Las EPS que variaron 'excesivamente' y hasta en un 96% los precios de tecnologías en salud, según la Contraloría

Uno de los puntos de quiebre en la relación entre las Empresas Promotoras de Salud -EPS- y el gobierno nacional está en los reclamos que han realizado las EPS por la supuesta insuficiencia de los presupuestos máximos, es decir, de los recursos que el Estado les gira anticipadamente a cada una para cubrir las tecnologías en salud que no son financiadas con cargo a la Unidad de Pago por Capitación -UPC-.

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Una ‘macro auditoría’ conocida por EL TIEMPO sobre los recursos del sistema de salud advierte que el cálculo de los presupuestos máximos se está viendo afectado por una variación de precios, por parte de las EPS, sobre los servicios y tecnologías en salud que no son financiados por la UPC y que no están explícitamente excluidos del Plan de Beneficios en Salud -PBS-.

En la auditoría se advierte que hay “ineficiencia” en el manejo de los recursos del sistema de salud por el reconocimiento de una misma tecnología ‘No PBS’ con diferencias significativas en los precios en una misma EPS y para la misma vigencia, que para este caso es el año 2022. Esa situación genera “distorsión de la información de mercado e incertidumbre en el valor de las tecnologías No UPC que se toma como base para el cálculo de presupuestos máximos”, dice el ente fiscal.

En la auditoría se señala que la variación de los precios piso y techo llega hasta un 96% en una misma EPS y que el Ministerio de Salud, como la entidad encargada de fijar los valores de los presupuestos máximos, debería “detectar variaciones excesivas de precios entre los agentes del sistema (EPS-IPS) y realizar las respectivas gestiones para su modificación y arreglo o comunicación y traslado a los entes competentes en caso de violación al régimen de precios (si da a lugar)”.

Según la auditoría, la EPS Coosalud registró el medicamento Vimizin® un miligramo solución concentrada con un precio unitario mínimo de 645 mil pesos y uno unitario máximo de 166 millones de pesos. También registró la solución oftálmica Lumigán ® RC con un precio mínimo por unidad de 390 pesos y uno máximo de 72.1 millones de pesos.

Por otra parte, la Nueva EPS registró medicamentos como el FEIBA 1000U con un valor unitario mínimo de 2.3 millones de pesos y uno unitario máximo de 77.7 millones. También registró Soliris 300 miligramos para infusión intravenosa con un precio unitario mínimo de 6.7 millones y un valor unitario máximo de 34.2 millones.

La EPS Famisanar registró el medicamento Eylia® solución para inyección intravítrea con un valor unitario mínimo de 2.2 millones de pesos y uno unitario máximo de 29. 1 millones de pesos. O la inyección Xgeva® de 120 miligramos con un mínimo de 265 mil pesos y un máximo de 19.9 millones.

Lo mismo ocurrió con Capital Salud, que registró el medicamento Elaprase® con un precio mínimo de 7.920 pesos y uno máximo de 53.9 millones. Y la Adenosina 6 mg con un mínimo de 14.371 pesos y un máximo de 48 millones de pesos.

Y la EPS Pijaos Salud presentó el medicamento Eylia® solución para inyección intravítrea con un mínimo de 2.8 millones de pesos y un máximo de 3.2 millones, el mismo medicamento que la EPS Famisanar cotizó en un máximo de 29 millones, según la auditoría.

Coosalud, que registra en la auditoría las variaciones de precios más alarmantes, asegura que ocurrieron errores de cálculo. “Efectuada la revisión, en los cruces realizados en cantidad y valor reportado vs las cantidades y valores suministrados, se evidencian errores en los datos (…) En 103 casos la desviación es justificada por errores al momento del reporte, los que afectan el valor unitario mas no implican que el cobro sea excesivo. Tal es el caso de moléculas que fueron reportadas en cantidad 1, sin embargo, la unidad de medida era caja”, respondió Coosalud.

Famisanar advirtió que la solución Eylia que le aparece cobrada en $29,184,310 obedece a un error de digitación de la Institución Prestadora de Salud (IPS) que pasó la factura. “Se adjunta soporte en donde se evidencia que el prestador facturó y cobró fue de $2,918,431 y no $29,184,310”, respondió la EPS. Sobre el otro medicamento Xgeva “se justifica la variabilidad en el valor porque dependen del tamaño del envase”.

La Nueva EPS respondió que “el cálculo de la brecha entre el valor máximo y mínimo registrado en la base de datos se obtuvo por parte del equipo auditor, realizando de manera directa el cociente entre el valor de suma entregado y la cantidad, lo cual induce un posible error al desconocer la unidad de medida que el prestador utiliza como unidad mínima”.

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Sobre Pijaos Salud la Contraloría advirtió que agregó que “dentro de la respuesta no explica las diferencias de precio existentes entre los medicamentos y tecnologías reportadas, indicando que no media negociación en medicamentos e insumos”.

Y sobre Capital Salud EPS el ente de control fiscal agrega que “su respuesta no desvirtúa los casos presentados y especialmente frente a la revisión de los valores cargados y cantidades de suministro y entrega de las tecnologías en salud no financiadas con la UPC que presentan diferencias de precios”.

ANA MARÍA CUESTA

Editora de justicia [email protected]