Así es la hoja de ruta del hidrógeno como energético sostenible en Colombia

El Gobierno de Colombia, presentó hoy la que será la hoja de ruta . Una acción que marca un hito en el objetivo del país de disminuir sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y lograr la Transición Energética que se ha propuesto el país.

El plan fue presentado en Barranquilla en cabeza del Ministerio de Minas y Energía, en un evento donde estuvieron el presidente Iván Duque, el Ministro de Minas y Energía, Diego Mesa; el Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Tito José Crissien;  la Ministra de Transporte, Ángela María Orozco; el Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Carlos Eduardo Correa; y el alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo.

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En la hoja de ruta, que será clave en el plan de Transición Energética que Colombia tiene trazado para los próximos años, se destaca que el hidrógeno es una pieza clave para alcanzar la carbono neutralidad que Colombia espera lograr en el año 2050.

El hidrógeno es un vector energético que puede ser usado para almacenar y producir energía y que tiene muy bajas o casi ninguna emisión de GEI. Se puede producir como 'hidrógeno verde' que surge a partir de electricidad generada por fuentes renovables de energía mediante un proceso llamado electrólisis; o bien como 'hidrógeno azul' a partir de su captura mediante el uso de combustibles fósiles. 

“El hidrógeno verde complementará la Transición Energética de Colombia aprovechando las energías renovables, tanto convencionales como no convencionales, así como el salto histórico está dando el país en la rápida incorporación de energía eólica y solar. El desarrollo de la economía de este energético, incluyendo la captura, almacenamiento y uso de carbono para la producción de hidrógeno azul, permitirá descarbonizar otros sectores de la economía como la industria, el transporte y la agricultura, apoyando el cumplimiento de los objetivos de reducción de emisiones de gases efecto invernadero. Además, constituye una oportunidad comercial para el país, en un mercado con expectativas de desarrollo de nuevas tecnologías y un crecimiento acelerado”, aseguró el Ministro de Minas, Diego Mesa.

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Se espera que a 2030 el país tenga la capacidad de desarrollar entre 1 y 3 gigavatios (GW) de electrólisis para la producción de hidrógeno verde y pueda producir, al menos, 50 unidades de energía (KT) de hidrógeno azul anuales. 

Otro de los objetivos es alcanzar un 40 % de hidrógeno de bajas emisiones respecto del total del consumido en la industria, y desplegar una flota de entre 2.500 y 3.500 vehículos movilizados a partir de hidrógeno.

Para lograrlo el Gobierno espera movilizar una inversión de entre USD 2.500 millones y USD 5.500 millones durante la década de 2020 a 2030, que crearán entre 7.000 y 15.000 empleos.

“Colombia ha venido avanzando en la Transición Energética en los últimos tres años y está liderando esta transición en la región. Sabemos el potencial que tiene el país en energías renovables, pero también el que tiene el hidrógeno, gracias a la bendición geoestratégica que tenemos y que hace nuestro potencial aún mayor que el de otros países. El desarrollo de este energético, que seguirá consolidando la Transición, traerá además beneficios económicos gracias a la inversión y desarrollo de empleos de calidad”, señaló el presidente Iván Duque.

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El ministro de Ambiente, Carlos Eduardo Correa, destacó el aporte en la reducción de emisiones al implementar tecnologías energéticas como el hidrógeno en sectores industrial y transporte.

"Nuestra meta es reducir en 40 % el carbono negro (hollín que se emite en gran porcentaje en ciudades). Con hidrógeno verde y azul podemos reducir emisiones de forma considerable. En la medida que estas tecnologías avancen podemos hacerlo aceleradamente", dijo el ministro Correa. 

En la construcción de la hoja de ruta del hidrógeno se hizo con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la firma de consultoría I-Deals, y es el resultado del trabajo realizado por los sectores público y privado, en el que participaron 46 entidades nacionales e internacionales, aportando su visión de las oportunidades del hidrógeno en el país.

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El hidrógeno tiene un gran potencial el Colombia gracias a la posibilidad que tiene el país de producir energías limpias por su ubicación geográfica. En ese sentido Colombia no solo podría producir grandes cantidades de hidrógeno sino también exportarlo.

Según señaló Minminas el departamento de La Guajira presenta condiciones idóneas para convertirse en un hub de hidrógeno verde, pues cuenta con un potencial de más de 25 gigavatios (GW) en producción de energía eólica onshore y más de 45 gigavatios (GW) de solar.

Además, en otras zonas el hidrógeno seguirá siendo muy competitivo, alcanzando valores moda de 2,2 dólares por kilogramo a 2030. Estas condiciones dan lugar a una apuesta nacional por el hidrógeno verde con la ambición de desarrollar entre 1 y 3 gigavatios (GW) de electrólisis a 2030.

El hidrógeno verde producido en La Guajira podrá ser destinado a los mercados de Asia (Japón, Corea y China), donde el hidrógeno colombiano competirá con las importaciones de Chile y Australia; también en Europa, donde Colombia competirá frente a países a priori mejor posicionados (Marruecos, Rusia, Noruega y Oriente Próximo); y además a Estados Unidos, país frente al cual se tiene una posición privilegiada.

El hidrógeno es el primer elemento de la tabla periódica y es hoy, también, la promesa de combustible del futuro. Las energías renovables que no se producen a partir de combustibles fósiles están a la merced de las condiciones climatológicas, y en un mundo que se enfrenta al reto del cambio climático (un factor que puede, por ejemplo, secar ríos), el hidrógeno ha surgido como la esperanza de combustible de reserva.

El problema nace porque guardar energía eléctrica en baterías o transportarla por la red colombiana es costoso e ineficiente. 

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Según explica la Decana de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de la Sabana, Martha Cobo, las baterías van perdiendo con el tiempo la carga y las redes del país no están correctamente interconectadas, por lo que el hidrógeno surge como un combustible que se puede producir a partir de la misma electricidad, mediante un método conocido como electrólisis del agua, y que luego produce un combustible que puede ser tanto líquido como gaseoso, dependiendo de lo que se requiera, para posteriormente ser reutilizado. Así funcionaría el hidrógeno verde.

En el caso del hidrógeno azul, producido a partir de combustibles fósiles lo que se hace es que se captura el hidrógeno y se almacena para luego reutilizarse como energético.

REDACCIÓN MEDIOAMBIENTE

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