Descubrieron una espada samurái del siglo XVII en una excavación de Berlín

Un equipo de arqueólogos de la Oficina Estatal de Preservación de Monumentos de Berlín desenterró una espada samurái del siglo XVII durante excavaciones en la localidad de Molkenmarkt. Este hallazgo sorprendente tuvo lugar en lo que solía ser una bodega del siglo XX, un área que sufrió daños considerables durante los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.

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La espada, identificada como una Wakizashi—un arma secundaria usada por los samuráis para el combate cuerpo a cuerpo y el acto ritual del seppuku—, fue encontrada entre escombros de la guerra. 

Este tipo de espada complementaba a la katana y estaba reservada para los dignatarios en la sociedad del Japón feudal. Lo notable de este artefacto es su conservación excepcional, incluyendo restos de madera y textiles en el mango y decoraciones que reflejan la cultura y la religión japonesa de la época.

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Expertos del Museo de Prehistoria e Historia Temprana realizaron un examen detallado del arma. En la virola de la espada se descubrió un motivo representando a Daikokuten, la deidad japonesa de la fortuna y la guerra, indicando la probable veneración de esta figura por parte del dueño original. Además, en la guarda de la espada se encontraron decoraciones de crisantemos y líneas de agua, características del periodo Edo.

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Matthias Wemhoff, arqueólogo estatal de Berlín y director del museo mencionado, expresó su fascinación por el hallazgo: “Este hallazgo muestra una vez más los sorprendentes objetos que esperan ser descubiertos en el suelo de Berlín. ¿Quién podría haber imaginado que en una época en la que Japón estaba aislado y apenas llegaban viajeros europeos al país, un arma tan usada durante mucho tiempo y tan ricamente decorada terminaría aquí en Berlín?”.

La investigación sugiere que la espada podría haber sido un obsequio diplomático durante la Misión Takenouchi en 1862 o la Misión Iwakura entre 1871 y 1873, reflejando un intercambio cultural profundo y poco documentado entre Japón y Europa. 

Los trabajos de restauración están en marcha, incluyendo radiografías para identificar marcas de forja, aunque se reveló que el mango no era original de la hoja y fue añadido posteriormente.

La Nación (Argentina) / GDA