Llegan los Premios BogotáEats para refrescar la escena gastronómica

La historia que para Alejandro Escallón comenzó hace una década compartiendo sus lugares favoritos para comer en redes sociales ya va por una esperada jornada de reconocimientos: los premios BogotáEats, cuyos tres ganadores se darán a conocer este jueves por la mañana.

Según Alejandro Escallón el de otorgar reconocimientos ha sido un paso meditado, pensado por años, en busca del mejor momento para hacerlo. El influencer había pasado a ser empresario de eventos gastronómicos: BogotaEats a Cielo Abierto (a realizarse en septiembre) y el Burgerville han tenido su sello. Y parte del desarrollo de sus objetivos que contribuir a que cada vez más gente conozca la riqueza gastronómica de Bogotá, pasa por los premios que comienzan con reconocimientos en tres categorías, la lógica es que en una edición próxima sean más, pero BogotaEats crece paso a paso.

“Hoy estamos centrados en los premios -dice Escallón-. Arranqué con Bogotá Eats hace 10 años. Lo que hemos visto del cambio de la oferta en ese tiempo ha sido de locos. El nivel es cada vez más alto, abren muchos conceptos nuevos, la comida local está mejor. Es impresionante en lo que se ha convertido Bogotá. Al comienzo dijimos que queríamos aportar para que cada vez más gente al pensar en la ciudad, pensara en su comida”.

A Bogotá se puede venir de viaje a comer. Y mucho de lo que hemos hecho este año ha querido resaltarlo. Y este año especial porque ha sido retador para los restaurantes y las personas que apuestan por hacer conceptos nuevos. Por eso, decidimos lanzar los premios. Darles reconocimiento a diferentes actores. Trabajamos de la mano con Coca Cola, ya que está presente en muchos restaurantes. A ellos les encantó la idea de dar reconocimientos y el tema fue creciendo.

(Puede interesarle: 'La trucha es el nuevo salmón', dice el chef Álvaro Clavijo, al frente de El Chato, el restaurante número 33 del mundo).

Está mejor apertura, para restaurantes abiertos en los últimos 12 años. Ha sido un año incierto para el sector y sin embargo hay quien hace esta apuesta. Se premia también la burger del año porque de unos años para acá es la hamburguesa está pasando por una tendencia interesante. Y la revelación es para esos sitios que llamamos “joyas escondidas”, o sitios ‘caletos’, que no mucha gente conoce pero son increíbles. No necesariamente tienen que ser nuevos, pero que vale la pena conocer. Entonces, elegimos estas categorías abrimos la conversación en redes. Le preguntamos a la comunidad por los lugares que les parecían infaltables en las diferentes categorías y de ahí salieron los nominados. La votación se cerró el 31 de julio, con cerca de 10 mil votos. La idea es que el jueves se hagan los reconocimientos y vamos a impulsar estos restaurantes y generar una plataforma.

Hay historias chéveres. Los nominados en revelación nos sorprendieron, porque son verdaderas joyas. El Marqués, en el Siete de Agosto, por ejemplo. Camilo Giraldo del grupo Gordo nos habló de este, que tenían unas empanadas. También está Mangiare, una pizzería artesanal que está escondida en el entorno del Park Way. Y en otro momento, nuestra manager empezó a ver fila al frente de una casa en el norte y resultó ser una parrilla argentina de una familia, pero qué parrilla (Diaz Parrilla). Y hay un sitio en Chapinero, Shirai, de una familia japonesa que abrió en el centro para mostrar su comida. Son sitios a los que les hemos hecho notas, no están acostumbrados a recibir a mucha gente y se han podido disparar. Es chévere seguir resaltándolos. Por otro lado, hay hamburgueserías que han creado ediciones especiales.

La idea es impulsar. Tratar de premiar a mejor restaurante de Bogotá de pronto podría premiar algo que todo el mundo conoce. No era la idea. La idea es dar visibilidad.

No queríamos infinidad de categorías. Le tengo el ojo puesto a los conceptos nuevos que están revolucionando la oferta colombiana.

Este es nuestro piloto y nos ha ido bien. La recepción ha sido buena. Y se puede evaluar qué categorías pueden caber. Obviamente, hay un aprendizaje de categorías que funcionan mejores que otras y todos los años podremos darles reconocimiento a sitios que hayan hecho algo importante durante el año. Estos premios siempre han estado en el tintero durante años. Pero queríamos lanzarlos en un momento en el que sintiéramos que podíamos hacerlos de la mejor manera. Hay mucho por construir. En Colombia hay un par de referentes de premios, pero queríamos aportarle a los sitios de día a día.

De las cosas más gratificantes que nos han pasado este año ha sido no solo ver sitios que nacen con toda una estructura de seis cocinas y centro de producción; sino que hemos salido a ver emprendimientos que le tocan las fibras a la gente. Ha sido chévere pegarles un impulso. Tenemos muchas historias y recogimos las de mayor impacto en el último año. Había sitios que sí atendían a las personas del sector, pero cuando salían, en ese fin de semana tenían carros parqueados al frente con gente que venía de otros lugares.

Me parece que crear un restaurante es una locura, es una industria retadora, esclavizante, de riesgo y sacrificio. Por lo mismo uno descubre personajes apasionados y es increíble que en un año en el que todo ha sido tan incierto haya personas que estén haciendo proyectos. Ahora, nuestro proyecto de elevar a Colombia gastronómicamente empieza también porque la gente se lo crea. En Bogotá hay mucho y quiero que sepan que lo que hay es espectacular.

Las votaciones, que alcanzaron la participación de más de 10 mil personas, se cerraron esta semana. La premiación será en el restaurante La Pinta, el 3 de agosto, a las 10 a.m.

Shirai

Díaz Parrilla

Mangiare

El Marqués

Bubu (Bubu Burger)

Gauchos (Pretzel Burger)

Ugly American (Fat Kid Cheeseburger)

El Libanés (Kafta Pita Smashed Cheeseburger)

La Birria del Gordo

Río

Fiero

DonDoh

LILIANA MARTÍNEZ POLO

REDACCIÓN DE CULTURA

@Lilangmartin