¿Por qué nos dan antojos de dulces? Médico experto en nutrición explica qué hay detrás de estos impulsos

Los antojos de dulces, esos impulsos repentinos por consumir algo azucarado, tienen una explicación científica y de salud que va más allá del simple gusto por lo dulce. Sebastián Arrieta, médico especialista en obesidad y nutrición, desglosó las causas y soluciones a este fenómeno durante su participación en el programa ‘Hoy Día’ de 'Telemundo'.

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Arrieta comenzó explicando el ciclo de la resistencia a la insulina, una condición que afecta la manera en que el cuerpo procesa el azúcar: "Ustedes se comen algo y, como el páncreas no está funcionando muy bien, se produce un pico de azúcar que, cuando baja de golpe, tu apetito se abre. ¿Y qué es lo que hace el cuerpo inteligente? Te manda a comer porquerías, el antojo más rápido para levantar esos niveles de azúcar", explicó Arrieta.

El especialista enfatizó que existen dos enfoques principales para manejar esta condición: la medicación adecuada, prescrita por un médico, y el fortalecimiento de la masa muscular, que actúa como una reserva de azúcar ayudando a regular los niveles en sangre.

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En cuanto a las dietas, Arrieta advirtió sobre la importancia de adoptar hábitos alimenticios sostenibles: “Lo que sea que hagan para perder peso, a partir de hoy, lo tienes que hacer para toda tu vida porque si no vas a rebotar”. 

Además, tocó el tema de los alimentos gatillo, aquellos que, debido a su combinación de azúcares y grasas, estimulan el centro de recompensas del cerebro, promoviendo así el consumo continuo de estos productos.

“¿Qué gatillan? Un comportamiento. Te comes un chocolatito, ¿y acaso eso calmó el antojo? No. Todo esto está estudiado de tal manera en que si tú tienes una combinación de dos azúcares procesados o un azúcar y una grasa, tu centro de recompensas se estimula de tal manera que quieres comer más ese alimento”, explicó.

“¿Por qué es que el brownie de proteína y los batidos de proteína no generan ese estímulo por comer? A mí nadie me ha dicho: ‘He subido de peso comiendo pollo con vegetales’ porque lo que regula tu apetito y lo que te da saciedad es la proteína y la fibra, y si tú no estás comiendo adecuada cantidad de proteína y de fibra, no vas a lograr esta saciedad”, agregó.

Sobre las alternativas como las barras de proteína, Arrieta señaló que pueden ser un buen sustituto si se eligen correctamente: “Si tú me dices: ‘Me voy a comer una barra de chocolate de 400 calorías’ versus una de 100 calorías que tiene proteína y fibra, por supuesto que es un buen reemplazo”, indicó, resaltando el rol de la proteína y la fibra en la regulación del apetito y la sensación de saciedad.

Abordando la ansiedad como otro detonante de los antojos, Arrieta describió cómo las conductas compensatorias, tales como comer en exceso, están frecuentemente vinculadas a intentos de calmar estados emocionales internos. 

“Son conductas compensatorias que tenemos con la comida, con el alcohol, con las compras, con el tabaco, con el sexo, que estamos buscando calmar algo que nos está pasando adentro y, claro, vamos a la comida porque nos han enseñado de chiquitos: ‘Te portas bien en el banco, te doy un chocolatito o te graduaste, vamos a comer’. Yo necesito que ustedes dejen de buscar afuera lo que tenemos que encontrar adentro”, dijo.

Para combatir estos hábitos, el especialista recomendó entender la propia personalidad y buscar actividades que realmente alineen con nuestros propósitos y deseos, reduciendo así la dependencia emocional a la comida.

CÉSAR QUISPE 

El Comercio (Perú) / GDA