Un equipo internacional de científicos, entre ellos personal del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), logró captar una imagen inédita de la nebulosa planetaria NGC 1514 utilizando el telescopio espacial James Webb (JWST).
En la fotografía se aprecian con claridad los anillos de polvo que envuelven su región central, un fenómeno que ha sido descrito "con un nivel de detalle sin precedentes".
NGC 1514 se cuenta entre las primeras nebulosas analizadas por William Herschel, quien en su época utilizó el telescopio más avanzado del mundo para registrar lo que parecía una nube difusa con apariencia similar a Neptuno. Esa observación histórica ahora cobra una nueva dimensión gracias a las capacidades infrarrojas del JWST.
Es un observatorio espacial que estudia el universo en infrarrojo. Foto:Nasa.
De acuerdo con lo informado por el IAC, la revista 'The Astronomical Journal' y la Nasa publicaron las nuevas imágenes que permiten apreciar estructuras impensables en tiempos de Herschel.
En las longitudes de onda infrarroja, el telescopio Webb revela la presencia de dos anillos de polvo que rodean el núcleo de la nebulosa. Esta zona central habría sido, según los expertos, la única parte visible con los instrumentos del siglo XVIII.
La clave está en el polvo
Mike Ressler, investigador principal del instrumento MIRI del JWST y autor principal del estudio, destaca la novedad que suponen estas observaciones: "Antes del JWST, no podíamos detectar la gran mayoría de esa materia y mucho menos observarla con tanta claridad".
Ressler señala que el origen de esta visibilidad está en la composición y el comportamiento del material que forma los anillos: "Creemos que los anillos están hechos de pequeños granos de polvo, calentados por la luz de la estrella central hasta brillar en luz infrarroja y por eso no se ven en el visible".
Imagen de la nebulosa planetaria en forma de anillos. Foto:Nasa
Dos estrellas, una nebulosa brillante
Uno de los aspectos más llamativos de NGC 1514 es su estrella central, que en realidad corresponde a un sistema binario. Aunque las dos estrellas permanecen visualmente unidas incluso con la resolución del JWST, su existencia ha sido confirmada por su movimiento orbital.
"Aún con la resolución del JWST, no conseguimos separar las estrellas", afirma David Jones, investigador del IAC y coautor del estudio.
El sistema estelar presenta una órbita excéntrica con un periodo superior a los nueve años. "La distancia entre ellas es similar a la que hay entre el Sol y Júpiter, pero en una órbita muy excéntrica, lo cual significa que a veces se acercan mucho más", explica Jones.
Este acercamiento periódico podría ser, según los expertos, el desencadenante de la formación de los anillos. "Sin la compañera, la estrella central seguramente no habría producido una nebulosa tan vistosa", sostiene Alba Aller, astrónoma del Observatorio Astronómico Nacional y también coautora del estudio.
EFE.
La Nasa confirmó la teoría del fin del mundo que planteó Stephen Hawking
*Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de EFE, y contó con la revisión de un periodista y un editor.
En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal,
elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada
con
sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando
esta
utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información aquí