Escuela es encuentro, es experiencia, es ejemplo

Escuela es exposición, es entorno, es engranaje enaltecedor, emocionante, entusiasta. Es erudición emergente en estudiantes eufóricos. Escuela es ensayo, es error; es ejercicio enérgico en encontrar enmiendas en equivocaciones.

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Escuela es esfuerzo enfático en estudiar evidencia. Es empeño en equipar especie en elementos espirituales estructurantes. Es estrategia ebanista enfocada en ensamblar enganches educativos. Es empatía en el encuentro. Es encuentro en equipo. Es enseñanza en escritura. Es escribir efemérides en espacios estimulantes. Es esperanza.

En excepcionalmente estresante escenario, estudiantes esperan estrategias emblemáticas. Edificantes. Emplean épicos esfuerzos enfocados en entender ejemplares experiencias educativas. Exigen ejecutorias enriquecedoras, ecuánimes, éticas, efectivas, eficientes, en estamentos estatales en ejercicio de exigente encargo.

Estudios exponen evidente, exultante emergencia educativa emanada en epidemia. Epidemia es el enemigo eterno. Entre ello, es exigible estudiar efectos en egoísta, eterno esquema escolar encerrador. Excéntrico. ¿Efectivo? ¡Extraño! Estudiosos entienden en él ególatra empujón en excluyente estanque. Esperan entender en evidencia empírica elemento esencial en el entramado epidemiológico. Exigen en ejecutores entendimiento elemental: escuela es experiencia, es energía, es encuentro.

En este entorno empiezan estudiantes. Expectantes, entusiastas. Esfuerzo en el educador es el encargo especial. Ejercerlo en el ejemplo es el elemento esencial.

ALEJANDO NOGUERA C.