Las llegadas de turistas internacionales a nivel mundial no deberían recuperar sus niveles prepandemia antes del 2024, según el Barómetro de la Organización Mundial del Turismo (OMT) publicado este martes, que prevé un comienzo del 2022 condicionado por la variante ómicron.
De acuerdo con la agencia de Naciones Unidas con sede en Madrid, el número de llegadas internacionales aumentó un 4 por ciento en el mundo el año pasado con respecto al del 2020, debido a una combinación de factores, como el aumento de la tasa de vacunación y la disminución de las restricciones de viaje, gracias a una mayor coordinación transfronteriza y a nuevos protocolos, que ayudaron a liberar la demanda reprimida de viajes.
No obstante, los arribos internacionales siguieron siendo un 72 por ciento inferiores a los del 2019, antes de que comenzara la pandemia de covid (de hecho, dichos arribos estuvieron en diciembre 65 por ciento por debajo de los del 2019).
“El ritmo de la recuperación sigue siendo lento y desigual en las distintas regiones del mundo, debido a los diferentes grados de las restricciones de la movilidad, las tasas de vacunación y la confianza de los viajeros”, explicó la OMT en su Barómetro.
En Europa y América las llegadas de visitantes extranjeros aumentaron en 19 por ciento y 17 por ciento, respectivamente, en comparación con las del 2020.
En Oriente Medio retrocedieron un 24 por ciento, mientras que en la región Asia-Pacífico cayeron hasta un 65 por ciento, y siguen teniendo un nivel 94 por ciento inferior al del 2019.
El despliegue de la vacunación sigue siendo desigual y muchos destinos todavía tienen sus fronteras completamente cerradas, sobre todo en Asia y el Pacífico
Para el 2022, los expertos de la OMT observan perspectivas más “favorables”, si bien todavía el aumento de los casos por la aparición de la variante ómicron, más contagiosa, “van a perturbar la recuperación” al principio del año.
Las llegadas de turistas internacionales deberían subir de “30 por ciento a 78 por ciento” con respecto a las de 2021, aunque seguirán siendo inferiores a las del 2019. Según la mayoría de los expertos, el regreso a los niveles prepandémicos se verá en el “2024 o después”.
El despegue del turismo internacional es esperado con impaciencia por los profesionales del sector, así como por numerosos países cuya economía ha sido golpeada por la pandemia.
Según la OMT, la “contribución económica del turismo” en el 2021 en el mundo fue de 1,9 billones de dólares, muy por debajo de los 3,5 billones del 2019.
Las proyecciones de la OMT indican que los ingresos por exportaciones del turismo internacional podrían superar los 700.000 millones de dólares en el 2021, una pequeña mejora con respecto al 2020, debido al mayor gasto que los turistas hacen por viaje, pero menos de la mitad de los 1,7 billones de dólares que se registraron en el 2019.
Se estima que los ingresos promedio por llegada alcanzarán los 1.500 dólares en el 2021, frente a los 1.300 dólares del 2020.
Este incremento del gasto se debe, según la OMT, al gran ahorro acumulado y a la mayor duración de las estancias, así como al aumento de los precios del transporte y el alojamiento.
Con información de AFP
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