En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información
aquí
Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión
¡Hola! Parece que has alcanzado tu límite diario de 3 búsquedas en nuestro chat bot como registrado.
¿Quieres seguir disfrutando de este y otros beneficios exclusivos?
Adquiere el plan de suscripción que se adapte a tus preferencias y accede a ¡contenido ilimitado! No te
pierdas la oportunidad de disfrutar todas las funcionalidades que ofrecemos. 🌟
¡Hola! Haz excedido el máximo de peticiones mensuales.
Para más información continua navegando en eltiempo.com
Error 505
Estamos resolviendo el problema, inténtalo nuevamente más tarde.
Procesando tu pregunta... ¡Un momento, por favor!
¿Sabías que registrándote en nuestro portal podrás acceder al chatbot de El Tiempo y obtener información
precisa en tus búsquedas?
Con el envío de tus consultas, aceptas los Términos y Condiciones del Chat disponibles en la parte superior. Recuerda que las respuestas generadas pueden presentar inexactitudes o bloqueos, de acuerdo con las políticas de filtros de contenido o el estado del modelo. Este Chat tiene finalidades únicamente informativas.
De acuerdo con las políticas de la IA que usa EL TIEMPO, no es posible responder a las preguntas relacionadas con los siguientes temas: odio, sexual, violencia y autolesiones
Estos son los verdaderos efectos de la sal en el organismo
Su ingesta en exceso o su deficiencia en la dieta está asociada con riesgos graves de salud.
La OMS recomienda la ingesta de 5 gramos de sal al día para los adultos. Foto: iStock
La sal es un mineral con muchas connotaciones, es utilizado desde condimento culinario, conservante natural hasta cosmético. Sin embargo, su alta o excesiva ingesta se ha asociado con el riesgo de desarrollar hipertensión, primera causa de muerte en el mundo.
Los médicos y expertos en nutrición señalan que pese a la corriente actual que muchas veces sataniza su consumo, es importante conocer lo que dicen las últimas investigaciones sobre su adecuado uso en nuestra nutrición y las porciones recomendadas.
La sal es un mineral conocido como cloururo de sodio y es vital para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo, permite la regulación y homeostasis de los fluidos de nuestro organismo, impulsos nerviosos, correcto funcionamiento de músculos y cerebro.
La sal es un mineral conocido como cloururo de sodio y es vital para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo. Foto:iStock
Algo muy importantes es que la sal contiene yodo, elemento que el cuerpo necesita para producir hormonas tiroideas, que controlan el metabolismo y otras funciones. A cualquier edad, la deficiencia de yodo es la causa más frecuente de bocio (tiroides grande).
Si existe un exceso o déficit, los riñones regulan reteniendo o liberando sodio para evitar desde apatia, letargo, convulsiones e incluso la muerte. El sodio es fundamental para el mantenimiento de la vida, más aún porque nuestro cuerpo no tiene reservas y las debe obtener a través de la dieta.
El sodio se encuentra naturalmente en los alimentos de origen marino, la leche, la remolacha, el apio y la sal de mesa. También se les agrega a los productos procesados, como las galletas, los cereales en empaques, los productos cárnicos o embutidos, los paquetes de frituras, las sopas y las salsas instantáneas contienen también sodio pero en cantidades pocos recomendadas para la salud.
La OMS hace una recomendación de 5 gramos de sal al día para los adultos, lo cual equivale a una cucharadita ‘tintera’
Un producto cárnico, por ejemplo, puede contener en una porción hasta más del 20 % del requerimiento diario. Es decir, que sumado al consumo de otros procesados y de la sal que contienen los alimentos y preparaciones cotidianas, es fácil llegar a sobrepasar la cantidad recomendada por entidades mundiales de salud.
La OMS hace una recomendación de 5 gramos de sal al día para los adultos, lo cual equivale a una cucharadita ‘tintera’, pero, según datos del 2019, en Colombia el consumo promedio de sal en adultos oscila entre 8,5 y 15 gramos diarios, lo que puede afectar seriamente la presión arterial.
Desde el 2006, la OMS obtuvo resultados concluyentes sobre la relación entre consumo de sodio en la dieta y el alto riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, así como al desarrollo de otras enfermedades crónicas.
En un artículo publicado por un grupo de expertos en la revista científica Cardiovascular Research exponen los resultados de una investigación para determinar la posible relación entre la alta ingesta de sal y el estrés. A través de la manipulación del consumo de sal en una población de ratones se observó el aumento de las hormonas vinculadas con la regulación del estrés.
La finalidad principal de este estudio era demostrar la relación entre consumo de sodio y sus implicaciones en la salud humana, tras la cual los expertos hicieron un llamado a los gobiernos para que revisen las políticas en materia de ingesta de sodio en la dieta.
Etiquetado nutricional
En Colombia, aunque no existe una cifra o estudio claro sobre el consumo de sodio en la población, de acuerdo con el último análisis de la situación de salud ASIS de 2021, en el país se presentó un aumento de las muertes por enfermedad hipertensiva entre 2015 y 2018.
Es fácil llegar a sobrepasar la cantidad de sal diaria recomendada por entidades mundiales de salud. Foto:iStock
Una de las herramientas con las que se podrá contar, y que está en proceso de implementación, es el etiquetado nutricional en los empaques de los productos que se venden en tiendas y supermercados. A través de advertencia en color negro en el empaque, el fabricante debe avisarle al consumidor del exceso de sodio del producto que va a llevar.
Si el producto presenta esa advertencia, lo mejor es que se incluya de manera ocasional en la dieta. Por otro lado, si desea regular el consumo de sal en su dieta diaria, por temas de salud o porque ya fue diagnosticado con hipertensión, puede seguir estas recomendaciones:
Consuma de manera ocasional productos procesados, al igual que sopas y salsas instantáneas. Evite o consuma con moderación embutidos y alimentos procesados que en su tabla nutricional excedan los 140 miligramos de sodio. Trate de no tener salero en su mesa, así evitará ponerles más sal a sus preparaciones.
Si las preparaciones de su hogar son saladas, comience disminuyendo gradualmente la sal hasta encontrar un equilibrio. Priorice el consumo de frutas, verduras y alimentos naturales. Recuerde que la sal es vital, no la elimine por completo de la dieta, pero el exceso es perjudicial para la salud, busque un equilibrio y aprenda a disfrutar los sabores naturales de los alimentos.
Sustitutos de la sal
Podemos explorar sustitutos de la sal en preparaciones comunes, de esta manera:
Hierbas y especias: la cúrcuma, el jengibre, la paprika y otras hierbas pueden ayudar a mejorar el sabor de las recetas sin que esto aporte sodio.
Condimentos naturales: ajo y cebolla son una buena forma de darles sabor a las comidas.
Salsas caseras: preparaciones como mayonesa, salsa o pasta de tomate hechas en casa son una buena forma de ayudarle a su salud cardiovascular. Además, aporta más nutrientes al no tener conservantes, colorantes y otros aditivos.
Otros tipos de sal: dado el auge de los alimentos saludables y light hay varias clases de sal que prometen mejorar la salud, como la sal rosada, pero son costosas y similares a la sal común.
Podemos explorar sustitutos de la sal en preparaciones comunes. Foto:iStock
KELLY CARDONA (*)
PARA EL TIEMPO
En Twitter: @familiafitplus
(*) Especialista en Nutrición Deportiva de la International Sports Sciences Association (ISSA).