Durante la cuarentena obligatoria, que se inició el 25 de marzo pasado, se ha registrado un descenso en todos los delitos en Bogotá. Según cifras de la Policía, hasta el 29 de marzo, el homicidio, que era uno de los más críticos, cayó un 53 por ciento.
También tienen una importante reducción en extorsión (-100 %), delitos cibernéticos (-100 %) y hurto a personas (-93 %), a vehículos (-94%), a motocicletas (-96%), celulares (-92%) y bicicletas, violencia intrafamiliar (-86,1 %) y delitos sexuales (-83,1 %).
Sin embargo, estas cifras históricas se producen en un contexto único, como el aislamiento, y no son comparables con meses ni años anteriores.
Según varios expertos, este comportamiento no los sorprende y aunque es muy temprano para advertir tendencias, sí alertan porque las redes de delincuencia y de microtráfico se estarían adaptando a la soledad de muchas calles de la ciudad por la cuarentena nacional.
Germán Murillo, presidente de la Red y Alianza de Líderes por Bogotá y Colombia, señala que delincuentes se han aprovechado de esa soledad, bajo la fachada de ser recicladores o habitantes de calle, para cometer hurtos en pequeños negocios y centros comerciales en Suba, Bosa, Kennedy, Usme, así como atracos a bicis y domiciliarios.
En el mismo sentido se refirió Andrés Nieto, experto de la Universidad Central, quien advierte además sobre el riesgo de un incremento de los hurtos de motocicletas y vehículos, sobre todo aquellos que están parqueados en la calle. Habla también del riesgo de las cadenas por redes sociales.
César Restrepo, experto en seguridad de la fundación ProBogotá, considera que en estos momentos el microtráfico encontró un espacio para operar bajo la modalidad de domiciliarios, al igual que los prestamistas del ‘gota a gota’, los contrabandistas y los cibercriminales.
Ómar Oróstegui, director del programa Bogotá Cómo Vamos, cree que hay que prestarle atención al fraude a través de la suplantación de personal médico, la venta de pruebas falsas y los correos engañosos.
Los tres expertos coincidieron en señalar que las alertas también se deben activar en la violencia intrafamiliar. De hecho, Restrepo advirtió que con el confinamiento de victimarios y víctimas lo que va a pasar es que habrá una reducción en las denuncias por este delito pero aumentará víctimas.
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