La semana pasada Israel entró en la fase de salida de la cuarentena, y el Gobierno empezó a tomar medidas que alivian las restricciones que tenía la población desde hace más de un mes.
Israel fue uno de los primeros países en responder de manera rápida al virus, primero implementando el aislamiento obligatorio para todos los extranjeros y ciudadanos que llegaban al país y posteriormente cerrando sus pasos de ingreso. Adicionalmente, gracias a la elaboración de los estudios epidemiológicos se logró realizar rápidamente aislamientos inteligentes: en forma individual, y después en barrios y en ciudades de nivel de contagio muy alto.
Gracias al valioso trabajo de la unidad del Ejército que es responsable de la gestión del campo civil, se utilizaron nuestras capacidades en temas de localización y mapeo para que a través del uso de la tecnología se hiciera más efectiva la cuarentena. Estas aplicaciones tecnológicas permitieron ubicar posibles personas que estuvieron expuestas a contagiados por covid-19 y así avisarles que debían entrar automáticamente en aislamiento preventivo.
Desde que se detectó el primer caso de coronavirus en Israel, el 27 de febrero, la curva de contagio subió de una manera constante. Pero la semana pasada la tendencia cambió y se contabilizó un número más alto de personas recuperadas que de contagiados. Por eso creemos que estamos entrando en la fase de salida.
El sistema de pruebas masivas es uno de los más altos del mundo. También logramos abastecer de manera efectiva los faltantes en suministros médicos.
En este punto es importante destacar cómo Israel ha logrado reducir la curva de contagio y cuáles son las razones por las que el número de personas fallecidas es tan bajo. En primer lugar, el sistema de pruebas masivas es uno de los más altos del mundo. De otro lado, Israel cuenta con una sociedad joven, al tener solo un 11 por ciento de población mayor de 65 años. Así mismo, respondimos de una manera muy rápida y asertiva a esta pandemia y también logramos abastecer de manera efectiva los faltantes en suministros médicos.
Después del confinamiento y tras varios días de toque de queda decretados por el Gobierno israelí, se ha decidido aplacar un poco las medidas de aislamiento y entrar así en la fase de salida, que proyecta volver a finales de mayo a la total reactivación económica y a la vida cotidiana, bajo las instrucciones de salud pertinentes.
En una primera fase, el Gobierno autorizó la apertura de instituciones de educación especial en grupos de hasta tres niños. También realizó un aumento de la tasa de empleados en las oficinas y otros lugares de trabajo del 15 al 30 por ciento, permitiendo la apertura de la industria y de empresas de alta tecnología, siempre que cumplan con lo que Israel denominó la ‘etiqueta púrpura’, un estándar de bioseguridad que ha implementado el Gobierno en relación con el covid-19. Algunas tiendas de electricidad, comunicaciones, textiles y ópticas podrán abrir, junto con los negocios de alimentos y farmacias.
Los colegios seguirán cerrados. Se permitirá que hasta tres familias compartan servicios de cuidados a menores. Se podrá hacer deporte y ejercicio en parejas a una distancia de hasta 500 metros de su lugar de residencia. También se incrementa el flujo de transporte público.
Por ahora se les pide a los adultos mayores y personas con antecedentes médicos no salir de sus casas y a los mayores de seis años, utilizar guantes y tapabocas en espacios públicos.
Esta flexibilización de las restricciones seguirá avanzando mientras la curva de contagio siga bajando. En caso de que las cifras se vuelvan a incrementar, se volverán a tomar las medidas de confinamiento obligatorio.
Esperamos estar siguiendo la dirección correcta en la salida de la cuarentena y de las amenazas del covid-19, y así poder aportar nuestros conocimientos a países amigos como Colombia.
Christian Cantor
Embajador de Israel en Colombia