En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información aquí

Suscríbete
Disfruta de los beneficios de El Tiempo
SUSCRÍBETE CLUB VIVAMOS

¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo [email protected] no ha sido verificado. Verificar Correo

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión

Hola, bienvenido

¿Cual es la ciudad colombiana clasificada como la más peligrosa del mundo?
¿Cómo va el juicio al expresidente Álvaro Uribe?
¿Accidente de bus en Calarcá?
Frío inusual en Bogotá explicado por el Ideam

Noticia

La reserva natural que protege el ecosistema de Casanare mediante turismo y créditos de carbono

El Encanto de Guanapalo cuenta con más 9.000 hectáreas de conservación ambiental.

Casanare Chiguiro

Los Chigüiros son una de las especies nativas de la región. Foto: Juan José Ríos/El Tiempo.

Alt thumbnail

Actualizado:

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon
Tres hatos ganaderos de San Luís de Palenque, Casanare, se unieron en 2016 para conformar la reserva natural de El Encanto de Guanapalo. 
El Hato Mata de Palma, Hato Altamira y el Hato Montana reúnen más 9.000 hectáreas en las que trabajan por conservar la riqueza natural, la tradición y la cultura llanera en Casanare, Colombia.
Para la sostenibilidad del proyecto, los dueños de la tierra apuestan por la ganadería tradicional, el ecoturismo y los créditos de carbono que se emiten por conservar los ecosistemas. 
Y es que la región del Orinoco ha cambiado drásticamente durante las últimas dos décadas. La zona que una vez fue crudo epicentro del conflicto interno del país ahora es vista con los ojos productivistas, ante las ventajas que ofrece el llano para el cultivo y la ganadería.
Históricamente, las tierras del llano han sido utilizadas para la ganadería. El problema es que para los usos pecuarios los dueños tienen que invertir en la adecuación de los suelos, por lo que, por lo general, aparece una empresa arrocera ofreciendo un contrato por cinco o diez años, pagan anticipadamente, trabajan la tierra y cuando termina el contrato la tierra queda limpia para el ganado.
Actualmente, Casanare es la región con más cultivos de arroz en el país, con 210.262 hectáreas sembradas en el primer semestre de 2024, según el Dane. 
Uno de los objetivos de los hatos es precisamente garantizar el cuidado del ecosistema de las transformaciones que implica la adecuación del suelo con motivos agropecuarios, como la tala de árboles, la quema de pastizales y el arado de los humedales.
En el caso de El Encanto de Guanapalo tres familiares descendientes de Gerardo Zambrano - quién fuera el dueño de más de 30.000 hectáreas en la zona -, se reunieron con el motivo de conservar el legado de su abuelo protegiendo la cultura y el ecosistema que les había heredado el patriarca. 

Un territorio que proteger

La Orinoquía colombiana es una de las regiones más biodiversa del país. La zona cuenta con, aproximadamente, 1.043 especies de aves, 155 de reptiles, 254 mamíferos, 663 peces, 191 anfibios, 5.411 plantas y más de 680 tipos de insectos.
Babilla Casanare

Babilla en uno de los humedales de la reserva El Encanto de Guanapalo. Foto:Juan José Ríos/El Tiempo.

Los humedales hacen que el territorio sea susceptible a la vida. Como el nivel freático de la zona es muy pequeño, la sabana del llano se inunda apenas hay saturación de agua y en la región llueve durante ocho meses del año, aproximadamente, entre marzo y noviembre.
Todos estos atributos indican que los llanos de la Orinoquía están ubicados dentro del 10 % de las áreas críticas para la conservación a nivel mundial, de acuerdo con el estudio 'Áreas de importancia global para la biodiversidad terrestre, el carbono y el agua', publicado en el portal bioRxiv en 2021. 
Asegurar reservas naturales desde el sector público es una tarea compleja. Los proyectos necesitan, generalmente, de años de procesos y financiación a largo plazo para establecerse. Es por eso que la inversión privada y las reservas de la sociedad civil son indispensables a la hora de pensar en la conservación de los ecosistemas.
Ernesto Roa, ingeniero ambiental y asesor de las actividades pecuarias en la reserva El Encanto de Guanapalo, asegura que la ganadería tradicional de los llanos no es una amenaza para la conservación del ecosistema. 
La ganadería entró al Llano hace más de 300 años. Si las especies fueran tan nocivas, ya habrían acabado con el territorio”.
Casanare Ganado

La ganadería tradicional hace parte de la cultura llanera que El Encanto de Guanapalo protege. Foto:Juan José Ríos/El Tiempo.

Según el ingeniero, los métodos tradicionales de ganadería tienen un menor impacto ecológico que las estrategias modernas que alteran el terreno con el propósito de acelerar los procesos de crianza a menor precio.
“Por ejemplo, los pastos modernos, que pueden llegar a soportar el verano, terminan influyendo en la dieta de los animales y en los procesos de engorde. Con el pasto tradicional, que no soporta igual la sequía, la dieta del ganado mejora y las consecuencias con en el efecto invernadero son menores”.
En los hatos de El Encanto de Guanapalo la ganadería tradicional continúa siendo un eje de financiación del proyecto. Sus procesos de pastoreo implican un menor impacto en la tierra, mejoran la calidad del producto, pero la rentabilidad disminuye en comparación con los métodos modernos.
Es por esto que el proyecto de la reserva también busca financiarse por otros medios sostenibles como el ecoturismo y los bonos de carbono.

Los rumberos de Casanare

Diego Alexander Gutiérrez está recostado sobre una campechana, en el Hato Montana, a unos 110 kilómetros de Yopal. Lleva un sombrero y una camisa azul clara que dice 'Rumberos Yahu', en uno de los bolsillos de adelante. 
Gutiérrez, activo en los procesos culturales de la región desde los 16 años, nombró así a la empresa de recreación y turismo que tiene en el Casanare porque “un rumbero es aquel que conoce los rumbos”.
La empresa del 'rumbero' tiene como objetivo "mostrar el orgullo de la riqueza cultural de Casanare" y funciona como un puente que conecta a los turistas con El Encanto de Guanapalo.
Sobre la campechana, que es una hamaca llanera tradicional fabricada en cuero, recuerda los mitos del llano y habla del silbón: un ente de leyenda que acecha en la sabana cargando los vestigios de su crimen.
Cae la tarde, que es fresca a pesar de la humedad, y pareciera que en el aire no pululan los insectos carnívoros a los que el 'rumbero' se ha vuelto inmune. 
amanecer

La caída del sol desde el Hato Montana. Foto:Juan José Ríos/El Tiempo.

Las experiencias turísticas de la reserva incluyen actividades en caballo, avistamiento de aves y vida silvestre, pesca artesanal, parrandas llaneras, cantos de vaquería, noches de mitos y leyendas, gastronomía de la región y el safari llanero.
El rumbero, yopaleño de 44 años, lleva a muchos turistas desde la capital de Casanare hasta los hatos y los acompaña durante la experiencia en la reserva. Tiene claros los rumbos de la sabana inundable y conduce la camioneta durante el safari llanero.
En El Encanto Guanapalo se pueden avistar los cinco grandes animales del llano, que Gutiérrez avista desde metros sin usar binoculares: el oso hormiguero, la anaconda, el jaguar, el chigüiro y el garzón soldado.
Además, los hatos están poblados de babillas, chigüiros, cerdos silvestres... 

Créditos de carbono

La importancia del cuidado de las reservas reside en que los bosques, humedales y pastizales tienen la capacidad de capturar los gases contaminantes que se emiten en la atmósfera; si esas plantas no son deforestadas o esas tierras no son transformadas, esos gases se mantienen secuestrados y las plantas siguen creciendo y obteniendo mayor capacidad de capturar gases.
En Colombia se introdujo el impuesto al carbono a finales del 2016, por medio de la ley 1819 de la reforma tributaria, que funciona como una compensación al medio ambiente por las emisiones de gases de efecto invernadero, para hacer frente al cambio climático.
Como existen empresas que quieren o tienen que compensar la huella de carbono que dejan por sus actividades, entonces estas pasan a pagarle a los dueños de los predios para que los territorios no se transformen y balanceen el impacto ambiental.
El método, conocido como bonos de carbono, busca garantizar que "por cada peso que le entren a las reservas, los dueños se comprometan a cuidar los territorios de las transformaciones que podrían rentabilizar mejor los predios", dice Edwin Hincapié, biólogo y cofundador de Cataruben.
Reserva natural en Casanare

El Encanto de Guanapalo hace parte de las áreas criticas para la conservación ambiental mundial. Foto:Juan José Ríos/El Tiempo.

Usualmente, las compañías obtienen los bonos por medio de intermediarios que calculan la cantidad de toneladas de carbono que puede capturar el territorio, emiten los bonos y entregan un porcentaje a los dueños de la tierra. 
Según Hincapié, esos procesos con el carbono han atravesado muchos inconvenientes porque se han focalizado en "plata y plata y emitir certificados, lo que ha generado que se pase por encima de muchas comunidades y personas implicadas". 
Sin embargo, en El Encanto de Guanapalo se implementa el modelo de Co2Bio de la Fundación Cataruben, que en vez de comerciar con los bonos, conecta a los dueños de los predios con las empresas que deben compensar sus emisiones a la atmósfera. 
Cataruben, que solamente desarrolla los proyectos en predios privados, trabaja en 1'075.000 hectáreas del país con créditos de carbono, agua y biodiversidad.
Durante la última década, la fundación se ha encargado de investigar las zonas propicias para la conservación, ar a los dueños de los predios, explicar los procedimientos de financiación de los créditos y después conectarlos con las empresas.
"En estos dos años el gobierno logró un solo parque nacional, el de Manacacías. ¿Es suficiente o necesitamos de los privados, ganaderos y agricultores?, la meta de Cataruben es llegar a las 55 millones de hectáreas privadas rurales que hay en el país, apenas llevamos el 2 %", dice Hincapié.
Según el biólogo, actualmente existen muchos procesos que no son sostenibles, sino que se ejecutan bajo la mentalidad de caridad por parte de las empresas, "necesitamos acciones reales, cosas que impacten en el medio ambiente y no tanta actividad con camisetas, termos y gorras, que es lo que terminan haciendo los privados".
Sabanainundable

La protección de la sabana inundable estimula la captura de gases. Foto:Juan José Ríos/El Tiempo.

Una de las empresas inversoras en el proyecto de Co2Bio es Latam, que comenzó su proceso con Cataruben en el 2018 desarrollando una estrategia de sostenibilidad, que es uno de los requisitos de Cataruben para conectar a las empresas con los dueños de los predios. 
"Nos tardamos cuatro años en realizar esa estrategia de sostenibilidad con Latam para que incluyeran la conservación de los humedales en Suramérica", recuerda Hincapié.
La financiación de la aerolínea al proyecto sale del impuesto al carbono que tendría que pagar la empresa si no compensara las emisiones que lanza a la atmosfera desde los exostos de sus aviones y sus automóviles en las operaciones terrestres.
"Del medio millón de toneladas que emite Latam al año en Colombia se compensa el 100 %. Por eso se necesitan terrenos tan grandes, para que un árbol en la mitad de Colombia, un humedal o un pastizal retenga ese gas que emitieron", dice el biólogo de Cataruben. 
María Lara, directora de Asuntos Corporativos de Latam Colombia, asegura que la conexión con Cataruben se dio porque el proyecto era transparente en la vinculación que tiene la comunidad con la empresa. 
"La experiencia que tiene la comunidad en los temas de conservación es un plus muy importante dentro de Co2Bio. A demás de que ellos (los dueños de la tierra) tienen conocimiento de cuánto genera su predio en términos de toneladas de crédito de carbono y pueden conocer bien su territorio. Y lo otro que consideramos importante es la escalabilidad del proyecto, porque permite que se unan más personas".
Actualmente hay más de 300 familias aliadas a Co2Bio para conservar los ecosistemas ubicados en Casanare, Vichada, Arauca y Meta. 
"Cuando nosotros empezamos el proyecto con Cataruben había al rededor de 200 propietarios, cuando llega Latam y genera una sostenibilidad, entonces aparecen otros actores y la proyección nuestra es llegar a los 500 propietarios", señala Lara. 
Latam tiene como objetivo compensar el equivalente al 50 % de sus emisiones totales para el 2030. La ejecución del proyecto en Colombia es vital para la compañía después de que, según su proyección, con Co2Bio capturarán hasta 2.8 millones de toneladas en el 2025.
JUAN JOSÉ RÍOS ARBELÁEZ - ESCUELA DE PERIODISMO MULTIMEDIA

Sigue toda la información de Vida en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon

Conforme a los criterios de

Logo Trust Project
Saber más
Sugerencias
Alt thumbnail

BOLETINES EL TIEMPO

Regístrate en nuestros boletines y recibe noticias en tu correo según tus intereses. Mantente informado con lo que realmente te importa.

Alt thumbnail

EL TIEMPO GOOGLE NEWS

Síguenos en GOOGLE NEWS. Mantente siempre actualizado con las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en Google News.

Alt thumbnail

EL TIEMPO WHATSAPP

Únete al canal de El Tiempo en WhatsApp para estar al día con las noticias más relevantes al momento.

Alt thumbnail

EL TIEMPO APP

Mantente informado con la app de EL TIEMPO. Recibe las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en tu dispositivo.

Alt thumbnail

SUSCRÍBETE AL DIGITAL

Información confiable para ti. Suscríbete a EL TIEMPO y consulta de forma ilimitada nuestros contenidos periodísticos.

Mis portales