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Edmundo González, la antítesis del chavismo que defiende ser el presidente electo de Venezuela

El opositor pasó, en ocho meses, de ser una figura desconocida a desafiar a Nicolás Maduro. Perfil.

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Carlos José Reyes García

SUBEDITOR DE INTERNACIONAL09.01.2025 09:43 Actualizado: 09.01.2025 13:16

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En menos de 12 meses, Edmundo González Urrutia pasó a ser prácticamente un desconocido en Venezuela a convertirse en la esperanza de cambio en el país al enfrentarse, y ganarle, según defiende, al chavismo en las urnas.

(Vea también: EN VIVO Venezuela hoy | Urgente: María Corina Machado fue detenida por el régimen de Nicolás Maduro; Edmundo González exige liberación)

“Esto fue absolutamente inesperado para mí y, por supuesto, no lo busqué”, le confesó a este diario el exdiplomático de 75 años cuando describió lo que sintió el día que lo nombraron rival de Nicolás Maduro para las elecciones presidenciales del 28 de julio en 2024.

Aunque la oposición demostró con actas en mano que ganaron las votaciones con más de cuatro millones de sufragios de diferencia, el Consejo Nacional Electoral, de corte oficialista, insiste en que Maduro es el dueño en el poder por los siguientes seis años sin pruebas de su victoria y a pesar del rechazo internacional.

Así las cosas, Edmundo y la oposición liderada por la figura de María Corina Machado –inhabilitada para ejercer cargos públicos- lograron en estos últimos meses derrumbar la idea de que el chavismo aún ostenta el apoyo popular que solían tener en la época de Hugo Chávez.

“La oposición consiguió después de 26 años demostrar que la revolución bolivariana no cuenta con el apoyo electoral de la población y que, en su lugar, tuvieron que decantarse por una salida autoritaria”, le explicó a este diario el analista político Ronal Rodríguez.

María Corina Machado y Edmundo González en las movilizaciones en Caracas. — María Corina Machado y Edmundo González. Foto:AFP

La oposición consiguió después de 26 años demostrar que la revolución bolivariana no cuenta con el apoyo electoral de la población y que, en su lugar, tuvieron que decantarse por una salida autoritaria

Ronal RodríguezAnalista político

González se convirtió entonces en una pieza clave de una estrategia con la cual la oposición logró, en ocho meses, plantearle al chavismo un reto mayúsculo. Más ahora cuando Maduro revalide este 10 de enero una cuestionada reelección que no reconocerán Estados Unidos, la Unión Europea y un grupo de países de América Latina.

¿Cómo pasó Edmundo González de ser un desconocido en Venezuela a poner en jaque a Nicolás Maduro?

El camino de Edmundo a la presidencia ha estado plagado de obstáculos, persecución a su círculo familiar y un asedio que lo llevó a huir del país y asilarse en España en septiembre.

Nacido en La Victoria, una pequeña ciudad a unos 110 kilómetros de Caracas donde en 1812 se desarrolló una de las batallas más heroicas de la guerra de independencia, González Urrutia vivió y estudió allí hasta que se trasladó a la capital para comenzar la universidad.

Se graduó en Estudios Internacionales en la prestigiosa Universidad Central de Venezuela (UCV) para luego ingresar a la Cancillería.

Antes de ser ungido en abril pasado como el candidato presidencial de la oposición, los detalles de su vida eran más bien escasos y pocos recordaban que había hecho parte del servicio diplomático venezolano en los años 90.

Como diplomático, vivió en Bélgica y en Estados Unidos. Además, fue embajador en Argelia (1994-99) y en Argentina (1999-2002) hasta que llegó Chávez al poder y fue relevado de su cargo.

En el despacho que tiene en su casa destaca un cartel con una frase en latín: "Verba volant, scripta manent", una máxima latina que significa "las palabras vuelan, lo escrito permanece".

"Trabajé con un embajador que me decía: 'Tú tienes que tener un logro más en la vida. Que todo que lo que hagas, todo lo escrito, queda, y las palabras vuelan'", explicó a la agencia AFP González sobre el significado personal de esa frase.

Quizá por eso, el ahora llamado presidente electo de Venezuela por buena parte de la comunidad internacional parece dejar grabado su nombre en la historia de la nación.

Nicolás Maduro y María Corina Machado y Edmundo González. Foto:EFE Y AFP

Se sabe que fue asesor de asuntos políticos de los partidos opositores y guio el gran triunfo electoral que tuvo la oposición en las elecciones Legislativas del año 2015, aunque desde un rol tras bambalinas.

Ya en 2023, cuando María Corina Machado resultó elegida en la consulta opositora de octubre de ese año para enfrentarse a Maduro, las sanciones que el chavismo le impuso impidieron a ella inscribir su candidatura.

Entonces, Machado nombró a Corina Yoris, una filósofa de 80 años que era casi su tocaya, como su reemplazo. Pero, el oficialismo siguió poniendo trabas y la académica tampoco pudo concretar las aspiraciones.

Fue entonces cuando salió a relucir el nombre de Edmundo González, quien se había inscrito como candidato “provisional”.

El diplomático nunca fue ni el plan A, ni el B, pero como en la política venezolana cualquier cosa puede pasar, la decisión sobre su candidatura se tomó in extremis cuando faltaban pocas horas para el cierre del plazo para sustituir candidatos en la boleta electoral.

Su postulación en principio era temporal, lo que se conoce en Venezuela como "candidato tapa". "Lo que no sabían ellos era que esa 'tapa' se iba a convertir en frasco, y aquí estamos", suele decir González al referirse sobre este procedimiento que lo terminó llevando a estas instancias.

Este discreto diplomático, que no pierde la compostura al hablar, nunca imaginó que pudiera ganarle a Maduro en unas votaciones sin haber concursado antes por un cargo popular. Y es que hablar ante multitudes nunca ha sido fácil para él. De hecho, suele leer sus discursos en un tono monótono y muy rara vez improvisa.

Edmundo González muestra las actas de votación. Foto:ARNULFO FRANCO / AFP

"González es la antítesis del chavismo, del madurismo y del politiquero tradicional. Es un hombre culto, honesto, familiar, sin dobleces y sin pizca de populismo", escribió el analista José Toro Hardy para explicar qué hay detrás del éxito del candidato.

Si bien prefiere que las cámaras y los micrófonos apunten a Machado, desbordante de carisma y alma con la que le trasladó su capital político, durante estos meses no se ha amilanado y menos ahora que ha estado de gira entre Europa y países de América para llevarles las actas de votación que validan su triunfo a los principales líderes del mundo.

Lo cierto es que González logró lo impensable gracias a la creciente popularidad que Machado ya había amasado durante estos últimos años de hacerle oposición al chavismo.

El reto más grande (para Edmundo y la oposición) sigue siendo la falta de reconocimiento diplomático a mayor escala y el apoyo institucional que Maduro mantiene a nivel nacional. Siempre y cuando esto siga así, un cambio de poder seguirá siendo prácticamente imposible

Manuela jiménezControl Risks

Eso sí, las pruebas de su triunfo se las debe a los miles de testigos repartidos en las mesas de votación que, contra todo pronóstico, y de forma coordinada, recabaron las actas que validaron su triunfo, a pesar de que la autoridad electoral venezolana nunca reveló el reconteo de votos.

Los desafíos que aún tiene la oposición en Venezuela para no claudicar después del 10 de enero

Después del 28 de julio, el chavismo ha apretado las tuercas de la represión y tanto Machado como Edmundo tuvieron que irse a la clandestinidad. El líder opositor se vio obligado a salir del país y huir España, donde recibió asilo político.

"Venían por mí", dijo ante la prensa cuando la prensa le preguntó su razón de su exilio. Desde el viejo continente logró que la Unión Europea reconociera su triunfo el año pasado y, ahora, en el inicio de este 2025 emprendió una gira en Argentina, Uruguay, Estados Unidos y Panamá que no han hecho más que sumarle apoyos en la región.

Por todo esto, el chavismo ofreció 100.000 dólares de recompensa por su captura y trata de evitar a toda costa que Edmundo regrese a Venezuela para cumplir su promesa de ser el presidente que escogió la ciudadanía.

De hecho, las autoridades estrecharon la persecución sobre su familia y Rafael Tuderes, su yerno, fue detenido en extrañas circunstancias este 7 de enero, cuando hombres encapuchados lo detuvieron en Caracas y se lo llevaron en una camioneta plateada.

A pesar de ello, Edmundo no claudica en su intención de convertirse en el próximo presidente venezolano, aunque su futuro aún tiene un panorama incierto.

“El reto más grande (para Edmundo y la oposición) sigue siendo la falta de reconocimiento diplomático a mayor escala y el apoyo institucional que Maduro mantiene a nivel nacional. Siempre y cuando esto siga así, un cambio de poder seguirá siendo prácticamente imposible”, puntualizó Manuela Jiménez, analista asociada de Control Risks.

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