'Cumplimos nuestro rol, cada quien se apropia de lo que revelamos': magistrado Salazar sobre hallazgos en La Escombrera

Luego de la identificación plena de dos de las cuatro víctimas de desaparición exhumadas de La Escombrera, en la Comuna 13 de Medellín—una líder juvenil y un joven en condición de discapacidad—los hechos que rodearon su desaparición siguen siendo el centro del debate político.

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A propósito, el magistrado de la JEP, Gustavo Salazar, quien ha liderado junto con la Unidad de Búsqueda y Medicina Legal la intervención en el lugar, aseguró que los indicios apuntan a que las víctimas fueron desaparecidas por los paramilitares del 'Bloque Cacique Nutibara'. Además, indicó que, por los años objeto de estudio, entre 2001 y 2004, la JEP tiene bajo la mira 34 operaciones militares, que podrían estar relacionadas con algunas de las desapariciones que se están investigando en La Escombrera.

En el marco de las medidas cautelares, se ratifica lo que habíamos supuesto, basado en lo dicho por las víctimas y en testimonios de de grupos paramilitares: en La Escombrera se enterraban cuerpos de personas con el objetivo de hacerlas desaparecer forzadamente. Esto queda confirmado. Lo segundo que se ratifica es que las víctimas fueron asesinadas. Esto es consistente con lo que señalaba la Sala de Justicia y Paz del Tribunal de Medellín, que indicaba que en La Escombrera había una base paramilitar. Posteriormente, se determinará cuánto tiempo permaneció allí y quiénes la operaban. Suponemos que estuvo en funcionamiento durante parte de los años 2001, 2002, y tal vez algo de 2003. El grupo que la regentaba era el bloque 'Cacique Nutibara', y allí se ejecutaban y asesinaban personas por de dicho grupo, como lo ha mencionado Salvatore Mancuso. Esa es la hipótesis, la verdad judicial de Justicia y Paz y de la justicia ordinaria. Ambas desapariciones fueron reportadas y denunciadas ante la Fiscalía por las víctimas y sus familias. A partir de esto, se plantea el panorama de su desaparición y los hechos relacionados con su asesinato.

Es particular porque implica un espacio geográfico mucho más amplio del que pensábamos, en el que podían encontrarse las víctimas; eso es lo primero. Lo segundo, se trata de personas jóvenes. Y lo tercero, no entendemos claramente cómo alguna de estas personas, que eran absolutamente inofensivas, tanto en su rol de líder comunitaria como en el caso del joven, un vendedor ambulante en condición de discapacidad, podrían haber sido víctimas de un crimen tan atroz como la desaparición forzada.

Exactamente, la Fiscalía General de la Nación investiga la posible autoría del Bloque 'Cacique Nutibara' en los dos casos y en el caso del muchacho también investiga la posible responsabilidad del Bloque 'José Luis Zuluaga' de los paramilitares de la Comuna.

Bueno, ese es un tema del debate político, de las memorias. Nosotros cumplimos con nuestro rol y cada quien se apropia de manera diferenciada y según sus intereses de lo que estamos diciendo. Lo que estamos tratando de señalar es aquello sobre lo que tenemos certeza judicial, y en ese sentido hemos sido muy prudentes. Lo que sí debo insistir es que estamos centrados no solo en la Operación Orión, que nunca ha sido realmente nuestro foco, sino en un periodo comprendido entre los años 2001, 2002 y 2003, que incluye 34 operaciones militares.

No, porque no es nuestra competencia táctica. Nos hemos enterado de algunos crímenes sobre los que no tenemos competencia, no fueron perpetrados por nuestros comparecientes forzosos, que son las Farc y la Fuerza Pública. Entonces lo que hacemos es compulsar o remitir la información a los investigadores competentes.

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No se descarta, pero es una posibilidad menor, dado que la mayor parte de las desapariciones forzadas en la Comuna 13 fueron perpetradas por los bloques paramilitares. Sin embargo, no se descarta. Ya se determinará en la medida en que vayan apareciendo las víctimas y se obtengan los resultados.

El comunicado lo expedimos de manera autónoma. Me reuní directamente con las familias, les informamos que íbamos a dar alguna información, y en ese momento ellos insistieron en que querían el anonimato. Sin embargo, no hubo ninguna falencia en cuanto a la información que íbamos a proporcionar. Yo, de manera explícita, les dije qué íbamos a decir. Si esto genera molestias, se hará el ajuste necesario. Para eso existen las mesas técnicas y las mesas biológicas, en las cuales seguramente se expondrán las inquietudes y molestias, y adoptaremos los mejores protocolos posibles. No se dio el nombre de las personas, solo los datos; redujimos la cantidad de información, ya que contamos con mucha más tanto de los eventos como de las personas. Pero si parece haber molestias, las examinaremos con cuidado.

Los cuatro cuerpos están en muy buen estado, la diferencia simplemente es de tiempo, porque los primeros dos cuerpos sobre los cuales entregamos información fueron hallados el 18 de diciembre y la recuperación se terminó hacia el 26 de diciembre. Los otros cuerpos fueron encontrados el 8 y 9 de enero, luego hay una diferencia casi de 15 días. Ya se practicó la prueba de ADN y las cosas parecen que van por buen camino. Esperamos en unas semanas entregar la identificación de las otras víctimas a las familias.

Suponemos que es un poco lo mismo, pero hasta que no haya la primera identificación no podemos dar información.

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Redacción Justicia