¿Qué hay detrás de los carteles que aparecieron en la Cancillería y varios consulados de Colombia en el exterior?

Este jueves, el Palacio de San Carlos de Bogotá y varias oficinas consulares de Colombia en el exterior amanecieron con varios carteles que transmitían distintos mensajes de alerta: "No más atropellos contra el servicio exterior colombiano" o "ministra, no permita el deterioro de las condiciones laborales de los funcionarios en planta externa con reducciones de hasta el 13% en sus ingresos", se leyó en algunos.

La manifestación la lideraron los sindicatos del Ministerio de Relaciones Exteriores, ante lo que sería una inminente desmejora salarial para entre 500 y 800 funcionarios de la planta externa, desde embajadores hasta conductores. Una situación sobre la que los sindicatos emitieron alertas tempranas desde enero y para la que, a la fecha, no se ha encontrado solución.

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El ingreso del personal del servicio exterior en Colombia se determina a partir de lo que se denomina como "multiplicador de costo de vida" correspondiente a cada lugar de destino. Este multiplicador se actualiza trimestralmente, basándose en información de Naciones Unidas sobre el costo de vida en cada país y la Cancillería utiliza esta información para calcular el ingreso mensual base de sus funcionarios debido a que no ha desarrollado una metodología propia que le permita medir qué pasa en todos los países del mundo para calcular sus propios ingresos.

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En enero de este año, las Naciones Unidas emitieron una circular que modificó dicho "multiplicador". Inmediatamente, se encendieron las alarmas de los diplomáticos porque, aunque la ONU decidió aumentar el salario base de sus funcionarios en un 9,5 por ciento, al mismo tiempo redujo el multiplicador del que dependen gran parte de sus ingresos.

La reducción, según los sindicatos, implicaría una pérdida salarial de hasta el 13 por ciento, aunque en algunos destinos esa caída puede ser incluso mayor. 

"Es una situación gravísima, ha generado una crisis casi que humanitaria en algunos funcionarios del servicio exterior, porque del salario de un funcionario del servicio exterior depende absolutamente toda su familia, que está con él allá. Y las condiciones de vida en el exterior son totalmente distintas, además la sobrecarga laboral", señaló en diálogo con EL TIEMPO Diego Bautista, presidente de la Unión de Funcionarios de Carrera Diplomática y Consular, Unidiplo.

"Esta situación se puso en conocimiento desde enero de este año con la esperanza de que a marzo, antes de que comenzaran a utilizar el nuevo multiplicador, ya se hubiera solucionado", agrega, indicando que el daño ya se materializó, pues los funcionarios recibirán sus salarios de abril con disminuciones.

De acuerdo con Bautista, la salida a este apuro pasa por reflejar el aumento del 9,5 por ciento que hizo la ONU a sus funcionarios en el multiplicador.

Este escenario que se plantea llevó al presidente de la Confederación General del Trabajo (CGT), Jorge Iván Díez Vélez, a hacer un llamado a la ministra Sarabia, que estuvo esta semana en Nueva York para la presentación del informe trimestral sobre la implementación del acuerdo de paz y en las próximas horas llegará a Roma para asistir al funeral del papa Francisco.

"Desde la CGT, hago un llamado a la ministra Laura Sarabia, para proteger los ingresos de los funcionarios de planta externa de la Cancillería. Con algunas decisiones podrían perder hasta el 13% de sus ingresos, lo que perjudica sus condiciones laborales", dijo Vélez.

Para enfrentar esta problemática han venido trabajando conjuntamente la istración de Laura Sarabia, el Departamento istrativo de la Función Pública y el Ministerio de Hacienda. 

Incluso, este jueves hubo una llamada telefónica entre la canciller Sarabia, los presidentes de los sindicatos, la directora de Talento Humano y otros asesores que están revisando el tema. Sarabia instruyó en acelerar las gestiones para solucionar el problema en el menor tiempo posible. 

A día de hoy, dice Bautista, lo más viable es la expedición de un decreto por parte del Ministerio de Hacienda en el que se tenga en cuenta estos factores externos y se recalculen los multiplicadores para que no haya pérdida. "Es importante resaltar que esta modificación es a costo cero. No se está pidiendo aumentar ni siquiera en un centavo los ingresos de los funcionarios, absolutamente nada. Lo que estamos pidiendo es que se mantengan", sostiene.

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En ese sentido, subrayó que "las protestas son acciones simbólicas para hacerles saber a la istración y a la opinión pública la importancia y la magnitud de esta situación".

Otros carteles contenían este mensaje: "En el país de la belleza no se atropellan ni se deterioran las condiciones laborales de los funcionarios que hacen parte del servicio exterior".

JUAN PABLO PENAGOS RAMÍREZ

Redacción Política