Van 108 muertes en siniestros viales: ¿funcionará retomar estrategia de Mockus?

El pasado 3 de marzo la Secretaría de Movilidad lanzó la campaña ‘No más muertes en las vías’, la cual busca crear un mensaje de gran impacto que ayude a disminuir la cantidad de muertes que a diario se registran por siniestros viales de Bogotá. Lo curioso de esta iniciativa es que recoge elementos de la estrategia ‘Estrellas negras’, inaugurada en junio del 2003, durante la alcaldía de Antanas Mockus.

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Pese a que hace dos décadas la campaña fue con estrellas negras, en la estrategia que se está implementando se pintará en las vías más concurridas una estrella blanca, la cual representa a una víctima fatal a causa de un siniestro vial.

De acuerdo con la Secretaría de Movilidad, en la capital fallecieron 541 personas por siniestros viales en el año 2022. El primer lugar lo ocuparon los s de moto (conductor + acompañante), con 232 muertes, seguidos de 199 peatones, 83 ciclistas, 16 pasajeros y 11 conductores.

Además, entre 2019  y 2022, Bogotá registró un incremento moderado de 12% en las fatalidades comparado con el promedio nacional y otras ciudades principales que la superan, como Barranquilla con un aumento de 22 %, Bucaramanga con 55 % y Cartagena con 56 %.

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Por otro lado, en lo que va del 2023, con corte al 13 de marzo, se han producido 108 muertes en siniestros viales, de los cuales 44 han sido motociclistas, 39 eran peatones; 15, ciclistas; 7, pasajeros y 3, conductores de carros.

Aunque la cifra de fallecidos es un poco superior a la del 2022 durante el mismo periodo, se evidencia un aumento en cuanto a víctimas motociclistas. De las 102 muertes registradas de enero a marzo del año pasado, 42 eran peatones; 33, motociclistas; 13, ciclistas; 11, pasajeros, y 3, conductores.

Según Diego Vargas, coordinador de Vigilancia de Datos de la Iniciativa Bloomberg para la Seguridad Vial, esto se debe a que se ha venido aumentando la venta de motocicletas en los últimos años y, adicionalmente, se están incumpliendo las reglas de velocidad. “Mediciones de la Universidad de Johns Hopkins junto con la Universidad de los Andes muestran que, para 2022, el 57 por ciento de los motociclistas excedieron el límite de velocidad”.

"No solo hay mas motociclistas en la ciudad, lo que principalmete está generando aumento de fatalidades de la ciudad es que ahora más incumplen los límites de velocidad. Para 2020, 2021 y 2022 el vial más afectado de la ciudad es el de motocicleta (antes de 2019 era el peatón)", agregó.

Aunque el panorama es preocupante, ¿realmente funcionaría volver a la estrategia que se implementó hace 20 años?

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En aquel entonces, la campaña fue liderada por el Fondo de Prevención Vial, el cual contó con el apoyo de la Alcaldía de Bogotá, la Secretaría de Tránsito y de los medios de comunicación, según Francisco José Fernández, director del Fondo en ese momento.

La iniciativa se dividió en cuatro etapas: la de expectativa, la informativa, la interactiva y la de reconocimiento.

En la primera, se pintaron más de 1.500 estrellas cerca de los andenes, los puentes peatonales, los cruces con semáforos y las calles con mayor índice de accidentalidad en Bogotá.

La segunda etapa, precisamente, se trataba de difundir desde el Fondo que cada estrella significaba un peatón muerto. En la etapa interactiva se realizaron diversas actividades para conocer las opiniones de cientos de conductores y peatones acerca de este símbolo.

Y finalmente, en el reconocimiento se buscaba que las estrellas tuvieran un “significado positivo”, pues, según Fernández, se iban a reconocer “los avances en el comportamiento de los peatones”.

Si se comparan las cifras de muertes en siniestros viales de enero a junio del 2003, antes de que se iniciara la campaña, con las del 2004 en el mismo periodo, no hay una reducción de fallecimientos, pues se pasó de 305 a 332 víctimas mortales en el mismo rango de tiempo, según cifras del Fondo de Prevención Vial.

Sin embargo, de acuerdo con Diego Vargas, la iniciativa, que perduró por dos años (2003 a 2005), “logró resultados de reducción de fatalidades del 44 por ciento para el 2005, comparado con el año 2000”. Además, se resaltó el trabajo de impacto que logró en la ciudadanía.

El experto agregó que tuvo éxito también porque fue un trabajo integral entre datos, infraestructura, control y comunicación. “Bogotá tuvo una transformación urbana importante dada por la transformación del transporte público y las mejoras en infraestructura peatonal y ciclista”, afirmó.

Este último factor, de hecho, fue clave para concienciar a la ciudadanía, pues, de acuerdo con María Fernanda Cárdenas, experta en comunicaciones de salud pública, cuando una campaña “te mueve las fibras” ayuda a “cambiar el comportamiento tanto a nivel personal como a nivel masivo, cuando se combina con otros elementos de control y legislación”.

"Tú puedes del otro lado tener controles, puedes tener infraestructura segura, pero si no le estás contando a la ciudadanía qué está pasando, las personas no entienden por qué se está haciendo", añadió.

Y esto, precisamente, es lo que se busca con la nueva estrategia ‘No más muertes en las vías’, pues además de las estrellas blancas se van a implementar cabinas sonoras, museos, vallas y personas en calle que relatarán las historias de algunas víctimas fatales de la imprudencia e inseguridad en los corredores viales de la ciudad, con el fin de acercar la problemática a la ciudadanía. 

Vargas, por su parte, explicó que las estrategias deben enfocarse en factores de riesgo para que hagan la diferencia en que un evento sea un choque simple o uno con víctimas mortales.

"Factores de riesgo como velocidad, alcohol y conducción y elementos de protección como el casco son importantes. Asimismo, las estrategias deben ser enfocadas en quienes ejercen éstos factores de riesgo a la hora de conducir un vehículo motorizado, y en quienes pueden generar consecuencias graves en los otros s de las vías en caso de que ocurra un siniestro", agregó.

REDACCIÓN BOGOTÁ