¿Mucho ruido? Así puede proteger su casa, y sus oídos, de la contaminación auditiva

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) más de 1.000 millones de personas en el mundo, entre los 12 y 35 años, corren el riesgo de perder la audición debido a la exposición prolongada y excesiva a sonidos fuertes, lo cual podría acarrear consecuencias en la salud física y mental, educación y empleo de las personas.

(Lea también: Urgencias por trastornos mentales aumentarían en ciudades ruidosas)

En el caso de Colombia, Bogotá supera los niveles de contaminación auditiva excediendo los rangos, al oscilar entre los 70 a 83 decibeles durante las 24 horas del día, de acuerdo con el informe ‘Fronteras 2022: ruido, llamas y desequilibrios’, desarrollado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. 

Y es que la salud auditiva es fundamental en todas las etapas de la vida y no tener un control adecuado de los sonidos fuertes puede generar repercusiones en la salud cardiovascular, metabólica, sueño, entre otras. Sin embargo, según expertos, el chequeo de enfermedades con médicos o la previsión de riesgos relacionados con la pérdida de la audición es bajo. 

(Lea también: Ruido, contaminante silencioso que afecta la salud en Medellín)

“Millones de adolescentes y jóvenes corren el riesgo de sufrir pérdida de audición debido al uso inapropiado de dispositivos de audio personales y a la exposición a niveles de sonido nocivos en lugares como clubes nocturnos, bares, conciertos y eventos deportivos”, señala la Dra. Bente Mikkelsen, directora del Departamento de Enfermedades No Transmisibles de la OMS. 

Según datos de esa misma organización, la contaminación auditiva comienza a desarrollarse cuando un sonido supera los 65 decibeles, como por ejemplo una conversación en voz alta. Por su parte, los ruidos superiores a los 75 decibeles, como el tráfico vehicular, ponen en riesgo la salud auditiva. Finalmente, aquellos que superen los 120 decibeles, como conciertos y fiestas, pueden generar dolores y molestias. 

De hecho, hay estudiosa que incluso han encontrado una relación entre la contaminación auditiva de las ciudades y los aumentos en casos de trastornos mentales. Una investigación liderada por un equipo del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), en España, concluyó que el ruido urbano se relaciona con un mayor riesgo de sufrir ingresos hospitalarios urgentes ligados a trastornos mentales. Es decir, la contaminación auditiva de las ciudades puede aumentar el número de personas con trastornos mentales que son remitidas por urgencia. 

(Lea también: Contaminación visual y ruido no dan tregua en la ciudad)

En dicho caso, las estimaciones señalaron que el porcentaje de isiones hospitalarias anuales por trastornos mentales ligadas al ruido urbano pueden superar el 5 por ciento del total. 

Pero, ¿cómo protegerse de la contaminación auditiva y qué puede hacer para controlarla en su hogar? Le traemos cinco recomendaciones clave sobre este tema: 

Procure no utilizar electrodomésticos (como la lavadora o la licuadora) en horarios nocturnos, pues en la noche su sonido puede dar la percepción de intensificarse, esto porque en la noche disminuyen gran cantidad de sonidos lo que hace que otros sean más preponderantes es los espacios. 

Define cuáles serán los espacios del hogar destinados para descansar o trabajar. Tenga en cuenta que la contaminación auditiva puede afectar su productividad, además de incrementar el estrés y ocasionar afectaciones de salud. En ese sentido, si usted trabaja en casa, escoja un espacio alejado de los ruidos, donde pueda concentrarse. Y en el caso de la alcoba, trate de contar con aislantes que impidan la entrada de ruido externo, y no utilice dispositivos (como televisores o celulares) con un alto volumen. 

(Lea también: Salud auditiva: consejos para cuidarla y tener sana la capacidad de escucha)

Mejore el aislamiento de su hogar. Identifique en qué espacios de su vivienda puede instalar placas fonoabsorbentes, que ayudan a controlar el ruido y disminuir el eco. Estas placas suelen tener una apariencia estética similar a la de un estudio de grabación de audio, pero hay opciones como las placas fonoabsorbentes Exsound, que son placas de yeso con perforaciones cuadradas, circulares o lineales y que son mucho más estéticas. 

“Posterior a la pandemia del COVID-19, algunas empresas en el país instauraron el teletrabajo dentro de sus políticas de gestión humana. Si bien esta decisión ha representado un aspecto positivo en términos de calidad de vida para los trabajadores, también representa un desafío en cuanto a la necesidad de contar con espacios idóneos para laborar, pues estarán más expuestos a todo tipo de sonidos. En el caso de las empresas, algunas edificaciones cuentan con placas Fonoabsorbente Exsound, que absorben el ruido dentro de un espacio y ayudan también a disminuir el eco, generando espacios más confortables acústicamente. Sin lugar a duda, este tipo de soluciones son ideales para todo tipo de edificaciones, incluyendo los hogares”, asegura Carolina Valencia, product manager de Gyplac.

Como ya se ha dicho, es clave que controle el volumen de los dispositivos electrónicos como televisores y reproductores de sonido en su hogar. En el caso de la televisión, la mayoría de equipos nuevos incluyen un sistema de sonido inteligente que usted puede activar. Mientras que en el caso de los reproductores de sonido, una opción puede ser abrir ventanas y puertas para que el ruido pueda fluir con tranquilidad. 

Si bien es importante que su vivienda esté ventilada, procure que su espacio de trabajo y descanso no tenga las ventanas o puertas abiertas, sobre todo en horarios de alto tráfico vehicular o de construcciones. Esto ayudará a disminuir la entrada de ruido a la casa. 

EDWIN CAICEDO | UNIDAD DE SALUD