En la mañana de este jueves, al menos 20 residentes de Usaquén se reunieron en la carrera séptima con calle 112 para manifestar su apoyo a la construcción de TransMilenio por este corredor vial. Ellos viven en barrios como el Codito y exigen una solución de movilidad para que tarden menos horas en desplazarse a otros puntos de la ciudad.
Temilia Chocontá, líder comunitaria de El Codito, afirma que TransMilenio es una oportunidad para la comunidad del norte de la ciudad, ya que muchos de ellos no tienen carro y obligatoriamente deben usar transporte público.
"Queremos que nos den la oportunidad de movilidad porque somos conscientes de que el metro no llegará a Usaquén. Nosotros necesitamos una solución, no podemos durar media hora de la calle 183 a la 187, ¡son tres cuadras!".
Además, le hizo una crítica a la decisión que tomó el juez 49 istrativo de Bogotá, ratificando la orden de suspensión de la licitación de la troncal de TransMilenio por la carrera séptima. "Es discriminación de clases porque las personas que vivimos en el codito somos obreros, gente trabajadora que usa el transporte público. Escuchan a unos pocos e ignoran a miles".
Juan David Quintero, edil de Usaquén, se sumó a la manifestación de los ciudadanos porque según él "la comunidad la localidad y el borde norte está condenada a un trancón eterno. Un ciudadano del Codito pierde dos meses al año en medio de trancones, hay que proteger sus derechos. La discusión debería ser cómo mejorarles la calidad de vida".
"Estamos afectados porque hay un nudo que no lo desata nadie. Usted puede durar hora y media desde la 127 hasta la 94. No nos pueden negar ese derechos a la movilidad", explicó María Victoria Iannini, edil de la localidad.
Ambos aseguraron que irán ante el juez y le explicarán la importancia de esta obra y enfatizarán su diálogo en la protección de los derechos fundamentales de la población que vive en esta localidad.
Myriam Bonilla, residente de El Codito es otra ciudadana preocupada por la ausencia de vías que conecten con el sector en donde vive. Narró que en varias ocasiones ha perdido citas y compromisos por la congestión vehicular de la séptima. Diariamente gasta más de 10.000 pesos en transbordos y considera que una troncal menguaría el embotellamiento y la aglomeración de s en el Portal Norte. Dice que no se trata de "afinidades políticas, se trata de soluciones".
A parte de su desacuerdo con la suspensión, también se preguntó "¿qué pasará con los predios que se han comprado?, no pueden convertirse en un foco de inseguridad".
Por ahora recogen firmas en la localidad para interponer una acción popular. Esperan que el juez escuche sus argumentos.
REDACCIÓN POPULAR