¿Por qué la cifra de muertos en el Darién es la más alta desde que se tiene registro?

El número de migrantes muertos o "desparecidos" en la zona selvática del Darién, en la frontera con Colombia y Panamá, prácticamente se triplicó durante el año 2022.

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Eso se desprende de un análisis realizado por EL TIEMPO basado en las nuevas cifras publicadas por la Organización Internacional para la Migración o (OIM, por su sigla en inglés).

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De acuerdo con las estadísticas recolectadas para su más reciente informe anual, el año pasado murieron o desaparecieron por lo menos 141 personas, comparado con las 51 que documentaron en esta misma zona durante el año 2021.

Para ponerlo en contexto, la cifra total de muertes y desaparecidos en el Darién desde ese año es de 326 personas. En otras palabras, casi la mitad murieron o desaparecieron el año pasado.

De acuerdo con estadísticas oficiales, más de 250.000 personas atravesaron la peligrosa zona durante el año 2022 y, según un informe de Naciones Unidas, ya van 330.000 en este 2023.

"En el Darién, un inhóspito cruce fronterizo selvático entre Panamá y Colombia, se documentaron 141 muertes de migrantes en 2022. La naturaleza remota y peligrosa de esta zona y la presencia de bandas criminales a lo largo de la ruta significa que esta cifra puede no representar el número real de vidas perdidas", dice la OIM al presentar su informe anual.

De acuerdo con las estadísticas de la organización, entre los 141 personas muertas o desaparecidas, 22 son ahogados, 13 perecieron por falta de comida, agua y otros factores, 3 por violencia, 2 por enfermedades. El resto, 101, por causas no determinadas.

Entre ellos, 14 eran niños. El reporte no discrimina por nacionalidad, pero la base de datos de la organización apunta a que al menos 8 de los muertos eran colombianos.

En términos generales OIM sostiene que en todas las rutas migratorias de la región -que incluye el Darién, el Caribe, y la frontera entre Estados Unidos y México- murieron unos 1457 migrantes en el 2022.

Cifra que también es un récord histórico para esta zona del planeta. De ellos, 686 perecieron en la frontera sur de Estados Unidos.

“Estas cifras alarmantes son un claro recordatorio de la necesidad de que los Estados adopten medidas decisivas. Mejorar la recopilación de datos es crucial. En última instancia, lo que se necesita es que los países actúen sobre la base de los datos para garantizar que se pueda acceder a rutas migratorias regulares y seguras”, dice Michele Klein Solomon, Directora Regional de la OIM para América Central, del Norte y el Caribe.

SERGIO GÓMEZ MASERI

Corresponsal de EL TIEMPO

Washington

En Twitter @sergom68