En medio de una acalorada discusión, en la que los congresistas se lanzaron duras acusaciones y se recriminaron en fuertes términos, la Plenaria de la Cámara tuvo que aplazar el debate del proyecto de ley que busca que se prohíban las corridas de toros en el país, que se adelantó este martes.
La polémica se encendió luego de que el representante Juan Carlos Losada, autor del proyecto, advirtió que el texto que venía de la Comisión Séptima tenía cambios que desnaturalizaban la propuesta.
“Le cambian la palabra prohibir (las corridas de toros) por la palabra regular, el proyecto de Comisión Séptima venía maltrecho”, expresó Losada.
Los ánimos se caldearon aún más luego de que se presentó una proposición, por parte del representante Fabián Díaz Plata, que modificaban completamente el texto aprobado en la comisión y cambiaba nuevamente la expresión regular por la palabra prohibir.
Varios congresistas de la Comisión Séptima de inmediato pidieron la palabra.
“Eso que se está haciendo es un vicio, se está cambiando completamente el texto que fue aprobado en la Comisión”, expresó el representante de Cambio Radical Javier Vergara.
Posteriormente tomó la palabra la representante del Centro Democrático Jennifer Arias, quien pidió “respeto por los compañeros” y acabar con el “matoneo al que se somete a los representantes”.
“En el debate se debe que tener en cuenta que de las corridas de toros viven muchas familias, hay que pensar en espacios de transición para estas personas”, dijo Arias.
La representante Norma Hurtado, actual presidenta de la Comisión Séptima, también terció en la discusión y aseguró que “se debe respetar la discusión dada por los compañeros en la comisión”.
Al final de la sesión el representante Juan Carlos Losada ripostó de nuevo: “Desgraciadamente en el debate de prohibición de corridas de toros ganaron las artimañas con las que ya habían logrado aplazar este seis veces seguidas, seis semanas seguidas”, dijo.
En marzo pasado, la Corte Constitucional confirmó su decisión de no prohibir las corridas de toros debido a su arraigo cultural en Colombia, decisión que fue objeto de controversia entre defensores de los animales y aficionados a estos espectáculos.
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