La historia de la fuga de Aida Merlano que terminó con la condena de su hija

La excongresista Aida Merlano Rebolledo para el 1° de octubre de 2019 se encontraba recluida en la cárcel El Buen Pastor de Bogotá, pagando una pena de 15 años de prisión, impuesta por la Corte Suprema de Justicia, por los delitos de concierto para delinquir y corrupción al sufragante.

(Le invitamos a leer: ¿Podrá Aida Victoria Merlano seguir produciendo contenido tras su reciente condena?)

Dicha condena fue emitida en septiembre de 2019, y el origen de este caso se remonta a marzo de 2018 cuando, en medio de las elecciones legislativas, la Fiscalía se enteró de que en la sede de campaña de la excongresista en Barranquilla se ofrecían 50 mil pesos a los ciudadanos para que votaran por ella y por su fórmula a la Cámara de Representantes, Lilibeth Llinás.

Para las autoridades, el plan de escape de Merlano Rebolledo, que se materializó a las 2:56 de ese 1° de octubre de 2019 fue “ampliamente planificado”, de hecho, se aseguró que contó con una amplia cadena de cooperación al interior del Inpec y las autoridades de la cárcel Buen Pastor de Bogotá, que permitieron el traslado de la penada a una cita de odontología estética no prioritaria.

(Le invitamos a leer: Las claves de la condena en contra de la influencer Aida Victoria Merlano)

“A la señora Aida Merlano Rebolledo se le estaba prestando un servicio de ortodoncia por parte de Javier Guillermo Cely Barajas, también estaban allí sus hijos: Aida Victoria Merlano Manzaneda y su otro hijo menor de edad, ella estando privada de su libertad se fugó con la ayuda de una cuerda la cual lanzó de un tercer piso por medio de una ventana (…) se infiere de los medios de conocimiento que para lograr su cometido fue valiosa la ayuda de sus hijos; estos la dejaron sola para que saliera por la ventana mediante el uso de la soga y guantes, elementos que fueron ingresados por Aida Victoria y el adolescente”, se lee en la decisión del Tribunal.

En este punto de la historia, el nombre de Merlano Manzaneda comienza a tomar protagonismo. Para las autoridades, el plan que se fraguó con anterioridad, había entregado un rol esencial a Aida Victoria, debía “valerse de su hermano para generar distracción, alertar cuando se acercaba personal al consultorio, facilitar la fuga por la ventana”.

Para la Fiscalía, la influencer tuvo “también la misión coordinar la fuga de Aida Merlano desde el momento que se acudió a una cita odontológica como fachada para que esta última pudiera realizar todos los actos para consumar su fuga (…) suministró elementos como teléfonos móviles (…) Aida Victoria, por sí misma, instrumentalizó y utilizó a su hermano para cometer el delito de fuga de presos, ingresando a través de él elementos que fueron necesarios para la fuga”.

(Además: El lío judicial detrás de la Creg y el nombramiento de sus comisionados)

Por los hechos anteriores, el 5 de octubre de 2019, Aida Victoria fue llevada ante el Juzgado 12 Penal Municipal con Función de Control de Garantías de Bogotá y la Fiscalía formuló imputación contra ella y el odontólogo Javier Guillermo Cely Barajas, los hechos punible de uso de menores para la comisión de delitos -agravado para la primera- en concurso heterogéneo con fuga de presos. En esta oportunidad no se impuso medida de aseguramiento.

El odontólogo quedó absuelto del caso el 13 de septiembre de 2022, en la sentencia en la que se condenó a Aida Victoria en primera instancia.

Durante el proceso, la declaración de Merlano Rebolledo, en que buscó proteger a sus hijos de la responsabilidad de su fuga “dista de ser espontánea (...) y obedeció más a un libreto preparado”

“Lo referido por Merlano Rebolledo, pierde todo poder suasorio ante la claridad y contundencia de los testimonios e informes de los investigadores de la Fiscalía”, se lee en el fallo.

Un minuto antes de la fuga, según los videos de las cámaras de seguridad, cuando los hermanos Merlano y el odontólogo Cely Barajas se disponían a salir del consultorio, “Merlano Manzaneda le da un beso en la mejilla a su madre y de manera sutil le entrega un celular, lo pone entre las piernas y le susurra algo al oído lo que, se infiere, fue una de las últimas indicaciones del plan criminal y las instrucciones recibidas mediante el celular (una llamada recibida durante su estadía en el consultorio)”.

“Hasta aquí, se presenta diáfana la participación en la fuga de Merlano Manzaneda, a su vez, podría decirse que la participación de E.J.M.M (hermano menor) en la fuga solo fue mediante las conductas desplegadas para propiciar -actuando como campanero- que su madre se quedara sola en el módulo de rehabilitación para después descender por la ventana, sin embargo, su participación fue más trascendental”, expone la sentencia.

Las pruebas aducidas, según las autoridades, sí permiten establecer la responsabilidad penal de Aida Victoria en los dos punibles endilgados: uso de menores de edad para la comisión de delitos y cómplice del delito de fuga de preso.

“Ciertamente, la autora de la fuga fue Merlano Rebolledo y Merlano Manzaneda actuó como cómplice, pues hizo parte de un amplio plan criminal y en este también se usó e instrumentalizó a su hermano, quien si bien actuó de forma voluntaria, esto no descarta la tipificación de la conducta, como pretendió la defensa”, se relata en la decisión.

Así las cosas, el magistrado, en audiencia del pasado jueves 21 de marzo, decidió imponer una nueva pena a Aida Victoria Mellano, tomando en cuenta el delito de mayor gravedad, fijándolo en el cuarto inferior de punibilidad, el cual aumentó por los delitos de fuga en calidad de cómplice.

Es decir, que el tribunal condenó a Merlano a 13 años y 8 meses de prisión como coautora del punible del artículo 188 inciso 4 del código penal “uso de menores de edad para la comisión de delitos” y cómplice del delito de fuga de presos, establecido en el artículo 448. Además, a la inhabilitación de derechos y funciones públicas por el mismo lapso de la sanción principal.

Cabe destacar que esta decisión desató polémica, pues algunos sectores consideraron que el aumento de la pena fue injusto.

Ante ese escenario, el abogado de Merlano Manzaneda, Miguel Ángel del Río, aseguró que aunque contra la decisión no procede recurso de apelación, ésta será demandada en casación. "La misma será avisada a su despecho dentro de los próximos 5 días", dijo el penalista.

Tras finalizar la diligencia, el abogado en su cuenta en la red social X señaló: "El Tribunal condena injustamente a Aida Victoria por la fuga de su madre. Llegaremos hasta la última instancia de la Corte Suprema con ella en libertad".

Redacción Justicia:

En X: @JusticiaET