En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información aquí

Suscríbete
Disfruta de los beneficios de El Tiempo
SUSCRÍBETE CLUB VIVAMOS

¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo [email protected] no ha sido verificado. Verificar Correo

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión

Hola, bienvenido

¿Cual es la ciudad colombiana clasificada como la más peligrosa del mundo?
¿Cómo va el juicio al expresidente Álvaro Uribe?
¿Accidente de bus en Calarcá?
Frío inusual en Bogotá explicado por el Ideam

Recuerdos con elefantes

En Colombia el recuerdo parece servir para que no se nos olvide caer en las mismas cosas.

Alt thumbnail

Actualizado:

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon
Las inesperadas revelaciones de la exnuera del presidente Gustavo Francisco suscitan una sensación de déjà vu, de haber vivido ya esos mismos avatares con las caras de otros actores con otros nombres pero con los mismos desmentidos. Y el sentimiento se acentuó en mí este amanecer de hielo, cuando tropecé con una revista vieja escapada de algún anaquel despistado de la biblioteca, aprovechando las sombras de la noche. Soy un acumulador de impresos, y a veces saltan de las carpetas cuando menos se esperan, y se me enredan en las pantuflas por la mañana. En la carátula de la revista un cura español en los huesos, las barbas ralas, gorra de obrero, y con más cara de torpe común y corriente que de santo asesino, seguía mirando este mundo como si nada hubiera pasado desde su muerte causada por una disfunción hepática.
(También le puede interesar: Virtudes y culpas)
Todo sucede en este país como si la nación se empeñara en contarse un cuento viejo con otra ropa. La revista traía las fotografías de dos ministros amigos míos (relativos), que acabaron presos cumpliendo con las tareas propias de las postrimerías de ciertas personas demasiado ambiciosas de poder y de brillo social aunque sea por sendas transversales; una columna de María Isabel Rueda sobre las últimas noticias de la casa Pastrana; y otra de Antonio Caballero sobre el carácter militarista, un poco cómico además, del Eln, y sobre sus ataques a la estructura petrolera con la saña del misticismo enfurecido. Ahí siguen, estimado Antonio, secuestrando geólogos, reclutando niños, matando finqueros. Justificados en la fantasía de que existe una cosa malvada llamada capitalismo que sabotea la felicidad humana. Y ellos son la reencarnación de don Quijote, Simón Bolívar y Jesucristo en un solo Coce. Pura teología trinitaria.
El vicio preponderante hoy en Colombia es el engolosinamiento en los malos tiempos, la fijación masoquista en los hechos dolorosos del ayer.
Algo leí sobre unos acuerdos llamados de la Casa de Nariño por los cuales las fuerzas vivas del país, incluidos el partido de los comunistas y el presidente Barco, reformarían la Constitución para construir una auténtica democracia de participación. Así dice la revista. Sin quitar una coma. Y dice también que algunos de los asistentes declararon su temor ante el peligro de que el tratamiento político de las guerrillas acabara en impunidad. Y el tema me sonó conocido.
Por una razón obvia, el aviso de un joven candidato al concejo de Bogotá, “vote tranquilo, vote liberal”, me trajo a la memoria el elefante de circo que mató a un pordiosero en la calle 26 cuando quiso birlarle unas cerdas de la cola pues le habían dicho que las señoras ricas las pagaban bien para hacerse pulseras de la buena suerte. El pobre creyó el cuento, y el justamente indignado elefante, desconocedor del concepto de la paz total le propinó una patada, y siguió comiendo. El joven candidato al concejo, andando los años se convirtió en ministro, a muchos les pasa, para figurar en otra fábula con mamífero placentario que marcó un hito en la historia de Colombia. Fue cuando uno de estos paquidermos con fama de memoriosos se quiso meter por la ventana en el dormitorio en la India a un pretendiente del liberalismo de izquierda a la presidencia, si no fue una broma de caucho de David Sánchez Juliao, y el bichazo del orden de los proboscídeos le cayó de perlas a un obispo para una metáfora que hizo carrera a propósito de otro incidente con caletas llenas de plata, que a veces se vuelve a mencionar por una fastidiosa costumbre de Mnemosine.
El vicio preponderante hoy en Colombia es el engolosinamiento en los malos tiempos, la fijación masoquista en los hechos dolorosos del ayer, para decirlo en aire de bolero, y se abren museos de la memoria en todas partes, conceptuales y testimoniales en busca de una verdad histórica esquiva. Alguien dijo que un país que no recuerda su pasado está condenado a repetirlo. Pero en Colombia por esas rarezas de la idiosincrasia, como la pelanga y el perreo, el recuerdo parece servir, por el contrario, para que no se nos olvide caer una y otra vez en las mismas cosas.
EDUARDO ESCOBAR

Sigue toda la información de Opinión en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon

Conforme a los criterios de

Logo Trust Project
Saber más
Sugerencias
Alt thumbnail

BOLETINES EL TIEMPO

Regístrate en nuestros boletines y recibe noticias en tu correo según tus intereses. Mantente informado con lo que realmente te importa.

Alt thumbnail

EL TIEMPO GOOGLE NEWS

Síguenos en GOOGLE NEWS. Mantente siempre actualizado con las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en Google News.

Alt thumbnail

EL TIEMPO WHATSAPP

Únete al canal de El Tiempo en WhatsApp para estar al día con las noticias más relevantes al momento.

Alt thumbnail

EL TIEMPO APP

Mantente informado con la app de EL TIEMPO. Recibe las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en tu dispositivo.

Alt thumbnail

SUSCRÍBETE AL DIGITAL

Información confiable para ti. Suscríbete a EL TIEMPO y consulta de forma ilimitada nuestros contenidos periodísticos.