Tomas masivas para atacar delitos como la extorsión, el hurto en diferentes modalidades, el tráfico de estupefacientes y hasta control de fiestas clandestinas fueron llevadas a cabo el fin de semana por las secretarías de Seguridad y Gobierno y la Policía de Bogotá.
La idea es, con la ayuda de la comunidad, poner tras las rejas a los delincuentes que están manchando la seguridad de los barrios. El comando Corabastos se tomó el domingo la zona de la central de abastos, dejando un mensaje entre residentes y comerciantes: “Estamos aquí”.
En Kennedy, la Policía desplegó operativos contra el hurto de carros. Así se encontró un deshuesadero en el barrio Bella Vista, gracias a la denuncia de la ciudadanía que reportó el hurto de una motocicleta. Las autoridades activaron el plan de búsqueda con la ayuda del GPS de la víctima y así se halló la ubicación exacta de la moto.
Pero no solo se detectó el vehículo, sino un desguazadero con más de seis motos hurtadas. También, una considerable cantidad de autopartes que, al parecer, iban a ser comercializadas en el mercado negro.
En esta misma localidad, en el barrio Las Delicias, la Policía capturó a tres personas por hurtar un camión. Las autoridades activaron un plan de búsqueda y lograron dar con la ubicación del automotor, donde son sorprendidos sujetos con la mercancía hurtada. El camión está avaluado en 50 millones de pesos, y la mercancía, entre acetona y pegante Urano, en cerca de 136 millones. Los delincuentes fueron dejados a disposición de la Fiscalía.
Finalmente, en uno de los operativos del Comando Nocturno, en Chapinero, fue suspendido un establecimiento que pretendía hacer un evento con más de 500 personas sin cumplir requisitos legales. Tenían previsto realizar la presentación de un reconocido artista y un desfile de modas.
Allí se encontraron pipetas de CO2 al lado de la tarima, lo que representaba un riesgo. Además, no contaba con salidas de emergencia y señalizaciones.
REDACCIÓN BOGOTÁ.