¿2024 se convertiría en el año más caluroso de la historia? Experto alerta que la humaidad nunca ha vivido algo igual

En julio pasado se batieron récords de calor en todo el mundo. Según Copernicus, el servicio científico del clima de la Unión Europea, fue el segundo mes más caluroso en toda la historia y dos de sus días también fueron los más calientes en el récord diarop mundial. 

“Los últimos 13 meses son los más calurosos de la historia y eso va más allá de la variación individual de un día. Y se debe a causas diferentes: la variación de la energía que llega del sol, ya que en este momento estamos en un máximo solar, con lo que llega más energía de lo normal. Variaciones como los fenómenos de El Niño o La Niña. Pero sería imposible explicar los récords de los últimos meses sin tener en cuenta el aumento de los gases de efecto invernadero”, explicó Carlo Buontempo, director del Servicio de Cambio Climático de Copernicus, en entrevista con 24 en Español .

Según las cifras de Copernicus, julio tuvo una temperatura promedio del aire en la superficie de 16,91°C, eso es tan solo 0,04ºC por debajo del que ha sido el mes más caluroso registrado hasta ahora: julio de 2023. Además, el 22 de julio, con un promedio de la temperatura global de 17,16ºC; y el 23 de julio con 17,15ºC son las cifras más altas que se han registrado en un solo día, según reportó el mismo organismo.

“Hay una posibilidad muy real de que 2024 se convierta en el nuevo año de récord”, explica Buontempo en la misma entrevista. “Esta temperatura nunca se ha alcanzado y, si vamos más allá de los datos que tenemos en el Servicio y miramos todo el conocimiento científico de cambio climático y de paleoclimatología, es muy probable que los últimos año y medio o dos años hayan sido los de más temperatura de los últimos 100.000 años. En contraste, nuestras ciudades tienen 10.000 años o menos, por lo cual toda nuestra cultura y nuestra civilización nunca ha tenido que sobrevivir a un mundo tan caluroso”, concluyó.

En contraste con los reportes de Copernicus en Europa, esta semana la NASA y la istración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) afirmaron que julio fue el más caluroso del mundo (allá había sido el segundo más caluroso).

La disparidad de los datos, que es tan silo unas centésimas de grados, revela la dificultad de crear un registro climático mundial completo, y sobre algunas de las cosas que aún no sabemos exactamente cómo se está calentando el planeta. 

Según Kate Marvel, investigadora física del Instituto Goddard de Estudios Espaciales (GISS) de la NASA, el reto para los analizadores de la temperatura global es que no hay forma de tomar la temperatura de todo el planeta. «No tenemos un único termómetro global con el que podamos medir la temperatura de todo el globo. En su lugar, tenemos un montón de herramientas diferentes que podemos utilizar para medir diversas partes del planeta y diversos aspectos del sistema climático». La NASA y la NOAA utilizan un enfoque ligeramente distinto al de Copernicus.

El programa climático insignia de la UE se basa en un método denominado reanálisis, basado en su modelo climático ERA5. Utiliza ese modelo para crear una previsión, que luego se concilia con los datos recogidos en estaciones meteorológicas a nivel de superficie, satélites y aviones. 

Gracias a este proceso, Copernicus puede producir una imagen casi en tiempo real del clima de la Tierra, incluyendo la temperatura, el viento y las precipitaciones en cada 30 kilómetros cuadrados de la superficie del planeta. En la NOAA, los científicos utilizan las observaciones de las estaciones meteorológicas terrestres y marinas para calcular la temperatura media de la superficie. 

Los investigadores realizan un análisis estadístico para rellenar las lagunas de datos que tiene en cuenta los datos históricos y las observaciones cercanas. Una vez ingeridos y analizados todos estos millones de puntos de datos, la diferencia surge de los márgenes más pequeños: Según la NOAA, julio fue 0,03C (0,05F) más cálido que el del año pasado, según el análisis de la NASA fue 0,02C más cálido, y según Copernicus, julio fue 0,03C (0,05F) más cálido que el del año pasado.

Copernicus dice que este julio fue sólo 0,04C más frío que julio de 2023. Según Gavin Schmidt, director del GISS de la NASA, cada uno de estos análisis mensuales sólo tiene una precisión de unos 0,08 ºC, y las clasificaciones pueden girar en torno a una diferencia tan ínfima como 0,02 ºC.