En diciembre de 2019, la enfermera Esmeralda Marín fue encontrada muerta en su residencia, en Neiva, departamento del Huila, de rodillas sobre la cama y con una soga atada al cuello. Su pareja sentimental, Héctor Joel Urbano, aseguró afligido que se trataba de un suicidio y el caso fue catalogado inicialmente de esta manera por las autoridades.
No obstante, la escena de la muerte mostraba un escenario que poco daba muestras de un suicidio: la mujer tenía heridas en los brazos y las piernas y adicionalmente se encontraba esposada, lo que coincidía con un hecho dramático: su pareja era policía y tenía antecedentes de haber golpeado en anteriores oportunidades a la mujer.
Este caso, lejos de ser una situación aislada, muestra el ‘modus operandi’ de muchos feminicidas en Colombia: hacer pasar el hecho como un suicidio.
Así lo demuestra una investigación del Observatorio de Feminicidios de Colombia que, tras revisar publicaciones de medios comunicación, y hablar con investigadoras judiciales y criminalísticas llegó a la conclusión que, si se realiza una investigación forense cuidadosa se puede determinar con facilidad el feminicidio.
“Sin embargo, el esfuerzo de los sujetos feminicidas es tal, que puede ser que el caso quede en investigación por mucho tiempo, y no se pueda determinar si fue feminicidio o suicidio”, indica el Observatorio de Feminicidios de Colombia.
A partir de la observación realizada por esta organización y la revisión de este diario de otros casos, se logran caracterizar al menos siete casos que se han presentado en los últimos años en el país, en los que casos de suicidio pasan a transformarse en investigaciones por feminicidio.
Un hecho que llama la atención es que ,muchos de los hombres señalados de feminicidio involucrados en estos casos se encuentran en su mayoría libres o en detención domiciliaria.
Le puso el cuchillo en las manos para simular un suicidio
Ciudad: Bogotá
Situación del feminicida: En casa por cárcel
Luego de un año y medio de adelantar investigaciones, las autoridades capturaron el 8 de marzo de 2018 a un hombre señalado de asesinar a una mujer, con quien tenía una relación sentimental, el 12 de junio de 2016 en la localidad de Bosa (Bogotá), e intentar hacer pasar el caso, según las autoridades, como un suicidio.
“Posterior al crimen, él coloca a la víctima en una posición fetal y le pone el cuchillo en la mano como si ella se hubiera ocasionado la herida. Luego se dirige a la sala de la casa y se acuesta”, aseguró una investigadora de la Sijin.
Tras el crimen, la madre de la víctima la encuentra y llama a la Policía.
Al detenido le fue imputado el delito de feminicidio agravado en la audiencia; sin embargo, no aceptó los cargos y la juez lo cobijó con medida de casa por cárcel, según lo indicó la Policía.
Escena del crimen alterada
Ciudad: Bogotá
Situación del presunto feminicida: Libre
Angélica Lemos fue hallada muerta en julio de 2014. Inicialmente el caso pasó como un suicidio, no obstante, su mamá afirma que todo obedece a un feminicidio por parte Brayan Hernández, la entonces pareja sentimental de su hija. El caso es materia de investigación pues se encontró que la escena de la muerte de la mujer estaba alterada como si a alguien le interesara borrar pruebas.
Adicionalmente, Brayan Hernández enfrenta otro proceso investigativo tras propinarle 12 puñaladas a quien era su nueva pareja Jessica Marín, en julio de 2018.
Pretende pasar un estrangulamiento como suicidio
Ciudad: Neiva
Situación del agresor: Detenido
La joven empresaria Gina Paola Manrique fue puesta en situación de total indefensión. Su excompañero utilizó una soga y le produjo asfixia por estrangulamiento. El informe forense detectó “astillas de madera en el cabello, y otras adheridas a la moña”, además de golpes en los muslos y los brazos.
Aun así, con las evidencias del brutal ataque, Edgar Alexander Calderón Algarra, persistió después de muerta en la agresión, alteró la escena del crimen y finalmente pretendió hacerlo aparecer como un suicidio. La médico Kelly Alexandra Pastrana Alvarado reveló que la comerciante estaba vestida y maquillada, inusual en un suicida.
Poco después, ante la evidencia, Calderón Algarra aceptó que él la había matado.
Un nudo muy elaborado para ser un suicidio
Ciudad: Tunja
Situación del agresor: Detenido
En abril de 2017, Heidy Johana Ramírez Castillo fue encontrada en su apartamento en Tunja luego de, supuestamente, haberse quitado la vida.
Investigadores del CTI asumieron las investigaciones y descubrieron elementos que daban cuenta de un homicidio. Por ejemplo, detectaron que en el lugar de los hechos faltaban electrodomésticos, dinero en efectivo y el teléfono celular de la víctima.
Adicionalmente, los investigadores establecieron que la cuerda supuestamente usada por la mujer para quitarse de la vida tenía un nudo demasiado elaborado. Un peritazgo solicitado por la Fiscalía concluyó que ese nudo correspondería a los enseñados en instrucción militar y que tenía un grado de perfección del 80 por ciento, algo que Heidy Johana no hubiera logrado por sus propios medios.
Por estos hechos fue capturado Herminson García Rueda, quien era el compañero sentimental de la víctima y trabajaba como soldado profesional. Un juez de control de garantías le impuso medida de aseguramiento de detención preventiva en establecimiento carcelario.
Descubierto por cámaras
Ciudad: Cali
Situación del agresor: Detenido
Alfonso Rubio, el 22 de abril de 2018, afirmó que había encontrado a Paola Andrea, su pareja sentimental, gravemente herida con un disparo en la cabeza y que, al parecer, se había tratado de suicidio. No obstante, fue detenido luego de que la Seccional de Investigación Criminal, realizará una completa investigación que incluyo seguimiento en las cámaras de seguridad, el shut de basura y se hallaran pruebas de sangre en diferentes lugares del apartamento, incluso en el lavamanos.
Murió antes de caer al vacío
Ciudad: Cali
Situación del agresor: Detenido
Yolanda Rojas, madre de Valentina Castro, lo tuvo claro desde un principio. Para ella, su hija no se suicidó aquel 19 de agosto de 2018, como lo trató de hacer creer su yerno, Sebastián Vallejo. Yolanda siempre fue enfática y no titubeó para asegurarlo: “¡A mi hija la mataron!”.
Luego, 16 meses después, la justicia le dio la razón y las autoridades cambiaron la versión entregada en esa ocasión a los medios de comunicación. Luego de un estudio detallado de Medicina Legal, se comprobó que la joven de 23 años estudiante de Medicina no se tiró del quinto piso de un edificio en el sur de Cali, sino que alguien la lanzó. Y el principal sospechoso es Sebastián, quien en todo este tiempo acuñó la versión del suicidio. La mujer, según la investigación, había sido golpeada y ya se encontraba sin vida antes de ser lanzada al vacío.
Asfixia provocada por su pareja
Ciudad: Santa Marta
Situación del agresor: Detenido
La historia del supuesto suicidio de una mujer el 10 de octubre de 2018, en el barrio María Eugenia (Santa Marta) resultó ser, según las autoridades, un caso más de feminicidio. El día de la muerte de la mujer, el esposo, identificado como Breisner Pérez Torres, la condujo hasta una clínica de la ciudad en medio de lágrimas informando a los médicos que la halló sin respiración en la cama con una blusa que supuestamente usó para quitarse la vida.
Sin embargo, tras practicarle la autopsia a la mujer, se encontró que tenía signos de agresión física y asfixia provocada por otra persona. Pérez Torres, quien pagaba condena por abuso sexual de menor de 14 años, fue recapturado ahora por el feminicidio de su pareja.
“Es importante que no se revictimice a las víctimas culpándolas de su muerte cuando hay situaciones que llevan a concluir que pudo ser un feminicidio, el aparato judicial, los medios de comunicación y la ciudadanía deben asumir consciencia social con énfasis en la protección de los derechos de las víctimas (las cuales generalmente son mujeres), para que antes de establecer causas poco reposadas y buscando dar una primicia (equivocada) se pueda cotejar todo el contexto para evitar que los asesinos de sus parejas hagan la parodia de viudos consternados”, dijo en una columna del periódico El Heraldo la psicóloga y magister en asuntos de género Fabrina Acosta.
Proyecto de ley
Tras la denuncia dada a conocer por EL TIEMPO, a partir de los datos de organizaciones como el Observatorio de Feminicidios, algunos congresistas anunciaron acciones legislativas para evitar que se presenten estos casos.
"Estos casos se presentan por la ausencia de unos protocolos que permitan abordar desde el principio la investigación en caso de haber fallecido una mujer bajo la presunción inicial de que sea feminicidio y no suicidio, por eso invito a mis compañeros a que me acompañen en un proyecto de ley para cerrar la puerta a que se sigan pasando feminicidios como si fueran suicidios", manifestó el congresista César Lorduy.
JAVIER FORERO ORTIZ
Redacción Política