En el marco de la segunda edición BeanCon, diferentes expertos debatieron los principales retos y oportunidades que tiene en estos momentos el mercado del frijol en medio de la coyuntura actual trastocada por los altos precios de los insumos y el cambio climático.
En el evento, organizado por US Dry Bean Council, también se compartieron las perspectivas frente a la sostenibilidad de la producción de esta legumbre y el comportamiento del consumidor frente al producto. Igualmente, se habló de la importancia de la tecnología para mejorar la productividad de los cultivos.
“Estados Unidos tiene una infraestructura de exportación altamente desarrollada que garantiza una distribución rápida, control de calidad y medidas estrictas de seguridad alimentaria. A diferencia de algunos de nuestros competidores, nuestros frijoles no son de temporada, nuestro mercado está abierto las 24 horas, los 7 días de la semana y cuenta con un servicio al cliente comprobado”, dijo Rebecca Bratter, directora ejecutiva del US Dry Bean Council durante el evento.
Como la producción local no es suficiente para abastecer la demanda, se importan ciertas cantidades al año. Según la Federación Nacional de Cultivadores de Cereales y Leguminosas (Fenalce), el total de importaciones de frijol hacia Colombia fue de 22.762 toneladas en el 2021, un 23,6 por ciento menos que en 2020.
Ecuador, Argentina, Bolivia y Estados Unidos son los países de donde principalmente procedió este tipo de legumbre el año pasado. Y en el terreno local, el Huila es el primer productor de frijol del país, con unas 25.000 hectáreas.
Las oportunidades de la tecnología
El colombiano Juan Osorno, especialista en producción de frijol y profesor de la Universidad de Dakota del Norte en Estados Unidos, destacó la aplicación de la agricultura con alta tecnología que mejora las prácticas agrícolas mediante data tomada directamente en el cultivo para incrementar la disponibilidad de los suelos.
Además, dijo que es con tecnología cómo la industria de los alimentos está llevando el frijol a un nuevo nivel, pensando en su disponibilidad más allá del grano, mediante la fabricación de harinas que llegan a suplir las necesidades nutricionales en distintos momentos
Igualmente, habló acerca del futuro de la industria haciendo énfasis en la necesidad de pensar cada vez más en el consumidor y sus necesidades.
“El consumidor está buscando viabilidad del producto, este es uno de los atributos que llevan a la toma de decisión frente al consumo de fríjol. Analiza sus características sensoriales, piensa en el almacenamiento y vida útil del producto, y esto reta a la industria a ponerlo en el centro”, señaló.
Otro de los invitados fue el chef colombiano Juan Manuel Barrientos, quien habló de su experiencia culinaria con el frijol, un ingrediente que ha trascendido los platos tradicionales para ofrecer al comensal innovadoras preparaciones de sal y dulce.