En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información aquí

CLUB VIVAMOS
Suscríbete
Disfruta de los beneficios de El Tiempo
SUSCRÍBETE CLUB VIVAMOS

¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo [email protected] no ha sido verificado. Verificar Correo

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión

Hola, bienvenido

¿Cual es la ciudad colombiana clasificada como la más peligrosa del mundo?
¿Cómo va el juicio al expresidente Álvaro Uribe?
¿Accidente de bus en Calarcá?
Frío inusual en Bogotá explicado por el Ideam

Opinión

Grandeza americana

Trump se equivoca al pensar que lo que hace ‘grande’ a Estados Unidos es solo su fuerza económica y militar.

Alt thumbnail

EMPRESARIO E INGENIEROActualizado:

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon
Dice el dicho que cuando uno solo tiene un martillo, a todos los problemas les ve forma de clavo. Ese parece ser el caso de Donald Trump, cuya caja de herramientas contiene un solo utensilio: ‘El arte de la negociación’, el ‘best seller’ que resume la filosofía de vida del magnate, derivada de su trayectoria como empresario –no siempre exitoso– de bienes raíces.
Trump ha prometido poner en práctica su talento de negociante para “hacer a Estados Unidos grande otra vez”. El problema, sobra decirlo, es que el mundo no es un San Andresito, sino un amasijo de intereses encontrados. Muchos de ellos no tienen que ver con dinero y mercancías, sino con pulsiones políticas, sociales, nacionalistas, religiosas, etc., que no se prestan fácilmente a la transaccionalidad.
Trump, sin embargo, piensa que puede ganar el juego de la geopolítica a través del garrote de los aranceles y la zanahoria de las negociaciones. Por ahora, las reacciones de los mercados y el envalentonamiento de la China parecen no darle la razón. Pero falta tela por cortar. En lo comercial, amanecerá y veremos.
En cambio, con relación a la doctrina de “hacer a América grande de nuevo” ya podemos cantar fracaso.
El inquilino de la Casa Blanca cree que lo que hace, o hizo, “grande” a EE. UU. es solo su fuerza económica y militar. Y desde luego, esos pilares sostienen el poderío estadounidense. Pero no son lo que lo hace grande, solo lo que lo hace temible. Trump, en su ceguera mercantilista, no se percata de que la grandeza de su país, lo que lo distingue de los imperios del pasado, reside en otra parte, en atributos que él no ve, o no valora. Y que están siendo demolidos por su istración.
Me refiero, por ejemplo, al investigador francés al que le fue negada la entrada al país por guardar mensajes contra Trump en su celular. O a los deportados enviados a cárceles de máxima seguridad en El Salvador: simples migrantes ilegales encerrados junto a curtidos asesinos en un país ajeno, sin recurso jurídico. O a los estudiantes internacionales que han perdido sus visas por participar en manifestaciones propalestinas.
Trump piensa que puede ganar el juego de la geopolítica a través del garrote de los aranceles y la zanahoria de las negociaciones
Sí: en ninguno de esos casos se trata de ciudadanos estadounidenses. En todos ellos se puede alegar que EE. UU. tiene derecho a decidir quién entra al país y quién no. Qué duda cabe.
Pero, si de lo que se trata es de hacer a América “grande otra vez”, hay que preguntarse qué hizo a América “grande” alguna vez. No fueron solo sus bancos y sus portaaviones. Fue el prestigio de sus ideas. Ideas inéditas, como las libertades de culto y de expresión. O como un imperio de la ley respetuoso de los derechos humanos y la presunción de inocencia.
Por supuesto: allá también se cometen injusticias, arbitrariedades y abusos, como en todas partes. “De la madera torcida de la humanidad no se ha hecho cosa recta alguna”, dijo Kant. Pero el pueblo estadounidense tiene una capacidad singular para tomar el sinnúmero de tensiones que atraviesan a esa sociedad –entre el norte y el sur, entre negros y blancos, entre las costas y el interior, entre el conservadurismo y la contracultura, entre la ciencia y la religión, etc.– y transformarlas en cine, literatura, música, moda, cultura, filosofía, tecnología, productos de consumo, etc. En fin: en ideas.
Fueron esas ideas las que hicieron grande a EE. UU. en sus mejores épocas, las que hicieron que todos hayamos querido ser un poco gringos: oír rock, vestir de ‘jean’, beber Coca-Cola, fumar Marlboro, hablar inglés, ganar en dólares. Soñar con estudiar en sus universidades o con ganarse sus grammys y sus óscares. Todo aquello que Trump devalúa con su parroquialismo incomprensible.
Puede que, bajo la doctrina Maga, EE. UU. sea más rico o más fuerte o incluso más temido. Pero ser grande es otra cosa.
THIERRY WAYS
En X: @tways

Sigue toda la información de Opinión en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon

Conforme a los criterios de

Logo Trust Project
Saber más
Sugerencias
Alt thumbnail

BOLETINES EL TIEMPO

Regístrate en nuestros boletines y recibe noticias en tu correo según tus intereses. Mantente informado con lo que realmente te importa.

Alt thumbnail

EL TIEMPO GOOGLE NEWS

Síguenos en GOOGLE NEWS. Mantente siempre actualizado con las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en Google News.

Alt thumbnail

EL TIEMPO WHATSAPP

Únete al canal de El Tiempo en WhatsApp para estar al día con las noticias más relevantes al momento.

Alt thumbnail

EL TIEMPO APP

Mantente informado con la app de EL TIEMPO. Recibe las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en tu dispositivo.

Alt thumbnail

SUSCRÍBETE AL DIGITAL

Información confiable para ti. Suscríbete a EL TIEMPO y consulta de forma ilimitada nuestros contenidos periodísticos.