Los responsables de las áreas de tecnología, informática y comunicaciones de las empresas tienen que cambiar su forma de pensar si quieren lograr los mejores resultados. La tecnología está transformando empresas de una forma importante, como se ha visto desde que empezó la pandemia.
Con la inteligencia artificial, análisis de datos, procesamiento de lenguaje y otras, las empresas que los usen para reducir sus procesos complejos van a poder lograr que se obtengan mejores resultados y en tiempos bastante más cortos. Esto requiere que siempre se esté pensando en un paso adelante de lo que está pasando para ver cómo se puede automatizar, cuánto se puede demorar y qué resultados se pueden obtener. Por ejemplo, si se tiene un centro de datos en la empresa, se debería empezar a mirar la posibilidad de moverse a una nube, híbrida o no, cuáles serían las ventajas que se obtendrían con esta decisión y qué se debería hacer para lograrlo.
Otro factor importante, así no suene bien, es que se les pueda ofrecer a los trabajadores de TIC un ambiente agradable y motivaciones para que se les reconozca su labor. En muchas empresas los consideran ‘nerds’ y personas extrañas porque se la pasan las 24 horas frente a la pantalla de su computador. Hay que crearles un buen entorno que los motive a trabajar con ganas.
Las aplicaciones se deben hacer conocer en la empresa, así como todos los proyectos que se van a desarrollar, porque la tecnología debe estar en todas las cabezas, así no sean expertos. Lo que se haga en el área de las TIC no debe aislarse como en un silo, sino que debería contar con las sugerencias de los que las pueden hacer y compartir los logros en una forma extensa dentro de la compañía.
Los proyectos deben siempre tener una prioridad, que debe ser apoyada por las altas directivas, para que no se pierda el esfuerzo en varios a la vez. Esto no quiere decir que se deba estar ejecutando solo uno, pero se debe tener una prioridad.
Ahora que las TIC se han convertido en lo que va a definir quién va a tener éxito y quién se va a hundir en el futuro, es muy importante que la transformación digital se haga con orden, con objetivos claros y con cronogramas específicos; y, más que todo, que los responsables cambien su forma de pensar.
Colofón. Increíble que los directivos de los equipos en la Dimayor hayan decidido que no va a haber segundo torneo en la Liga femenina de fútbol. Nunca es tarde para echar para atrás esa decisión y darles esa oportunidad a nuestras jugadoras, que bien se la merecen.
GUILLERMO SANTOS CALDERÓN