, ya invadieron entidades del Gobierno y se están viendo las consecuencias. Se debe pensar en cómo evitar que vuelva a pasar, porque como se ha dicho: el hecho no es que no lo vayan a penetrar sino cuándo lo van a hacer.
GUILLERMO SANTOS CALDERÓN