La defensa del presidente Gustavo Petro a Ricardo Bonilla por caso de la UNGRD: de nuevo, la tesis del 'entrampamiento'

En una semana decisiva para las finanzas del gobierno del presidente Gustavo Petro, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, vuelve a estar en el ojo del huracán por su presunta participación en el escándalo de corrupción de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). 

(Lea: El gobierno insiste en su reforma tributaria de 12 billones de pesos: ¿tiene los votos en el Senado, que ya hundió el presupuesto?)

María Alejandra Benavides, exasesora del alto funcionario, le aseguró a la Fiscalía que por orden de su jefe buscó a congresistas para que votaran conceptos claves para el Gobierno Nacional. A cambio, se les beneficiaría con tres proyectos. “Él me usó, él usó el hecho de ser ministro de Hacienda, que a él no le importaba el costo que tenía que pagar. Eso lo necesitaban allá adentro”, le dijo la exasesora al ente acusador, en declaración conocida por Noticias Caracol.  

Esa declaración se conoce previo al inicio de la discusión de la reforma tributaria del Gobierno, que busca recaudar 12 billones de pesos para lograr un presupuesto de 523 billones de pesos en 2025. Bonilla es el encargado de sacar adelante esa iniciativa en el Congreso de la República.

Son varios los testimonios en contra del jefe de la cartera de Hacienda y cada vez crecen más los llamados de la oposición para que renuncie. De hecho, la presencia de Bonilla genera más resistencia para el trámite de la tributaria, que no tiene los votos en Senado y tiene en contra voces como la del presidente del Senado, el conservador Efraín Cepeda. 

(Le puede interesar: Efraín Cepeda le responde al presidente Gustavo Petro: 'La falta de ejecución, esa sí es la emergencia económica')

Sin embargo, el presidente Gustavo Petro ha salido a defender en varias oportunidades a su ministro, quien es uno de los petristas 'purasangre' del gabinete. El jefe de Estado ha insistido en que Bonilla es "víctima de otra trampa".

En su defensa, el mandatario resaltó que la labor de Bonilla "ha sido buena" en momentos difíciles para las finanzas públicas y, por ahí derecho, acusó a la oposición de construir un ahogamiento fiscal. Además, señaló a la Corte Constitucional por tumbarle buena parte de la reforma tributaria aprobada en 2022 por inconstitucionalidad. 

"Derrumbar la reforma tributaria que aprobamos, no bajar la tasa de interés real del Banco de la República y pagar, sin consulta al actual presidente, del erario, el inmenso hueco fiscal por no subir la gasolina importaba, cuando subía en el mundo", dijo el mandatario este fin de semana en su cuenta de la red social X. 

Pero sobre este punto la realidad es otra. Parte del déficit fiscal que vive hoy la Nación se da porque el Ejecutivo no alcanzó el recaudo esperado para cumplir con el presupuesto del 2024, por lo que se vio obligado a hacer una reducción de 28 billones de pesos. Y Cepeda, por ejemplo, le ha sacado en cara al Gobierno que la falta de ejecución también es una crisis fiscal.

(Otra noticia recomendada: La tormenta en el gabinete tras aterrizaje de Armando Benedetti en la Casa de Nariño)

"He escuchado voces desde el Gobierno Nacional que nos amenazan con una emergencia económica si no aprobamos una reforma tributaria de 12 billones. ¿Para qué los quieren si tienen 97 billones en bancos sin ejecutar? La falta de ejecución, esa sí es la emergencia económica", dijo el viernes el presidente del Senado. Y es que por ejemplo el Ministerio de la Igualdad, a un mes de que termine el año, solo ha ejecutado el 2 por ciento de su presupuesto para el 2024. 

Pero no es la primera vez que el presidente Gustavo Petro acude a la tesis del entrampamiento. Lo ha usado cuando estalló el escándalo y él mismo defendió a Olmedo López, también cuando su hijo Nicolás fue capturado por el caso de su campaña. 

"Siempre es la misma vagabundería en este gobierno de Gustavo Petro. Cuando no es golpe blando para él, es entrampamiento para sus funcionarios. Debería recordar que son los mismos de su Gobierno los que se están delatando unos con otros. El entramado criminal de la corrupción debe terminar en el 2026", opinó, por ejemplo, el exfiscal Francisco Barbosa.

"Ahora el ministro es víctima de otra trampa: la que se construye entre el concepto neoliberal del marco fiscal y la actitud extorsiva de del parlamento que piden cupos indicativos a cambio de aprobar unos créditos que no van a la inversión pública ni de ricos ni de pobres, sino simplemente, para pagar las deudas de Iván Duque, endeudándose otra vez, es decir con operaciones de Roll Over", afirmó el mandatario en defensa de Bonilla.

Agregó que esa situación "era el diario vivir de los ministros de hacienda, y no era investigado antes, se convierte en delito ahora; en virtud de la corrupción: transforman la víctima en victimario".

El espejo retrovisor ha sido una de las narrativas más usadas por el presidente Petro, quien ha acusado al expresidente Iván Duque de dejar endeudado el país, por lo que su gobierno se ha visto obligado a hacerse cargo de esa deuda. 

"Fake news. Es increíble que sigan mirando atrás sin dejar de asumir sus propias responsabilidades (ya llevan casi dos años y medio con espejo retrovisor). Aclaro de entrada que es este gobierno el que viene aumentando la deuda", dijo recientemente José Manuel Restrepo, exministro de Hacienda del gobierno Duque, a propósito de unas de las menciones del presidente Petro. 

(En contexto: Defensa del ministro Bonilla pedirá a Fiscalía ser escuchada tras menciones de su exasesora María Alejandra Benavides en caso UNGRD)

"Hay que ser responsables. Corrijan el presupuesto mal hecho y retiren la reforma tributaria también mal hecha que está diseñada para elevar los costos de financiamiento y con ello la deuda (fruto de relajar la regla fiscal y con ello aumentar más el riesgo país y la tasa de cambio) y desactivar la economía (por el aumento de costos al sector empresarial y microempresario). Lo anterior llevará a incumplir nuevamente el recaudo porque el crecimiento no se va a dar de la forma esperada", añadió. 

Las declaraciones de Benavides coinciden con los testimonios de Olmedo López y Sneyder Pinilla, excabezas de la UNGRD y señalados cerebros del escándalo de corrupción que se destapó con la compra de unos carrotanques para La Guajira. Según las investigaciones, desde esa entidad habrían salido miles de millones de pesos para presuntamente comprar congresistas a cambio de apoyos para las reformas sociales del Gobierno. Incluso, los expresidentes de Senado y Cámara, Iván Name y Andrés, Calle, están mencionados y ya fueron a declarar a la Corte Suprema de Justicia. 

"En entrega de contratos dirigidos a cambio de lograr el propósito en la Comisión, que el ministro logre el propósito: o saque adelante su proyecto de ley o el tema de interés que corresponda a su cartera", aseguró Olmedo López a la Corte reveladas por Noticias Caracol. 

(También: ‘Él usó el hecho de ser ministro de Hacienda’: exasesora de Ricardo Bonilla dice que el funcionario sabía de la compra de votos de los congresistas en el caso de la UNGRD)

"El ministro había direccionado que estos contratos, estos tres contratos de Cotorra, Saravena y el Carmen de Bolívar, se hacían y aparte el doctor Olmedo me dijo que eran 200 mil millones de pesos más", dijo, por su parte, Pinilla. 

Todo se habría dado en el marco de la comisión de crédito público, conformada por seis parlamentarios, todos salpicados en el escándalo de corrupción. 

Se trata de Liliana Esther Bitar Castilla (Partido Conservador), Karen Astrith Manrique Olarte (curul de paz), Julián Peinado Ramírez (Partido Liberal), Juan Pablo Gallo Maya (Partido Liberal), Juan Diego Muñoz Cabrera (Alianza Verde) y Wadith Alberto Manzur (Partido Conservador). De hecho, varios de ellos renunciaron tras su mención en el caso y se espera que declaren en los próximos días en la Corte. Ya este lunes 2 de diciembre asistió Manrique, quien estaría detrás de unos contratos en Saravena que además habrían, según los señalamientos, sido direccionados a cercanos al Eln para mantener a la guerrilla en la mesa de negociación. 

El ministro Bonilla insiste en su inocencia y pidió a la Fiscalía ser escuchado. 

(Otra noticia recomendada: La puja por la secretaría del Senado y el efecto que podría tener en la elección del próximo presidente del Congreso / En secreto)

"Respeto el trabajo de la Fiscalía y confío en demostrar que eventualmente puedo cometer errores, pero no delitos. Nunca he jugado a esquivar la ley. Mi compromiso con el presidente y las finanzas públicas sigue intacto y no será afectado por esta situación", aseguró este fin de semana en sus redes sociales. 

Por ahora, está por verse el impacto que tendrá el nuevo capítulo del entramado en la reforma tributaria. Pero según ha podido establecer este diario, no hay ambiente y hoy no tiene los votos para superar la prueba en Senado, donde ya se hundió el presupuesto. 

MATEO GARCÍA 

Subeditor de Política