El 17 de junio la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas (ACHC) dio a conocer un informe detallado sobre las deudas que todavía tiene el sistema con 221 instituciones hospitalarias.
El estudio reporta que el valor pasó de 16,09 billones de pesos en junio de 2023 a 16,8 billones en diciembre del mismo año, lo que representa un incremento cercano a 705.000 millones de pesos y un 4,38 % en el monto de la cartera. La concentración de la cartera que se encuentra en mora (mayor a 60 días), alcanzó el 54 %.
El informe deja ver que la lista de las principales EPS deudoras en el régimen contributivo, con corte a diciembre de 2023, la encabeza la Nueva EPS, con aproximadamente 2,8 billones de pesos y una morosidad del 44,7 %.
Le siguen EPS Sanitas con una deuda de 985,9 mil millones de pesos y una morosidad del 43,3 % y finalmente EPS Sura con una deuda total de aproximadamente 596,3 mil millones de pesos y una morosidad del 26,7 %.
Cabe señalar que las dos primeras EPS han sido intervenidas istrativamente por la Superintendencia Nacional de Salud y la última ha solicitado un plan de 'desmonte progresivo' para desaparecer por completo del sistema, argumentando la difícil situación económica por la que atraviesa el sector.
Tan solo un día después de las reveladoras cifras, Ana María Vesga, presidenta de Acemi (gremio que agrupa a las principales EPS del contributivo) manifestó a través de la red social X (antes Twitter) que el estudio de la ACHC da cuenta de una crisis sistémica relacionada con la insuficiencia de la Unidad de Pago por Capitación (UPC).
"La UPC es insuficiente. Datos financieros de las EPS para el primer trimestre de 2024 señalan que los colombianos estamos consumiendo en promedio 10 % más de lo presupuestado. De mantenerse esta tendencia y no hay razón para pensar que no será así, el sistema cerrará con un déficit anual de 10 bn cop (billones de pesos)", alertó.
Según el estudio, las EPS del Régimen Contributivo concentran un poco más del 50 % de la deuda total, lo que corresponde a cerca de 8,4 billones de pesos, seguido por las EPS del Régimen Subsidiado que concentran alrededor del 23,2 % del total de la deuda, es decir unos 3,8 billones de pesos.
En tercer lugar, se encuentran los deudores agrupados en la categoría Estado, que concentran aproximadamente 8,8 % del total de la deuda y por último, las aseguradoras por concepto de Soat que concentran el 3 %, junto con las empresas que ofrecen Planes Complementarios y Medicina Prepagada que puntean el 2 %, así como con las Aseguradoras de Riesgos Laborales que registran el 0,3 % de la deuda total.
La deuda de ambos regímenes es de 3,1 billones de pesos
Al ordenar las entidades con mayor volumen de cartera en mora, Nueva EPS es la mayor deudora que tienen los prestadores reportantes, esto acumulando una deuda total en los dos regímenes en los que opera de 3.1 billones de pesos y una cartera en mora de 1,4 billones de pesos, lo que representa una concentración de su cartera en mora de 45,3 %.
En segundo y tercer lugar se encuentran las liquidadas Medimás con una deuda de 669,7 mil millones de pesos y Coomeva con 457,3 mil millones de pesos, ambas con 100% de esta cartera en mora, a continuación se encuentra la EPS Sanitas, cuya deuda total asciende a 985, 9 mil millones de pesos y su cartera en mora a 427,2 mil millones de pesos, lo que equivale al 43,3 % del total de su deuda.
En el quinto lugar se ubica la EPS liquidada Cafesalud EPS, con una cartera total de 360 mil millones de pesos, con el 100 % de mora por estar en proceso liquidatario. En sexto lugar está Coosalud (ambos regímenes) con una deuda total de 650,7 mil millones de pesos y una concentración de cartera morosa del 53 %, lo que equivale a 345 mil millones de pesos.
A continuación, se ubica la EPS Emssanar del Régimen Subsidiado, con deudas por 545,9 mil millones de pesos y cartera en mora de 318,2 mil millones de pesos.
En el octavo lugar se encuentra la deuda conjunta que tienen la Adres (por concepto de reclamaciones Soat) y el extinto Fosyga por un valor total de 419 mil millones de pesos y una concentración de cartera en mora del 75,5 % (316,4 mil millones de pesos).
La insuficiencia de la UPC
En términos sencillos, la Unidad de Pago por Capitación (UPC) es un mecanismo utilizado en el sistema de
salud colombiano para financiar la atención médica de los s afiliados al sistema de seguridad social en salud.
Este sistema asigna un valor monetario por persona afiliada a las Entidades Promotoras de Salud (EPS), basado en factores como la edad, el género y la región geográfica del afiliado.
En teoría la UPC cubre los costos de los servicios médicos incluidos en el Plan Obligatorio de Salud (POS), permitiendo a las EPS istrar los recursos para garantizar la prestación de servicios a sus beneficiarios. No obstante, desde hace varios años el rubro requiere un ajuste por el valor de estos servicios puesto que actualmente resulta ser insuficiente.
Dicha carencia en el valor del rubro ha generado un déficit en el sistema que, acompañado de otros factores, tiene sumido al sector en la que han catalogado como "la más profunda crisis financiera de los últimos 30 años". En efecto, analistas explican que el hueco financiero responde a factores internos del sector como un mal cálculo (insuficiencia) de la Unidad de Pago por Capitación (UPC), un incremento excesivo en la frecuencia de usos por parte de los ciudadanos y, en consecuencia, un desbordamiento por la amplitud del Plan de Beneficios en Salud (PBS), así como deudas atrasadas del Estado al sistema.
A esto habría que sumarle otros factores externos como la presión tecnológica, la inflación, la volatilidad de la tasa de cambio, etc. Un asunto sobre el que las EPS han reiterado que los recursos son insuficientes a pesar de las medidas implementadas para gestionar la siniestralidad.
No obstante, desde julio de 2023 (hace casi un año) Sanitas, Sura y Compensar pedían, desesperadamente, ayuda al gobierno ante la desfinanciación progresiva que empezó un poco antes de la pandemia por covid-19. Por este motivo, sorprende al sector que, ante la carencia de soluciones, la primera entidad hubiese sido intervenida por la Supersalud a principios de abril y las dos últimas estén solicitando su erradicación total del sistema.
Por ahora, expertos temen que se produzca un efecto dominó con el que más EPS sean intervenidas por el Estado o decidan desaparecer. Es preciso aclarar que la Supersalud todavía no aprueba el retiro del sistema de Sura y tampoco la liquidación total de Compesar.