¡Mamá! la primera gran nutricionista

Pero eso no es todo. Una vez que el bebé nace, su mamá sigue siendo su principal guía en el viaje hacia una alimentación saludable. La lactancia materna, considerada el mejor alimento para los bebés, provee no solo nutrientes esenciales sino también anticuerpos que fortalecen el sistema inmunológico del bebé.

A medida que el bebé crece, su mamá lo introduce en el mundo de los alimentos sólidos. Desde los primeros purés hasta las comidas familiares, ella le enseña qué es lo mejor para él. Los pequeños aprenden sobre frutas, verduras y todos los grupos de alimentos gracias a la orientación de mamá.

Por lo tanto, es crucial que las mamás asuman su papel como nutricionistas desde el hogar. Cada decisión alimenticia que tomen influye en la salud y bienestar de sus hijos. La alimentación durante la infancia no solo afecta el crecimiento físico, sino también el desarrollo cognitivo y emocional.

Es importante desafiar viejos mitos y costumbres relacionadas con la alimentación. No podemos seguir repitiendo patrones solo porque "siempre se ha hecho así". Cada generación tiene la oportunidad de mejorar y promover hábitos alimenticios más saludables, Los invitamos a seguir las redes sociales de Valeria Quintero.
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